Un duelo a muerte

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Tul*

Sonreía con el entusiasmo de Max ante lo ocurrido recientemente, estaba sobre mi besándome desde el rostro hasta el vientre, tomó un chocolate y lo puso en su boca, se inclinó frente a mis labios, lo deslizo en ellos, el calor en el cuerpo hacía que rápidamente se derritiera, continuó bajando en línea recta hasta mi vientre, subió a besarme rapidamente como para degustar de sus labios el resto de él, después, se dispuso a retirarlo de mi cuerpo lamiendo cada parte, dando también chupetones, muy concentrado en lo húmedo de sus besos cuando, fastidiosamente su teléfono comenzó a sonar

-Déjalo (repetía susurrando)

Continuábamos besándonos y con nuestras manos recorriendo nuestros cuerpos, queria centrar ni atencion al acto, pero el teléfono volvió a sonar, él trataba de ignorarlo, pero yo no podía hacerlo

-Es mejor que lo tomes *

Un poco molesto se puso de pie y lo revisó es su hermana, muy admirado y un poco molesto hablaba con ella, yo mientras tanto me senté en la cama y entretenía comiendo un chocolate y un poco de fruta, cubriendo con una sabana mi entrepierna, lo veía, como se paseaba por la habitación colocándose su pantalón, y luego a la terraza, sin duda algo extraño sucedía, al entrar, busco su camisa, colgó el teléfono

-Vicky está aquí

-Que? Que hace tan noche por acá?

Se colocó sus pantuflas y bajo rápidamente, revisé mi telefono y pasaban de las once de la noche, que le habrá sucedido, me levanté de golpe y comencé a buscar mi ropa para vestirme lo mas rápido que podía, con dificultad encontre mi camisa, que mas bien era suya, busque mis pantuflas y comencé a descender por las escaleras, al bajar ya ella había entrado, ambos estaban parados por la puerta principal, lentamente llegué al final de las escaleras, la vi que estaba llorando, pero notó mi presencia

-Hola cuñado! (lo dijo muy animada limpiando sus lágrimas)

-Hola Vicky, te ayudo con la maleta *

Me acerque a ella y la tome de sus manos, Max se retiró molesto y se sentó en el sofá,

-Entra por favor, no te quedes ahí parada *

No entendía que pasaba, coloque su maleta sobre uno de los sillones

Yo: Los dejaré para que hablen

Vicky: No, quédate por favor, ya somos familia no? (sonreía)

Asentía avergonzado mientras me sentaba en el mismo sillón donde puse su maleta, ella se sentó junto a él, permanecían en un silencio incómodo

Yo: quieres algo para tomar (me puse de pie) aunque casi no tenemos nada en el refrigerador, pero hay mucha fruta y po...

Max: No comprendo como ese idiota te pudo dejar ahí, porque no llamaste antes, podíamos ir por ti

Ella comenzó a llorar nuevamente, mientras él la regañaba, poco a poco comencé a entender la situación, comprendía que no estaba enfadado con ella, era con el tipo que la había dejado plantada en la mitad de la ciudad, aunque él era el menor seguía siendo el protector de sus hermanas, lo comprendía totalmente es lo mismo que pasa con May, nunca perdonaría a quien le haga daño, estaba de pie cerca de la sala pero camine a la cocina, serví un poco de agua y la lleve junto a unos pañuelos desechables

-Puedo quedarme aquí, esta noche? (me pregunto sollozando)

-Por supuesto, todo el tiempo que necesites! Preparare la habitación para ti *

Camine a la habitación de invitados que estaba siempre en la planta baja, llevando su maleta conmigo, preparé la cama con sábanas limpias, entre al cuarto de baño y comencé a llenar la tina con un poco de agua caliente, espere a que terminara y salí nuevamente a la sala, al tener el panorama del salón note como se abrazaban, sonreí, me detuve guardando silencio para no interrumpirlos, al soltarse avance con tranquilidad

Almas GemelasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora