Las "aventuras" de los proxys de Slenderman

Cuidado con los pasteles en la cara(Cap.1)

¡Hola soy Toby!, mejor conocido como Ticci-Toby. A continuación te contaré en el lio que te puedes meter por tener el rostro lleno de pastel.

-------------

Ahí estaba yo, Ticci-Toby sentado sobre un árbol mirando las estrellas, estaba aburrido, los otros creepypastas habían salido a matar o simplemente permanecian dentro de la CreepyHouse, no tenía ganas de matar en esos momentos, entonces recordé algo que me gusta hacer llamado "fastidiar", obviamente esto solamente me parecía gracioso a mí. Entré a la CreepyHouse y vi a mis "víctimas", Masky y Hoody jugando videojuegos en la sala de estar. Me fui a gatas detras de el sofá en el que se encontraban, saqué media cabeza y comencé a fastidiar.

—¡Psst!, ¡psst!... ¡hey Masky!, ¡hey!, ¡hey Hoody!—susurraba. Parecía que no me tomaban en cuenta, luego Masky detuvo el juego, se levantó y fue a la cocina, me levanté y le pregunté a Hoody: —¿Qué va a hacer?

—Algo que planeaba hacer hace mucho tiempo—me respondió.

Después de un rato llegó con una rebanada de pastel de queso, era de suponerse—Eso no me lo esperaba—dije con sarcasmo, fue entonces cuando inesperadamente me lanza el pastel en la cara.

—¡Jajaja!, buena esa Masky—se burlaba Hoody.

—Ja, ja, qué gracioso—dije sarcástico tratando de limpiarme la cara.

—Valió la pena. Esa fue mi venganza por estar fastidiando.

—Sí, sí, ya entendí.

De pronto apareció la pequeña Sally.

—Oigan chicos... ¡iihh!—reaccionó sorprendida al verme—¡Toby!, ¡yo iba a compartir de ese pastel con Masky y Smile!

—¿También Smile?—preguntó Masky, pero Sally ignoró su pregunta.

—¿Cuál es tu problema?—me dijo Hoody fingiendo estar enojado.

—¡Hey!

—¿Con Smile?—preguntó nuevamente y volvió a ser ignorado. Luego llegó Clockwork.

—Sally dice Slender que...—y ella también vió mi rostro lleno de pastel e intentaba no reírse—Toby... tienes... pastel en...

—Lo sé—respondí. Ella aún intentaba no reirse a carcajadas.

—Solo vine a decirle a Sally que ya es hora de dormir y... Toby, límpiate la cara—me dijo y se fue junto con Sally con una gran sonrisa, después se escuchó su risa.

Estaba por los pasillos de la CreepyHouse aún con el rostro lleno de pastel, buscaba el baño más cercano cuando Smile se interpone en mi camino.

—Escucha, Smile, si me dejas pasar y no me lambes el rostro te daré de mi comida que lleve carne, ¿de acuerdo?—no estaba seguro de que me entendiera o al menos escuchara, luego el perro dio dos ladridos seguidos, fue cuando me di cuenta que tenía que correr y así lo hice. Después abrí la primera puerta que encontré y la cerré con llave, y me llevé la sorpresa de que cometí un grave error, era el cuarto de Jane the killer, ¿cómo lo sé?, simplemente por que ella salió de el baño con una toalla alrededor de su cuerpo.

—¡¿QUÉ RAYOS HACES EN MI HABITACIÓN?!—gritó histérica

—¡L-lo siento!, ¡n-no sabía que era tu habitación!—dije nervioso y puse mis manos en mis ojos para que no mal interpretara.

—¡¿Y por qué tienes pastel en el rostro?!... ¡¿PLANEABAS QUE TE LAMIERA O QUÉ MALDITO PERVERTIDO?!

—¡¿PERO QUÉ CARAJO JANE?!, dejame ex...—

—¡FUERA DE MI HABITACIÓN!

—¡No puedo, Smile está allá afuera!, pero sólo dejame que te explique.

—¡NO HAY NADA QUÉ EXPLICAR LO DEJASTE MUY EN CLARO!, ¡LARGO ROGERS!—agarró un mechón de mi cabello y de éste me sacó de su habitación. Luego de un rato apareció Jeff quien me miró raro.

—¿Qué haces afuera de la habitación de Jane?

—Nada

—¿Eso es pastel?– preguntó y comenzó a reír—no me digas que te tiró un pastel a la cara

—No, no lo hizo, el pastel en mi cara ya tiene rato

—Ok, pero ¿me vas a decir que haces afuera de la habitación de Jane?

—Te dije que no hago nada. Me sacó gracias a que accidentalmente entré a su habitación por culpa de Smile.

—Jaja seeh, claro, ¿qué hiciste?

—Ya te lo dije, entrar accidentalmente por culpa de Smile, me creyó un pervertido y me sacó, además, ¿por qué tan preocupado?, ¿te gusta o qué?, por que siempre he pensado que es así—lo vi pícaro.

—¡Pff!, ¡yo detesto a la plana horrenda de Jane, sobretodo por que me debe $20!

—Sí, sí, claro, como digas, yo me voy al baño a limpiar la cara

Y así fue como terminó mi pequeña broma, de un simple "¡psst!" a un pastel en la cara con un enorme mal entendido, fui al baño a limpiarme la cara y me dirigí a mi habitación a descansar.