First love [Michaeng] [EDITANDO]

They returned?

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Mina POV

–Hola Mina 

–Hola-. Contesté sin ganas

–¿Qué tal? ¿Estudiaste?

–Si-. Estaba actuando fríamente con ella y no sabía por qué, no se merecía eso

–¿Está todo bien? ¿Te pasa algo?-. Noté la preocupación en su voz

–¿Podemos hablar en el descanso?-. Sentía la necesidad de estar con ella, por eso le pedí que pasáramos tiempo juntas

–Mmm, de acuerdo-. Después de nuestra pequeña charla, me dediqué a poner toda mi atención en la clase y así pasaron todas las horas rápido

Presenté el examen en la hora antes del descanso, estaba fácil en mi opinión, esperaba sacar una buena nota, no quiero decepcionar a mis padres, siempre he sido parte de ese grupo de personas que son muy aplicadas, desde que comencé a estudiar ballet principalmente.

Me salí del aula y esperé a que sonara el timbre para poder hablar con Chaeyoung. Estaba sentada en una banca al lado de los casilleros.

–Hola princesa ¿Qué tal todo?-. Jimin me rodeó con su brazo y me dedicó una sonrisa

–Todo bien

–¿Qué comeremos hoy?

–Oh, veras... Tengo que hacer algunas cosas, no creó poder almorzar con ustedes, prometo que será solo esta vez

–Oh, entiendo...

–Hey, no te desanimes, no es nada en contra de ti-. Me acerqué para darle un beso corto, ya que estábamos en la preparatoria y no se permitía mostrar esa clase de afectos en público

–Esta bien princesa, entiendo que tengas que hacer cosas, de hecho yo también debo de hacer un trabajo para mi clase de inglés

–No sabía que estudiaras inglés

–Pues, me inscribí hace poco, quiero mejorar en el idioma y esas cosas, ya sabes

–Si, entiendo-. Sonó la campana que indicaba que era hora de hablar con Chaeyoung, me despedí de mi novio con un corto beso y mis ojos comenzaron a buscar a la más pequeña

–¿Me buscabas?-. Giré un poco y la encontré, con una ligera sonrisa

–Si, claro. Acompáñame-. Comenzamos a caminar, nadie soltaba ninguna palabra, los únicos sonidos que se alcanzaban a percibir eran las voces de los estudiantes que se dirigían a la cafetería

No sabía muy bien la razón por la que quería hablar con ella, tampoco tenía idea de lo que le diría cuando llegáramos a nuestro destino, simplemente quería charlar un poco, tenía la necesidad de hacerlo. Me gustaba hablar con ella, me hacía reflexionar en las cosas que me pasaban y era un gran ejemplo para mi, debe de ser difícil mantener un buen promedio de su parte.

Estaba demasiado sumergida en mis pensamientos, que ni siquiera había caído en la conclusión que ya estábamos en el pequeño jardín de la preparatoria, el ambiente era agradable, las voces no se podían percibir en ese lugar. Decidimos sentarnos en una banca, nadie soltaba una palabra y estaba comenzando a ponerme ansiosa, no soportaba el silencio que inundaba la atmósfera.

–Bien... ¿Qué sucede?

–¿Por qué razón piensas que pasa algo?

–Mina, te conozco, a pesar de que llevamos siendo compañeras por algunos meses