Prohibido pasar [BoruNaru]

Capítulo 1

.:Alexa Sumi:.

.:Naruto y sus personajes no me pertenecen:.

.:La historia es de mi propiedad:.

...

—Recu..erda a..mor.. cui..da de tú pa..dre no dejes —Comenzó a toser y cubrió su boca hasta que se hubo calmado. —no de..jes que ha.ga lo..cu.ras.. —Poco a poco fue cerrando los ojos. Los a..mo..

—¡Mamaaaá! —Se despertó sobresaltado y miró a su alrededor.

Se encontraba solo en su habitación, la poca luminosidad mostraba que aún no amanecía.

—¡Maldicion! —Se volvió a acostar cubriendo sus ojos con sus brazos.

Solía tener pesadillas de aquel fatídico día en donde perdió a una de las personas más importantes de su vida.

Recordó que luego de aquello no habló con su padre, de cierto modo lo odiaba, una parte de él hubiese deseado que en lugar de su madre que su padre hubiese muerto.

Siempre fue más apegado a su madre, ella lo quería, lo mimaba mucho y le daba todo lo que él quería, contrario a su padre que casi siempre le ponía un alto, ponía excusas, etc.

Pero algo cambio después de la muerte de Hinata, su madre...

Cambió en él cuando oyó por primera vez a su padre llorar, cuando por primera vez lo vio derrumbarse.

Claro que Naruto no sabia ni nunca supo que Boruto lo vio aquel día cuando llegó a su límite.

Y Boruto no es como si hubiese querido ver o oír sus llantos.

Él sólo se había levantado aquella noche con la intención de ir a buscar algo para comer ya que le había dado hambre pero se detuvo abruptamente cuando lo oyó.

Un llanto lastimero...

A paso silencioso se acercó a la puerta y la entre abrió, algo dentro suyo se rompió al verlo sobre la cama abrazando una prenda de la pelinegra y llorando conteniéndose en no largar un grito agónico, mordiendo sus labios y haciéndose daño.

Cerrando la puerta el rubio menor se volvió a su habitación, el hambre se le fue y solo quería echarse a su cama e intentar dormir para olvidar aquello, cosa que no logró.

Al siguiente día se había levantado con un humor de perros, y su malestar aumentó cuando vio a su padre sonreír tal y como siempre.

Anteriormente cuando lo odiaba por no verlo llorar y sonreír como si nada malo hubiese pasado, ahora odiaba ver esa sonrisa por otro motivo.

No era real, era una máscara, ahora sabía que su padre solo quería hacerse el fuerte delante de él.

Y no quería aquello, no quería que sufra solo y en silencio en la soledad de su habitación.

Por eso días después intento cambiar, socializar más con su padre, acercarse más a él, descubriendo de paso cosas.

Cosas agradables que siempre estuvieron ahí pero él no se dio la oportunidad de ver como la hermosa y a la vez loca personalidad de su padre, como podía alegrarte el día si se lo permitías.

Y le gustó, le gusto pasar tiempo con él, ya a las noches no lo oía llorar y eso le tranquilizaba.

Todo iba bien... Claro que todo, hasta que decidió ver de más.

La gente que los rodeaba, a cada persona que se les acercaba, un extraño sentimiento de propiedad había crecido en su interior para con lo único que le quedaba.