El destino de Cupido - Segundo Libro - [Editando]

Capitulo 30: Marcas de una buena noche

Maratón 4/?

Espero que conozcan a Manuela 😂😂 por qué la van a tener que llamar para este capítulo... 😏🔥

Calle acostó a la chica en la cama, dejando de besarla por unos momentos. Para quitarle el suéter, dejándola en el sostén color vino que llevaba. Está contempló el cuerpo torso de la chica, pues el la primera vez que lo veía hacia, de esa manera debajo de ella.

– Me matan tus curvas – Esto musitó inclinándose y besando el cuello de la chica, con mordidas, dejando las marcas en este, mientras Poché gemía bajito con la respiración entre cortada.

– po-por fa-favor – Poché suplicó, moviendo sus brazos y agarrando la sábana a ambos lados de su cabeza.

Calle sonrió por la desesperación de esta, bajando sus manos sin detenimiento a la parte baja, y entrando por el pantalón, dejando a un lado las bragas, mientras introducía un dedo, con un ritmo circular, haciendo que la chica se estremeciera.

– ~Más – La peli-rosado gimió, llevando una mano hacia su ropa, desabotonando el pantalón.

Calle retiro su dedo, ocasionando un gruñido de la chica, y una mirada asesina hacia ella. Está no se inmutó a la reacción de la otra, mientras le quitaba las piezas de ropa inferiores. Una vez estás fueron removidas del medio, se inclinó una vez más, besando a la chica, pidiendo pasó con su lengua.

Su mano volvió al lugar donde estás, introduciendo dos dedos, sacándolos, y metiéndolos, una acción que repitió varias veces. Poché llevó sus manos hacia la chica, jalandola más cerca, mientras sentía cada vez más cerca su límite. La peli-gris añadio un dedo más a la fiesta, el cual causó que la contraria, presionará sus uñas en la espalda de esta, causando unas leves marcas, en las cuales brotaron gotitas de sangres.

Calle gimió al sentir las uñas de la contraria en su piel, está bajo besando el cuello de la peli-rosado nuevamente, mientras sentía como las paredes de la chica apretaban sus dedos. La peli-gris dió unos últimos movimientos de arriba abajo, y la peli-rosado arqueó su espalda hacia arriba, consigo bajando las manos un poco de presión en la espalda de esta, dejando un camino rojo, muy notable.

El gemido se apoderó de la habitación, imposible mantenerlo dentro de ella, mientras Calle solo relamia sus labios, aún sin satisfacer su lujuria, sacando un dedo, y manteniendo dos dentro de la chica, causándole pequeños orgasmos uno tras otro.

– ~Joder... ~ ¡Calle! ~ mierda – Poché gemía llevando uno de sus brazo y mordía sus propios dedos, intentando de opacar un poco sus gritos, pues aún había visita.

Calle decidió sacar sus dedos, dejando que la chica se tranquilizara, y recuperará el aire perdido. Está llevo sus dedos directo a su boca, limpiando los, mientras sentía su espalda arder un poco, con otros rasguños, nuevos.

Una vez Poché logro tranquilizar su respiración, Calle la observó, sus ojos oscuros, llenos de lujuria, pasión y deseó.

– Da te la vuelta – Fue lo único que comentó, y la otra hizo casó.

Una vez lo hizo, Calle se inclinó, besandola desde el la parte baja de la espalda, hasta el sostén, donde utilizo sus dientes para soltarlos. La peli-rosado se inclinó un para hacia arriba, quitándose la pieza de tela, y arrojándolo a quien sabe donde, mientras la otra apartaba el pelo de esta de su camino, y seguía besandola, dejando una mordidas más profundo, en los hombros.

– ~Oh dios... – Poché gimió, midiendo la sábana.

Calle dirigió su mano, rozando uno de los dedos por la espina dorsal de la chica, antes de desviarlos y pasar a la parte delantera, tomando uno de los senos en sus manos, apretando los y masajenado los. Luego de unos minutos, dejó lo que hacia, desviando su mirada hacia el tracero de esta, llevando su mano a una de las nalgas y apretaba, para luego golpearla dos veces, causando que la chica pronunciará su nombre, más alto.

Está bajo, dejando un beso en la marca roja que se le había formado, antes de morder lo. Seguido de esto, volvió a introducir dos dedos en la chica, mientras regresaba hacia arriba, y pasaba su lengua en la oreja de la chica.

– ~Calle ~ Calle – Está repetía, no soportando la segunda ronda – ~ Me ~Me vengo – Está gimió entre dientes.

Cuando iba a llegar a su límite, Calle se detuvo,respirando con pesadez, mientras observaba a la chica con ganas de matarla. La peli-gris se retiró de la cama, desnudandose, mientras veía como Poché se daba la vuelta, llevando su propia mano hasta su feminidad.

– Aún que esto se una escena excitante para ver – Calle comentó con una voz ronca, sentándose frente a la chica retirando la mano – No te lo puedo permitir – está gruño.

– Tú te tardas demasiado – Poché comentó frustrada, y trabando se en sus propias palabras, pues el licor aún seguía afectando en su sistema.

Calle tomo a la chica de los muslos, jalandola hacia ella, juntando su feminidad con la contraria, ambas gimiendo al sentir lo mojados y caliente que estaban. La peli-gris empezó a mover su cintura, haciendo frotar sus parte más sensibles.

Poché no pudo evitar sentirse una con Calle, al llegar al límite junto con la chica, ambas dejando salir un grito lleno de placer y satisfacción. La peli-gris colapso al lado de esta, ambas con la respiración agitada, mirándose a los ojos. La habitación desprendía el aroma a licor, sudor, sexo, cuando terminaron.

– Te amo – Poché comentó en un susurró, besando a la chica en los labios con ternura – Este es el mejor sexo que eh tenido en mi vida – Finalizó, acomodándose en la cama y cerrando los ojos, a causa del cansancio.

Calle sonrió – También te amo Poché – Contestó satisfecha, y alegre consigo misma al satisfacer a la peli-rosado.

Está tomó la sábana, arropando se juntó a la chica, antes de dejar cerrar los ojos, quedándose dormidas.

En el sofá se encontraba Alejo y Camila dormidas, Sebastián y Laura observando hacia la pared del cuarto de las chicas, y las otras restantes cantando música de YouTube.

– Diablos, Esas chicas si que duran mas que yo – Sebastián comentó apenado, y entre risas.

– Tendrás que aprender a durar más – Laura le susurró al oído con un tono seductivo.

A lo que está sonrió – ¿Me ayudarías? – este preguntó.

Laura solo lo beso en respuesta, con una sonrisa pícara.

Holis bebés

Amores, ya les dije que el drama en esta historia acabó, solo lo estoy extendiendo un poco más para que el libro no sea tan corto 😂😂