La oscuridad bajo un par de esmeraldas.
Y eras así: una mueca monótona, algo triste y cansina.
El triángulo casi perfecto de tu nariz resaltaba aún más la asimétrica distribución de tus pecas; tus labios, siempre secos y quebrados; tus ojos, profundos como un pozo, pero a la vez tan brillantes que me hacían pensar que quizás la perfección sí existe
y está formada por millones de pequeñas cosas imperfectas.
(sí, después de tanto tiempo estoy otra vez. muchas cosas están pasando y tengo menos tiempo y menos inspiración, aunque quizás lo segundo sea hasta cierto punto positivo. los quiero<3)
YOU ARE READING
Voces
PoetryLas palabras comenzaron a acumularse en mi garganta, impidiéndome respirar. Fue entonces cuando decidí escupir este par de versos torcidos.