ᵗʰᵃᵗ ˢʰʸ ᶜʰᵘᵇᵇʸ ᵇᵒʸ ~ ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ

Capítulo 1.

Park Jimin
23 años
Busan
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Pov Jimin
Soy Jimin
Tengo 23 años y nací en Busan.
Todas mis memorias las tengo aquí, y no tengo la dicha de decir que de éstas memorias, la mayoría son malas.

Todo empieza en mi maldita niñez, porque sí, fue mala.
Mi "hogar" (si es que así le puedo llamar) siempre fue horrible desde que tengo memoria. Era una infierno constante para mi madre y para mi.

Mi madre, una ama de casa con mucho amor para dar a todo aquel que se pasara por su camino en el diario vivir.
Y mi padre, un alcohólico abusador...
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No es una parte muy linda de la historia.
Desde que tengo 11 años, recuerdo que dormía sólo, mi padre llegaba ebrio casi todas las noches. Era una tortura diaria...

Casi todas las noches, cuando se iba de fiesta, encerraba a mi madre en su cuarto... Y subía a mi habitación.

La primera vez que sucedió jamás pensé que estuviera ebrio, no tenía la más mínima idea. Sólo escuché sus pisadas y me quedé en mi cama.

Sólo pude observar como mi puerta se abría lentamente dejando entrar a una figura que no lograba distinguir de la oscuridad.

Todo lo que podía sentir era ese abrumador olor a alcohol que se desprendía de mi progenitor.
Lo que se sintió cómo un alivio al verlo llegar finalmente a casa, lentamente se fue transformando en miedo.

Pude escuchar cómo su pantalón caía al piso de manera brusca mientras refunfuñaba y respiraba de manera pesada.

Lo único que hice fue enrrollarme en mis sábanas sin saber lo que vendría después de unas cuantas pisadas que dio hasta llegar al pie de mi cama.

Sentí cómo su pesado cuerpo se posaba sobre mi mientras escuchaba a mi madre pedir que la sacaran de la habitación.

No sabía que pensar, o hacer. La desesperación inundó mi cuerpo de sobremanera. Al igual que las preguntas.

Sólo tenía 11 años y ni idea de lo que me estaba pasando, supongo que lo mejor que me pasó fue bloquear de mi mente lo que pasó esa noche.

Pero no las siguientes.

Seguía llegando ebrio. Abusaba de mi cada que tenía la oportunidad. Encerraba a mi madre, para que no interviniera.

Y lo peor es, que duró casi 5 años en eso, nunca se lo dije a mi madre.
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Me han dicho que no debí callar esas cosas, pero si a un niño de 11 años lo amenazas con matar a su mamá si dice algo, creo que es obvio lo que pasará.

Mis padres luego de 5 largos años, se divorciaron finalmente.

Pero yo no fui del todo feliz.

Ésta situación me dejó muy mal, con muchas secuelas de los traumas... Hasta los 16 años.