01: Do you?

370 47 16
                                    


Jisung sirvió una taza de té y la depositó suavemente sobre la mesa, luego fue a sentarse tras el escritorio, observando a su interlocutor beber un sorbo del humeante líquido.

—¿Y bien? ¿Qué dices? —Preguntó con cautela, juntando ambas manos y llevándolas a su mentón. El aludido terminó de beber y dejó la taza a un lado, su expresión aún era dudosa.

—No lo sé, Jisung. ¿Por qué tendría que hacerlo yo precisamente?

—Porque eres mi primo, Jaehwan. Sabes que he dado mi vida por esta academia y sólo se la confiaría a alguien que fuese de mi propia familia. —El mayor contestó con calma, se acomodó la corbata y volvió a inclinarse hacia adelante. —Sólo serán seis meses. No puedo perder esta beca, la oportunidad de estudiar en Francia es algo que siempre he deseado... Por favor... Por favor. Te pagaré, será como un tener un trabajo a tiempo completo.

—¡Pero yo no sé nada de esto! —Protestó el contrario, comenzando a sentirse acorralado por la expresión de súplica de su primo. —Es decir, me estás pidiendo que sea Director, Jisung, podías habérselo pedido a cualquiera de las personas que trabajan aquí hace años, a algún amigo que sepa cómo administrar un negocio, ¡A cualquier persona! —Jaehwan no terminaba de asimilar lo que le estaban pidiendo, él era la persona menos indicada para hacerse cargo de una institución tan importante y conocida en Seúl. —A menos que... —De pronto un pensamiento cruzó su mente, algo en la petición de Jisung no le calzaba del todo. —Fue mi padre el que te lo pidió, ¿Verdad?

Jisung desvió la mirada, su primo era lo suficientemente perspicaz, no tardaría en atraparle.

Finalmente asintió.

Jaehwan estuvo a punto de pararse de su asiento y marcharse de la oficina, pero el mayor logró tomar su brazo y detenerlo a tiempo.

—No te enfades con él... Tu papá sólo quiere que tengas un trabajo estable, me pidió que te contratara durante estos meses. Estuve de acuerdo porque me da más seguridad que seas tú quién administre la academia y no otra persona. Sé que podrás hacerlo Jaehwanie, confío en ti.

—Pero ya tengo un trabajo, vivo de la música. —Murmuró, cruzándose de brazos con enfado. ¿Por qué su familia quería seguir interfiriendo en su vida? Le estaba yendo bien con la banda, ganaba dinero en los recitales que hacía durante el fin de semana, le alcanzaba para vivir con eso. ¿Cómo iba a ser capaz de hacerse cargo de un puesto tan importante cuando ni siquiera se sentía capaz de vestir un traje y corbata?

—Aquí también podrás vivir de la música. —Jisung tomó ambas manos de su primo con delicadeza, buscó su mirada para hacer que le viera a los ojos. —Te aseguro que será una buena experiencia, aprenderás muchas cosas, habrá gente ayudándote. Por favor, Jjaeni, sólo seis meses, hazlo por mi ¿Sí?

El menor de ambos estiró los labios y miró hacia otro lado, evaluando sus posibilidades.

Bien, podía aceptar ese trabajo, con el dinero que consiguiera podría montar su propio estudio de grabación, algo que llevaba mucho tiempo deseando hacer, podría comprar nuevos instrumentos para la banda, postular a recitales en el extranjero.

No tenía la menor idea sobre cuáles serían sus labores como "director", pero no podía ser tan difícil tampoco, ¿No? Jisung se la pasaba en su oficina frente a la computadora todo el día, atendiendo llamados y completando papeles. ¿Qué tan complicado podía ser?

—Sólo te diré una cosa. —Anunció Jaehwan, volviendo a observar a su primo con una expresión firme y llena de una renovada seguridad.

—¿Qué es?

—No me harás usar una estúpida corbata.

Las comisuras de Jisung formaron una complacida sonrisa, formándose unas líneas horizontales en sus ojos, no pudo contenerse mucho tiempo y envolvió al menor en un cálido y agradecido abrazo. Jaehwan era más que su primo, como un hermano y la única persona en quien podía confiar plenamente.

—Muchísimas gracias.




Una figura les observó tras la puerta semi abierta, dudó si entrar a la oficina cuando vio al Director Yoon en compañía de otro chico. Se quedó unos minutos esperando, con sus nudillos listos para golpear, aunque luego de un rato se dio cuenta que era mejor no interrumpir y volver más tarde, tal vez estaban en algo importante.

Antes de marcharse, el chico de cabello negro sostuvo las hojas de sus partituras y observó una vez más al desconocido, de espaldas a él.

Desde su posición en diagonal, alcanzó a vislumbrar su cabello castaño un poco desordenado, sus orejas puntiagudas y sus prominentes mejillas.

El desconocido estuvo a punto de darse la vuelta, por lo que Minhyun sacudió la cabeza y activó sus pies para seguir su camino, alejándose del lugar.

.

.

.


Perfect Melody ➳ MinHwan | Wanna OneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora