No One Like You

Luz De Día

Una nueva noche se hacía presente nuevamente en aquella ciudad, el pintor  se encontraría con aquel joven.
cuando llego al sitio, pudo ver que el peliverde se encontraba en la orilla del lago jugando con el agua.
Esto llamo mucho su atención, decidio observarlo un momento, podria ser que su mente le jugaba mal, pero bajo la intensa luz de luna, el lago brilla en su máximo esplendor y la belleza de todo ese lugar era complementada opacada por el peliverde que se hallaba ahí, no podía creer que existiera persona tan bella en el mundo, como podría existir alguien así esa era su mayor pregunta.

No se dio cuenta cuanto se  quedo admirandolo, hasta que el peliverde se dio percató de su presencia, dejo de jugar y salió del agua sentándose bajo un árbol cercano.

-Hola Shion

- Hola Joven Dohko

- Ya te dije que me digas solo Dohko.

- Tiene razón, Hola Dohko.

Ambos sonreían y Dohko tomo asiento a su lado.

-Shion

- Si

- Quería pedirte, si podrías hablarme más de ti - tomo sus manos - quiero saber de ti, pero podríamos vernos mañana en el día.

- Mañana en el día?

- Si puedes?

El joven se quedó pensando unos escasos minutos.

- Tendré que preguntar, pero lo más seguro esque si.

Dohko se sorprendió espero una negativa por parte de su nuevo amigo, pero al contrario recibió un si.
- Entonces es un hecho mañana nos veremos.

Ambos se despidieron, Shion al ver que dohko desaparecía entre las calles de la ciudad.

Volvió a silbar una melodía mientras volvía al lago saltando sobre el agua.

Con gran velocidad corrio por el bosque, llegando al otro extremo donde nadie iva. Un risco enorme se elevaba desde ahi, a lo lejos un enorme castillo un poco en ruinas, pero aún así no perdía su majestuosidad.
En un abrir y cerrar de ojos, ya se encontraba en la puerta, abrió esta misma, siendo  recibidos por sirvientes.

-Joven Shion, hoy llego temprano.

-"¿Donde están mis hermanos?"

-En el comedor.

-" gracias."

Se dirigió al gran comedor, atraveso las grandes puertas. Los que se encontraban ahí ni si quiera lo miraron.
Tomo asiento en silencio, hasta que alguien hablo.

- Así que has vuelto de ver a ese estúpido humano - hablo por fin un joven de cabellera corta azul oscuro.

- Manigoldo deja en paz a tu hermano - atacó un joven de largos cabellos azules sentado en medio de aquel gran comedor leyendo un periodico.

- No entiendo que es lo divertido de ver a un humano - esta vez hablo un joven de larga caballera azul un poco alboratada quien se hallaba más bien recostado sobre la mesa con ambos brazos estirados.

-Me da gusto que estés aquí con nosotros Shion, normalmente llegas cuando el sol apenas esta por salir - esta vez un joven castaño hablo seguido por un joven rubio de larga cabellera.

- Deberías no salir tanto puede ser peligroso para ti.

- "Hermanos yo quería decirles que" - pero no terminó fue interrumpido.

- Hoy que estamos todos aquí necesito decirles ellos han vuelto y aunque tengamos un acuerdo de paz, necesito se cuiden.

- Así que volvieron esto será interesante.

- A mi no me interesa ese asunto pero si se meten con nosotros la pagaran.

- Shion debes cuidarte.

- Nosotros casi no salimos pero tu si deberías quedarte aquí.

- "Eso no es justo, yo moriría de aburrimiento".

- Eres el más joven y entiendo que te comportes así sólo ten cuidado.

Shion quería contarles sobre su amigo, quería pedirles que lo dejasen salir de día pero después de lo que su hermano Aspros había dicho era imposible que si quiera lo dejarán sólo, así que la única solución era escapar.

El sabía que no debía salir pues en el día perdía fuerza, cualquiera podría hacerle daño, aún así iría a ver a su nuevo amigo sin importarle nada.

Era de día Dohko se encontraba en el lugar que ambos habían acordado, pero paso una hora y el peliverde no llegaba.
Incluso llego a creer que no iría, pero apesar del retraso lo espero.

-Hola me esperaste mucho.

-Ah Hola Shion crei que ya no vendrías.

Dohko miro a Shion le cubría una bufanda y llevaba un sombrero muy extraño, lucia realmente chistoso.

-Oye jaja Shion no tienes calor? El día esta muy soleado para que estés así vestido.

-Así!- decia mientras se quitaba las prendas demas- lo que pasa esque mis hermanos nunca me dejarían salir, tuve que escapar.

Dohko vio sorprendido que apesar de estar bajo la intensa luz del día Shion se veía aún más lindo.

-Shion podrías contarme más de ti.

Ambos quedaron viéndose un largo rato el silencio era en cierto grado incómodo. Dohko pensó que el no hablaría pero entonces le contó sobre su vida.

- Mi nombre es Shion Wayne.

- Así es tu apellido

- Si

- Tengo 5 hermanos, el mayor de ellos se llama Aspros, el siguiente es Manigoldo, después esta Sísifo, Kardia y Asmita,el más pequeño soy yo.

- Vaya tienes muchos hermanos

- Si pero cada uno es muy distinto no nos parecemos en nada.- decia sonríendo- Kardia se parece a mi sólo en el cabello alborotado, Asmita es rubio por alguna razón y Sísifo es castaño el es muy calido. Después están los peliazules que son los demás.

El castaño veía como hablaba con gran admiración hacia sus hermanos, lo cual le pareció en cierta forma tierno.

- Que más quieres saber Dohko

- Porque no sales en el día.

Los ojos de Shion se tornaron algo tristes algo que el castaño no supo como explicar.

- Si no puedes contarme esta bien.

- Tengo una enfermedad bueno por así decirlo, si puedo salir en el día pero al hacerlo mi vida se pone en riesgo.

El castaño se sintió tonto haciéndolo venir sólo por una carta de alguien que quizá quiso jugarle una broma.

- Yo lo siento no sabía.

- No te preocupes, hacia mucho que yo no salía en pleno día, ya extrañaba esto- decia mientras se tumbada en el pasto, cerrando los ojos, el castaño hizo lo mismo, ambos odservaban el cielo.