Capitulo cuatro

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Diario:

Sabes, todos tenemos un lugar seguro, o eso es lo que se dice, algunos tienen un parque, la escuela, o sus propios hogares, pero este último no aplica para mi, es más, es todo lo opuesto, durante estos últimos días mi "hogar" de ha convertido en mi infierno personal, lindo ¿no lo crees?

Los golpes que recibo de forma habitual en "La cárcel estudiantil" como algunos le llaman, no se comparan a los que he estado soportando en el ligar que debe ser mi sitio seguro, los moretones actualmente tiñen mi pálida piel, la mayoría producidos por ese hombre, ya no lo puedo llamar "papá" o algún término similar, el a perdido el derecho a ese título.

Ese ya no es un hombre, desde la infidelidad que sufrió por parte de mi madre, se ha convertido en un maldito animal, ella le fue infiel con otra mujer, por mi parte no veo cual es el problema, después de todo ella era completamente infeliz al lado de ese hombre, sufría variados insultos de el hacia su persona.

Desde que paso todo el cada día se vuelve menos humano, es un maldito alcohólico que toma desde que sale el sol hasta que se oculta, cada día llega ebrio a casa y cada día sufro el mismo destino, sus golpes siempre vienen acompañados de insultos y llantos reclamando lo mucho que me parezco a ella, desde mi piel blanca hasta los mismos ojos, odia que le mire, me ha prohibido que le vuelva a mirae, ya que recalca una y otra vez que en mi mirada esta la mirada de ella, dice que le miró con lastima, lastima que no le tengo ni un poco.

Adiós diario, gracias una vez más.

 

𝐄𝐥 𝐃𝐢𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐃𝐞 𝐔𝐧 𝐂𝐡𝐢𝐜𝐨 𝐒𝐮𝐢𝐜𝐢𝐝𝐚  [𝑴𝒊𝒏 𝒀𝒐𝒐𝒏𝑮𝒊] Where stories live. Discover now