⚛"I Really Like You" [InaTodoWeek] [TRADUCCIÓN]

Curación

⚛ Día 4: Curación
⚛ No es de mi autoría créditos totales a Ryokochan.

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Todoroki Shoto era el tipo de persona que evitaba los espejos; y a pesar de la opinión ya manifestada por varios de sus compañeros acerca de su belleza, él detestaba su rostro. Aquella cicatriz lo hacía sentirse feo, mucho más que por el aspecto meramente estético. Ella era el recordatorio constante, vivo y aún doloroso de un hecho que no podía ser cambiado: él tenía los ojos de su padre.

Por mucho tiempo él se rehusó a visitar a su madre, para no atormentarla con sus ojos fríos. Y aunque ella intentase convencerle de que él no tenía culpa por nada de lo que había sucedido en el pasado, y por más que él intentase rechazar en sí mismo la sangre de Todoroki Enji, el muchacho jamás podría librarse de la culpa de ser el fruto de la ambición de su padre; y, como consecuencia, parecerse tanto a él.

El propio Inasa le había dicho eso, y aunque con el tiempo la antipatía entre ellos se había transformado en una amistad genuina, la pesada verdad de aquellas palabras aún lo perseguía. Era por ese mismo motivo que él evitaba mirar directamente a Inasa, no quería dejar aún más clara la semejanza ya dicha.

A pesar de que con el paso de los meses la amistad de ellos se había estrechado hasta el punto de que les pregunten si no había algo más, la naturaleza cerrada y taciturna de Shoto mantenía a Yoarashi ajeno al motivo por el cual siempre que el gran muchacho se ponía directamente delante de sí, el mediocre desviaba la mirada avergonzada.

Tal hecho obviamente incomodaba al moreno, el cual nunca fue muy competente en las sutilezas de un corazón inseguro y herido. Él había intentado conversar algunas veces, había tocado en el asunto de la cicatriz, pero el menor esquivaba el asunto con maestría. Después de muchos intentos frustrados y no soportando aquella situación, Inasa utilizó un enfoque brusco y directo: sosteniendo la cara de Shoto entre sus grandes y fuertes manos, puso su cara delante del suyo, a centímetros de distancia.

La desesperación de Shoto en no conseguir desviar su mirada sólo podía ser comparado al dolor que se instaló en el rostro de Inasa cuando el menor cerró los ojos y lo empujó con todas las fuerzas que tenía. Tal gesto lastimó al hijo de los vientos  —no físicamente, por supuesto—. Lo que le llevó finalmente a tener la certeza de que no era solo una impresión suya, una suposición infundada; había rechazo en aquel acto. Aunque ese rechazo no fuera dirigido a Inasa de hecho; Shouto se rechazaba a sí mismo, pero ¿cómo podía saber eso el moreno?

— ¿Por qué nunca me miras directamente?

Era la primera vez que Todoroki escuchaba la voz del mayor de esa forma. Tan baja y triste, como que se quebraba, conteniendo una inseguridad que ciertamente no debería jamás ser manifestada por alguien tan enérgico y animado. La responsabilidad por aquel estado atípico alcanzó al menor en su totalidad, y junto a ella se instaló la culpa.

Más culpa.

Una culpa tan profunda, fea y dolorosa igual a su cicatriz.

Una culpa que le robaba las palabras, los argumentos, las explicaciones. Todo lo que consiguió hacer fue bajar la cabeza y curvarla formalmente. Más que un acto de disculpa, lo hacía para ocultar su rostro.

— Lo siento mucho. Por favor, lo siento.

— No. No quiero una petición de disculpa, Shoto. Quiero una explicación.

Hace mucho tiempo que el gran muchacho no le hablaba de forma tan rígida. Era como si repentinamente hubiera vuelto aquel distanciamiento del comienzo. Como si se hubieran deshecho todos los momentos dulces y significativos que habían compartido.

El desolador sentimiento pronto se manifestó en lágrimas, y antes de que Todoroki se diera cuenta,  ya estaba de rodillas en el suelo, sus manos cubriendo el rostro humillado, mientras los musculosos brazos de Inasa lo envolvían. La voz fuerte y desesperada sonaba distante, ahora tomada por una suave dulzura mientras le susurraba palabras de abrigo y súplicas por perdón.

El mayor le decía que no quería ser grosero, que no quería presionarle, pedía disculpas por ser de esa manera, por su falta de tacto y delicadeza. Expresó su preocupación, y su tristeza al  sentir que Shoto lo evitaba. Confesó el miedo que sentía que Todoroki, en realidad, lo quisiera lejos.

Confesó también que lo amaba.

No había nada en el mundo que pudiera borrar sus cicatrices, pero ahí, en ese momento, en los brazos de Inasa, Shoto sintió que su dolor podría al menos cesar.

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Lloré con esto. Fue tan hermoso.

Por cierto, ¿ya vieron el capítulo? Y sobre todo, vieron el art que subió Kohei, y lo que escribió.
¿Y de ahí no quieren que los empareje?

Mi lado shipper crece por su culpa :'^