Tarde

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Como si fuera obra del destino, que la joven Uchiha se encontrara con los hermanos Uzumakis en los días pasados a la reunión de sus padres con ellos, mostrando así una actitud diferente a la de la cena. Mentalmente Sarada hablaba consigo misma de regreso a casa con Channel en manos queriendo llamar la atención de su ama, más no consiguiendo éxito alguno.

- Sarada ... Sarada - le llamo su madre tratando de despertarla de su sueño - hija ...

- Qué pasa? - le respondió a Sakura luego del salir del trance - Lo siento mamá.

- Estas bien hija?

- Si es solo que me encontré con Himawari Uzumaki.

- La hija de Naruto - le dijo a su hija asombrada.

Su hija solo asintió con la cabeza y se encamino hacia su habitación ignorando a todos los que pasaban y le saludaban con educación.

Mientras arreglaba sus cosas para salir nuevamente con un destino diferente, la azabache no pudo evitar pensar en el compromiso con la joven Uzumaki; fue en ese momento que actuo sin haberlo pensado mejor, no es que fuese algo malo es solo que para la Uchiha no es facil confiar en otras personas y si lo hace debe de tener algo especial dentro. Lo cual hace que se conviertan en personas muy importantes para Sarada.

- Lista - susurro para si misma.

Una Uchiha de ojos color negro como los de su padre se dirigía al curso de artes de tal modo que traia con sigo un bolso gris, un pantalon negro no muy holgado, con una blusa mangas largas blanca acompañadas de sus botas para aquel frio clima que en realidad ella amaba ver.

Pasar el resto del día en el curso de artes militares era justo lo que necesitaba, poder practicar en la sección de defensa personal, en el manejo de armas y el control de fuerza que puede poseer su propio cuerpo la relajaba a tal punto que hasta llego a olvidar el compromiso con Himawari.

- Se te ve agotada - hablo un chico de cabellos rubios con una coleta extendiendole una botella con agua.

- Estoy bien - refunfuña ante el comentario del chico de coleta.

- Es solo ... ?

- Estrés, como siempre Inojin - manifesto aceptando el botellon que llevaba en chico.

- Pero hay que seguir, vamos - animó a Sarada.

La mencionada siguió los pasos de su amigo de toda la vida, según palabras del joven de piel blanca al igual que la Uchiha.
Las horas pasaban y era el momento de que todos los estudiantes del curso de artes militares regresaran a sus respectivos hogares incluyendo así a la Uchiha que salía con su compañero Inojin Yamanaka.

- No quieres que te lleve - se ofreció amablemente el muchacho.

- Ya sabes que no - negó

- Que conste que insistí - advirtió divertido

- Lo se, te escuche - expresó con burla al ver la cara de su amigo.

Sin decir más, Sarada le estrecho la mano a su compañero y amigo, y enseguida Inojin le devolvio la acción.
De camino para la mansión Uchiha, Sarada optó por escoger otro sendero para lograr distraerse.

- Falta poco ehhh - murmuró al darse cuenta de que el invierno partiria nuevamente con una sonrisa en sus hermosos labios.

En eso la azabache recordó cuando apenas conocio a su mejor amigo Inojin desde que eran niños pequeños, a él le encanta pintar y es un experto, viendo a su amiga triste le hizo un hermoso bosquejo con un bello bosque en el frio invierno asomandose una luna creciente en lo alto del cielo nocturno.

Dando gusto a la Uchiha de que el Yamanaka fuera un gran apoyo para ella.

En medio de la paz que siente la Uchiha se desvanece; al escuchar el tono de su celular lo agarro de su bolso en donde estaba oculto y miro la pantalla para darse cuenta que era un número desconocido, con desconfianza contesta.

- ¿ Quien es ? - contesta la azabache sin rodeos

- ¿ Sarada ?

Esa voz era inconfundible para la Uchiha, quien suspiro a lo bajo aliviada.

- Boruto ¿ como usted.. ?

- Fue Hima quién me convencio de llamarla

" Eso no es cierto " se podia escuchar el grito de la pequeña peliazul al otro del celular.

- Mentirosa - le responde a su hermana

- Bueno, quisiera saber el motivo de la llamada ... por favor ? - expreso cortezmente.

- Cierto ... bueno me dijo que le dijera que no se le olvide lo que le prometio - exclamo casi a grito provocando que la Uchiha aparte su telefono del oido para evitar el bullicio de los Uzumakis.

- Ammm... si no lo he olvidado, pero no se si pueda ir; no se donde vive Himawari - afirmó con pena.

Se pudo escuchar un poco del silencio que habia desaparecido tras la repentina llamada.

- No hay problema, puedo pasar por usted después de su curso de artes - ofrecio con gracia el rubio.

- ¿ Seguro que puede hacerlo ? - cuestiono Sarada.

- Si, no se preocupe por eso yo me encargo hasta ...

"Mañana" se escucho nuevamente desde el otro lado del móvil.

- Mañan ...

Cuando se dio cuenta, de que para el día siguiente tendria que ir a la casa de los padres de Himawari y Boruto. Aumentaba más el estrés de la joven Uchiha mientras se dirigia hacia su casa.

Mientras observaba se preguntaba como una simple llamada habia alterado sus planes para el día siguiente. Además de porque Boruto se encontraba en casa de sus padres si le conto la vez en que la ayudo, que él vivía en un apartamento.

" Tal vez los estara visitando " se dijo a si misma mentalmente.

Dejando esos pensamientos atrás pensó que quizas sea algo bueno que se despejara su mente aunque sea un poco.

Llegando ya a su casa, le ofreció a su madre una disculpa por no acompañarla en la hora del almuerzo como suele hacer.

- Mamá, ahh me llamo Boruto Uzumaki de parte de su hermana - le informa a su madre.

- Y sucedió algo con respecto a eso? - pregunto la pelirrosa de ojos jade a su hija.

- No mamá - le confirmó a su madre - es solo que Himawari quiere que vaya a su residencia - le conto.

- Sarada - vio fijamente a su única hija - ¿ Tu quieres ir ? - le pregunto la señora Uchiha.

- Creo que sera bueno distraerme un rato - dijo con una sonrisa en sus labios rosados.

- Bueno, le dire a tu padre pero si puedes ir - confirmó al igual que su hija , con una sonrisa - y a la próxima; no llegues tarde.

- De acuerdo, mamá.

Usted es mi para siempre ( BoruSara )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora