Black Clover: Omegaverse

Capitulo 4

Leopold se despertó por un movimiento al lado de el, cuando abrió los ojos pudo ver la forma de Asta acostada a su lado todo seria normal si no fuera que estaban en su habitación del complejo de los Vermillion, que estaba solo vestido con unos pantalones y que Asta estaba vistiendo ropas tradicionales de omega que hacían resaltar la curvas de su cuerpo, la sangre de inmediato le subió a la cara, sabia que Asta tenia una figura que envidirian los otros omegas y la mayoría de la mujeres betas pero no hasta este nivel, sabia que tenia una figura por todos los abrazos que le daba, ahora entiende porque ocupa ropa para betas y no lo va detener este cuerpo es solo suyo.

Sacudió la cabeza sacando esos pensamientos todavía era muy pronto, se levanto con cuidado para no despertar a Asta, vio que en su mesa había una nota así que se acerco para leerla

'Porque no nos habías dicho que tenias un lindo omega como tu destinado, te hubiéramos dejado de molestar con todas esas propuestas de matrimonio, por cierto tu omega tiene un cuerpo de diosa, así que te hice el favor de cambiarle de ropa para que puedas apreciar sus curvas, ¡QUIERO NIETOS PRONTO! Y por cierto tu hermana ya regreso de su viaje, solo para advertirte'

Con amor tu madre'

Leopold se quedo viendo hacia la nota que había escrito su madre aunque su cabeza seguia repitiendo la misma imagen, Asta con su panza llena de sus cachorros y otra imagen que también se repetía era la manera en la que los cachorros llegaban a panza de su mami, se sonrojo mas de lo que ya estaba esta vez sin poder quitarse la imagen de Asta gimiendo su nombre debajo de el, cuando se dio cuenta tenia una erección que sobresalía como una carpa de sus pantalones que ahora los sentía apretados, se congeló en su lugar escuchando quejidos de Asta muestra de que se estaba levantando, rápidamente se fue esconder al baño para tratar que su problema en los pantalones desapareciera sin la necesidad de hacer algo, escucho como bostezaba y salia de la cama, todo iba bien solo escuchando los golpes que se daba Asta con las cosas de la habitación, sinceramente quería verlo todo somnoliento seria lindo, pero no se quería arriesgar a que viera su problema en los pantalones, los golpes cesaron suspiro de alivio cuando pensó que Asta simplemente había vuelto a la cama a dormir por tantos intentos fallidos de encontrar lo que buscaba pero olvido un detalle ¡Asta jamás se rendía!

Lo recordó cuando el omega entro al baño, se quedo congelado en su lugar sin hacer ningún tipo de movimiento, solo viendo a Asta que tenia los ojos cerrados tocando todo con sus manos, cuando toco el inodoro suspiro de alivio subió la tapa y se bajo los pantalones que por alguna razón los sentía chistosos pero en estos momentos no le presto importancia y empezó a hacer del baño, mientras Leopold tenia un rastro de sangre bajando por su nariz viendo los glúteos perfectamente redondos de Asta, y aunque los omegas machos tienen pene no son tan grandes como los de los alfas y betas masculinos y practicamente solo sirven para hacer del baño y darse placer cuando es necesario, Leopold todavía estaba hipnotizado por la imagen de su omega semidesnudo enfrente de el que no se dio cuenta de que Asta ya había terminado de ocupar el baño y había salido del lugar, lentamente se deslizó por la pared hasta quedar sentado en el suelo mirando su erección atraves de la tela de los pantalones, se fue bajando los pantalones poco a poco hasta que quedaran en sus tobillos y empezó a masturbarse pensando en el recién descubierto cuerpo de Asta, como seria pasar sus manos por esas definidas curvas, morder a lo largo de su cuello, y llenarlo con su semilla, eso ultimo provoco que se viniera en su mano, jadeando un poco por la actividad reciente Leopold vio su mano cubierta por su semen antes de decidir que era hora de salir del baño ya que su problema se soluciono, se subió los pantalones y lavo las manos antes de ir a su cama al lado de su omega y poder dormir un poco mas.

Cuando volvió a abrir los ojos vio que no durmió tanto como una hora máximo, por lo que podía ver en la posición del sol, bajo su mirada al durmiente Asta todavía se veía bello paso una mano por su cachete provocando que Asta se moviera en sus sueños y despertara, Leopold le sonrió antes de darle un beso en la frente