Introspección entre cervezas

351 5 0
                                    


- Me dice Roi que ya están.- decía Cepeda mirando el teléfono, mientras la gallega conducía.- Que tiene ganas de verte

-A ver si nos dejamos ya de bromitas, delante de ellos ninguna. Como aviso.- Miriam miraba a la carretera concentrada

Luis y Miriam iban a un bar de la zona, el punto de encuentro. Él, bromista con el tema de preocupación de la rubia, intentando no acordarse de que en unos minutos vería a su tema...y conteniendo los nervios ante todo.

Por otra parte, allí ya estaban Ana, Roi, Aitana y Mimi, la cual no sabían que había llegado ya a la capital madrileña.

-¡Ceporro! Mirad, ahí vienen.- Roi les saludaba con la mano en alto

-¡Aiti!.- Miriam fue corriendo a abrazar a la catalana, ya que no la veía hacía unos meses.- Como te he echado de menos, enana

- Jo, Miriam, yo también os he echado de menos. Volvemos ya a los conciertos, no nos perdemos de vista ya más

Cepeda mientras se abrazaba a Mimi, que le miraba inquisitoriamente, tras lo cual le hizo un gesto por el que hablarían después. Se dieron besos y abrazos, y decidieron entrar.

- Luis.- Le llamó Aitana tirándole de la manga

- Hola pequeñaja.- Removió el flequillo de ella mientras sonreía y siguió andando, dejándola ahi.

Tras un par de cervezas cada uno ya todo estaba al día, fechas de lanzamientos de singles, como el de Mimi y Aitana. Giras como las de Miriam y Cepeda. Primeros conciertos de Roi y la multitud de entrevistas y programas de Ana, más un nuevo single. Pero se quedaban cosas en el tintero, así que cuando Cepeda fue a pedir la siguiente ronda, alguien le acompañó.

- Cuéntame, que ocurre con la benjamina, Cepeda, que nos conocemos.- Mimi se apoyó en la barra junto a él

-Nada.- Tras una mirada de Mimi, comenzó a hablar.- La besé, la fui a buscar al día siguiente y se echó a llorar al verme. Me fui

- ¿Te fuiste? Espera, ¿La besaste? ¿Cuándo? Cuenta todo.

- El día de la fiesta de OT. Sí, me fui y al poco empezaron a salir fotos de Vicente y ella, ya sabes, me aparte.- Luis comenzó a recordar los acontecimientos de esos dos días.

Tras la gran final, con una flamante ganadora en primera línea, se emborracharon, mucho. Antes de las cinco de la mañana, más o menos, Cepeda desapareció para ir al baño, cosa que Aitana vio, le siguió. Espero a que saliese y le encaró.

- Aitana.- Luis se sorprendió al verla allí

- Me llamo. ¿Que cojones te pasa? Estamos solos, sin cámaras, actúas diferente

- No, actúo como hay que hacerlo. Eres mi ganadora Aitana.- Decía mientras la abrazaba.- Vamos con los demás

- ¿No me vas contar que tal fuera? Estás tan raro

- Estoy todavía acostumbrándome, son muchas cosas nuevas.- Contestaba Cepeda mientras la movía hacia la fiesta

- Espera Luis, quiero hablar contigo un poco. Hace un mes que no nos vemos. ¿Qué te pasa?

- Que estoy preocupado pequeña, mañana tendrás entrevistas, verás la realidad. Y también a tu familia y a Vicente. Y todo después de que te digan el circo que se ha montado al rededor de tí y de mí. Creen que nos gustamos, que tenemos algo. Me preocupa que mañana te lo pongan todo en la cara y cambie tu relación conmigo.- Luis liberó todas sus preocupaciones de golpe, obviando sus sentimientos

-¿Circo? ¿Es un circo?.- Aitana le miraba perpleja

- No lo sé, ¿para tí lo es?

- No, durante tres meses no he visto a mi novio, pero a tí sí. Has estado en el momento de cambio más importante de mi vida, has sido mi apoyo más grande. Y han pasado cosas, si tú lo llamas circo, no hay más que hablar

En aquel momento a Luis le entró pánico, Aitana le miraba decepcionada y confundida, en un intento por irse de ella, se volvió valiente, él y las copas que llevaba encima, la agarró, y rodeándola los hombros la besó. Un beso directo y demandante, de esos que dejan las cosas claras. De los que son un cambio. La del flequillo se agarró a la cintura de él y profundizó lo que llevaban tiempo deseando. Pero ahí se quedó.

- Volvamos.- Dijo dándole a Luis un último beso y apartándose de él.

Lo que continuó a esa noche fueron entrevistas y muchas charlas, cuando por la noche ella llegó al hotel, cansada, con mucha información y sin dejar de pensar en el beso del día anterior, sonó su teléfono con el nombre de su novio escrito en la pantalla. Debía hablar con él. Se sintió horriblemente mal, sintió que la traición no se perdona, si quiera por su parte. Pero había cosas que no podía obviar. En ese instante dos golpes en la puerta la hicieron dejar la llamada sin contestar y abrir la puerta

- Hola.- Un Luis avergonzado estaba parado mirándola

- ¿A qué vienes?.- Respondió Aitana con la cabeza gacha

- Hablar

- Ahora...no.- La última palabra la dijo con los ojos llenos de lágrimas. Cuando levantó la cabeza Cepeda ya no estaba, tampoco le volvió a ver.


Cepeda le contó todo a Mimi bajo su atenta mirada.

- A ver si lo he entendido, os dejasteis llevar por fin y por miedo al rechazo de la chica de la que estás enamorado, sin dejar que se explique, ¿Te fuiste?

- Sí

- Cepeda, tío, a veces parece que tienes los huevos metidos para dentro. Espabila, llevamos en la barra diez minutos y no para de mirarte, me pregunto porqué será, vamos a la mesa, anda.- Mimi alucinando con su compañero le siguió hasta la mesa intentando ocultar una sonrisa.

- Bueno chicos, Ana y yo nos retiramos.- Decía Roi levantándose.- Mañana tenemos los dos reuniones en Universal. Miriam, ¿Llevas tú a Mimi y Aitana?

-Si, claro

La noche fue pasando rememorando momentos en la academia, Luis recibía sonrisas de Aitana, las cuales aceptaba con vergüenza y sin entender mucho lo que pasaba.

- Miriam, estamos en confianza, ¿Te pasa algo con Roi?.- Aitana preguntaba apoyada en la mesa y con una sonrisa

- No.- Contestó secamente

- Las miradas que le echas no dicen lo mismo

- Quizá aquí no haya nadie indicado para hablar de miradas, ¿no?.- De manera antipática, Miriam intentó sacarse el problema de encima

- No seas borde, cuenta que te pasa.- Cepeda apoyó a Aitana, ganándose otra sonrisa de ella.

- Me tenéis frita. Pues eso, que me pasan cosas con Roi, qué sé yo.- Mirian agachaba la cabeza, en una versión tímida de ella misma.

- ¡Lo sabía!.- dijo Mimi sonriendo.- ¿Él lo sabe?

- ¡No! ¡No!

- Roi no es tonto, se acabará dando cuenta, si no lo ha visto ya.- Decía Cepeda dando vueltas a la cerveza, mientras Aitana asentía con la cabeza

- Y tú, Aiti. ¿Novedades amorosas?.- Mimi hizo la pregunta clave para crear tensión

- Nada nuevo desde después de la final, ya sabéis.- Contestó ella intentando no mirar a Cepeda, que observaba con el ceño fruncido

- ¿No volviste a hablar con él?.- Preguntó Miriam

- Alguna vez me ha preguntado que qué tal me va. Pero nada más, estoy centrada en el trabajo, la verdad

Al poco de esa conversación, decidieron irse a casa, saliendo del bar, Luis, que iba el último agarró a las dos rubias.

- ¿Vosotras lo sabíais?.- Ellas asintieron riéndose.- ¿Y no me lo decís?

- Tienes los cojones metidos para dentro de verdad. Deberías hacer un poco introspección de lo que te ocurre. Y preguntar...a quién tienes que preguntar.- Contestó la andaluza apretándole el hombro en señal de apoyo.

El camino de vuelta a casa se inundó de la playlist de OT. La tensión desapareció cantando entre los cuatro. Aunque las dudas seguían estando ahí.



Respira hondo, LuisWhere stories live. Discover now