-25-

3.3K 332 53
                                    

Disclaimer: Marvel & Disney © no me pertenecen. Esta historia si.

.

.

El plan marchaba a la perfección. Natasha se había infiltrado satisfactoriamente en la base. Se encontró sólo con un tipo, que redujo en menos de un pestañeo. Lo tenía atado de manos y pies. Luego, se comunicó mediante radio a Sam y a Steve de que el lugar estaba seguro para que pudiesen entrar.

—¿Qué encontraste? —preguntó Sam a Natasha—, ¿algún juguete en especial?

— Hay una bodega más al fondo, que me imagino ahí se encuentra todo el arsenal alienígena. No he ido a investigar, ya que los estaba esperando... hay otro sujeto que se me escapó, pero da igual. Lo encontraremos después.

—No te preocupes, Sam puede mandar a su amigo —habló Steve—, haz que escanee el lugar. Quizás encontremos otras cosas.

—Entendido Cap.

El moreno apretó un botón de su brazo izquierdo y de su espalda, salió Redwing, enviándolo por el pasillo para que evaluara aún más la base secreta. Mientras tanto, Steve le quitaba la cinta adhesiva de la boca a uno de los sujetos que Natasha había reducido para interrogarlo.

—¿Qué planeaban hacer con todas esas armas? —preguntó Rogers serio. El tipo tenía la vista en otro lado, no quería responder esa pregunta obviamente— Responde.

—Venderlas al mercado negro, ¿que más podría hacer? —habló el hombre de manera tajante.

—¿Estás seguro que no planeabas hacer algo más? —insistía Steve. El tipo rodó sus ojos y respondió enfadado.

—Yo sólo quiero el bendito dinero, lo que hagan con ese armamento no es mi problema ¿está bien?

—¿Dónde está tu otro compañero? —la rubia había preguntado. El sujeto escupió al suelo, encogiéndose de hombros.

Natasha estaba perdiendo la paciencia con todo esto. La manera prepotente la ponía de varios colores. Iba a actuar, pero Wilson habló primero.

—No se preocupen, lo llevaré de paseo.

Y con esa frase, Wilson lo tomó y sale volando con él para darle un pequeño susto.

—Lo importante es que este sujeto fue sincero. Sólo quería vender al mejor postor su mercancía —Natasha se cruzó de brazos mirando hacia donde había salido Sam con el supuesto vendedor de armas.

—Si, tienes razón. Pero debemos averiguar de dónde consiguió la tecnología chitauri. Esto es sólo la punta del iceberg.

—¿Ya se pueden decir chistes en relación al hielo? —Natasha respondió cómicamente, arqueando una ceja. Steve sólo soltó una risa moviendo su cabeza. Tomó ligeramente su mano.

—Ven, vamos a investigar.

.

.

Steve y Natasha se dirigieron a la bodega, la cual tenía un acceso con un sistema biométrico. Pero eso no fue impedimento para que ambos agentes pudiesen entrar. La rubia rápidamente ingresó al sistema para robar las contraseñas correspondientes.

Al entrar, se encontraron con lo que presumían. Un arsenal lleno de armas. Estaban ya embaladas para ser comercializados en Siria y otros países cercanos, para seguir promoviendo la guerra en el mundo. El ex capitán américa mordió su labio inferior lleno de rabia. Siempre ardía en cólera al encontrarse con este tipo de misiones. Sintió a su derecha la mano de Romanoff. Ella sabía de antemano lo mal que dejaba a Steve este tipo de cosas.

Él por su parte, sintió que su ira desaparecía por completo con el tacto de Natasha. Y de verdad estaba agradecido de que ella pudiese ser su bálsamo en esos momentos.

Un disparo se escuchó cerca de ahí, separando su acercamiento. Ambos corrieron para ver de qué se trataba y al llegar, había un tipo ensangrentado. Se había pegado un tiro, la pistola estaba en su mano derecha, brotando de su cabeza aquel líquido vital.

.

.

Después de aquella misión, se llevaron al proveedor de armas a donde corresponde: a prisión. Para eso, viajaron hasta la nueva base de los vengadores o ex base, la que se ubicaba a las afueras de Nueva York. Rhodes podría ayudarles más con el papeleo y los detalles. Para el moreno, siempre era grato verlos de vez en cuando, ya que por ahora sólo podían actuar entre las sombras.

—Se llevaron al otro sujeto muerto también —habló Rhodes, seguido de un sorbo de café que le dio a su taza—, ¿cómo han estado ustedes?

—Estamos vivos —dijo Sam, que también estaba disfrutando de aquella bebida caliente—, ¿cómo va tu recuperación? Al menos yo te veo bastante mejor que la última vez.

—Si... —soltó un pequeño suspiro al recordar el accidente y aquella batalla en el aeropuerto—, según el médico, he avanzado muy rápido en mi recuperación, así que eso me tiene con muchas ganas de continuar.

—Eso es bueno. Tienes que seguir con esa misma energía Rhodes —Sam le daba ánimos a su compañero. Porque daba igual si ahora no estaban en un bando u otro. Eran amigos todavía.

—¿Y dónde están Steve y Natasha? —preguntó War Machine. Sam tomó otro sorbo de café y le respondió.

—No te preocupes. Fueron a dar una vuelta por ahí.

.

.

[Continuará...]

.

.

De verdad a veces me pongo a pensar... ¿cómo se me ocurrió toda esta historia? y ahora siento que ya no tengo las mismas ideas como antes :(

En fin.

¡Gracias por leerme! :3

Atte,

Kuchi_

Three Years Later IITempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang