Capitulo 10.

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-Entonces te gusta el chiquillo. -dice Hoseok sonriendo.

-¿Te estas escuchando?

Yoongi rueda los ojos y bebe la limonada que había ordenado al llegar.

Aún no lograba explicarse porque siempre iba a aquel lugar en busca de ayuda de la persona más estúpida (o al menos eso era Hoseok para él)

-Espera un segundo, debemos buscar una segunda opinión. 

Hoseok se levantó y fue en busca de Seokjin, nadie estaba detrás de la máquina registradora ya que el lugar estaba completamente vacío, como siempre.

-Buenas tardes Yoongi, Hoseok me dijo que tienes problemas.

-Bah, como siempre exagerando, no son problemas... solo pido consejos para un amigo.

-El cual le gusta. -aclara Hoseok.

Seokjin abre los ojos en demasía y aclara su garganta.

-¿Te gusta un chico?

Yoongi vuelve a rodar los ojos y niega.

-Que no es así, solo estoy preocupado por él.

-Háblame sobre el chico Min, solo así podré entenderte.

-Bueno, él tenía un novio y rompió con el porque no quería que se distrajera ya que se iba al extranjero por estudios, al parecer no lo supera porque recientemente estuvo en Corea y se tuvo que volver a ir, lo vi deprimido y lo invite a mi casa...

Seokjin lo interrumpió.

-Si, te gusta... o al menos te trae.

-¿Qué?, pero si...

-Yoongi, solo escúchate... ¡jamas invitas a nadie a tu casa!, ni siquiera a Hoseok, ¡y es tu mejor amigo!

El mayor tenía razón en lo que decía, él jamás en la historia había llevado a nadie a su departamento... literalmente.

-Debo irme. -dijo Yoongi confundido.

***

Jimin tomo esa tarde en especial para estar junto a Sooyoung, la cual le había insistido varias veces que fuera a ver una película con ella porque usualmente ya no salían y se sentía excluida de su vida.

El entusiasmo que obtuvo la chica durante lo que quedaba de día alegraba a Jimin, lo mantenía distraído de cualquier tipo de problema.

-¿Podemos ir por unos helados? -Sooyoung esbozó esa típica sonrisa suya, tan brillante y hermosa.

-Por supuesto que si, ¡pero no te vayas a comer el mío!

Sí, Sooyoung tenía la mala maña de pedir un sabor de helado distinto al de Jimin y antojarse del ajeno a penas terminaba de comerse el suyo.

-¡Oyeee!, no sería capaz de algo así... -dijo la chica colorada.

-¡La última vez te comiste el mío! -chilló Jimin.

-Solo lo probé -aclaró la chica- esos pantalones deben estar matándote... -dijo carcajeando sin parar mientras sacaba su celular-.

-¿Por qué me tomas fotos? –preguntó el rubio fingiendo enojo.

-¡Obvio para recordar! –la chica no dejaba de reír, porque de verdad las piernas de Jimin parecían estar asfixiándose.

-Te odio.

-Me amas. –contestó sacándole la lengua.

Después de ir por aquellos helados se fueron directo a sus casas, tan agotados que se quedaron rendidos en sus respectivas camas.

El celular de Jimin no dejaba de sonar, como este estaba en su quinto sueño no le prestó atención, pero alguien más si.

-Aish... este torpe no puede hacerse cargo ni siquiera de su propio celular -dijo tomando el aparato con fastidio- bueno, ¿quien habla?

-¿Quien eres tú?, no suenas como Jimin.

-Es porque no lo soy grandísimo idiota, soy su hermano.

El chico que hablaba por la otra linea carraspeo un poco y siguió hablando.

-Es que bueno... tengo algo que le pertenece y me gustaría entregárselo. 

-Si aja, como sea, primero dime quien coño eres. -Taehyung se sentía irritado por el día que había tenido, así que quien mas que un desconocido para descargar toda su rabia.

Por lastima ese desconocido era Min Yoongi, y a Min Yoongi no lo trataría como un perro callejero.

-Mira mocoso, eso no es de tu maldita incumbencia, necesito hablar con tu hermano no contigo, si esta ahí dímelo para no seguir perdiendo mi tiempo con un ser como tú.

Taehyung quedó boquiabierto ante la agresividad con la que había sido tratado.

-Bah, cálmate viejo, ya te lo paso.

Tae subió las escaleras y entró en la habitación del rubio sin ningún tipo de delicadeza.

-Oye Jimin, despierta, alguien te llama.

El nombrado anteriormente se levanto con los ojos aun cerrados y tomo el celular.

-¿Quien es?

-Lo siento tanto, no sabía que dormías...

-¿Yoongi?

De repente a Jimin se le quitó el sueño que tenía y abrió los ojos de golpe.

-Dejaste algo que creo es importante para ti en mi casa... ¿podemos vernos?


¡Devuélveme a mi novio!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora