Amor de padre

Parte 3: Placer

Las manos de franco son fuertes y firmes, mi cuerpo no es libre de moverse porque es siempre manejado por ellas, sus movimientos, sus palabras son una mezcla de amor y rudeza, fuí engañada, he sido adoptada, criada, preparada para esto, ahora entiendo los regalos y la estricta dieta, sin embargo se siente muy bien.

De mi boca escapan una serie de gemidos y gritos imposibles de controlar, digo su nombre y ruego por más a pesar de que mi cuerpo es golpeado, rasguñado, mordido y usado a su antojo. Observo las largas medias que visto mientras mi rostro es empujado contra el colchon, fueron destrozadas por sus uñas al igual que mis piernas, puedo ver la marca que dejaron a su paso y como tiemblan con cada embestida que da contra mi cuerpo, distingo algunas gotas de sangre entre el sudor y otros fluidos que resbalan por ellas y solo pienso en que me alegro que haya sido él quien tomo mi virginidad.

-Quiero que entiendas Natalia–lo escucho decir entre jadeos mientras se inclina hacia mi– te quiero, no hago esto para lastimarte es solo que no puedo controlarme, eres la mujer perfecta.

Intento responder a aquello pero mi voz entrecortada no me lo permite–Franco!... Más!... Quiero más!– las unicas palabras que puedo pronunciar en este momento, sé que puedo arrepentirme mas adelante de decirlas pero no ahora, ahora es lo unico que quiero. Siento su miembro en mi interior y lo disfruto bastante a pesar del dolor que me provoca, vuelve a cambiar la posición buscando penetrarme de otra manera siendo cada vez mas salvaje y finalmente siento como mi cuerpo deja escapar con sus últimas fuerzas una gran cantidad de fluidos, mis piernas se estremecen y se dejan de moverse en absoluto, puedo sentir como saca su miembro de mi interior y lo coloca sobre mi vientre dejando escapar su cálido semen sobre mi piel. Ahora soy suya...