Mayoría

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Hoy llegan esos recuerdos, recuerdos del niño que me pidió dinero en aquella plaza porque para su comida falta de dinero tenía.

Recuerdos de cuando me faltaba dinero para el pasaje y venirme a pie tuve. Por haber dado mi dinero al niño que me pidió en la plaza.

Recuerdos de que la humanidad y sociedad, sólo se viste de cosas auténticas para impresionar al resto, siempre buscando ser mejores ante los demás.

Mi madre solía reír, estudiar y dormir, y era joven. Se puede decir que la juventud de ahora, sólo es. Droga, sexo y alcohol. Manera cruel de juzgar a los jóvenes, por la mayoría.

La mayoría, algo que retumba en mi oído por el hecho de que cuando cursaba la preparatoria un compañero se comportó mal y por el, pagaron todos.

Esos pensamientos suicidas que llegan a marcar tu interior, cuando algo ha de importar pero te ha salido mal.

Recuerdo la risa de aquella niña, que no me pidió dinero, sólo se acercó, a ver como tocaba mi guitarra y sonrió, le dije que era linda y una pequeña carcajada de este ser indefenso salió.

Esta vez no me faltó dinero para dicho pasaje y a pie no tuve que regresar. Ya que aquella niña, depositó un poco de su mesada y me ayudó.

Esta vez la gente no trataba de vestir con lo mejor que tuviese, ¿se habrán dado cuenta que pocas personas no aprecian como vistes, si no tu interior?, eso parece, aunque segura del todo, no puedo estar.

Esta vez mi madre no reía, no estudiaba, ni dormía. Lloraba, limpiaba y de noche trabajaba. Pero aún la juventud sigue fichada con eso de 'drogas, sexo y alcohol'. Ya la mayoría no es problema, ya todo suele ser diferente.

Ya en secundaria, el mismo compañero se comportó mal, esta vez no pagó la mayoría, sino el, al tener que limpiar todas las aulas del instituto.

Ya no habían pensamientos suicidas, ya estaba en un lugar de serena paz, dormido me encontraba, hasta que el despertador decidió hacer su estruendoso ruido común.

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