DOMINANTES

Capitulo 29

Una semana después.
Ya nos hemos puesto en contacto con la organizadora de fiestas para que nos ayude a planificar nuestra boda, la emoción que me recorre a mi y a los chicos no podría ser mayor, estamos todos sumamente ansiosos.

En este momento nos encontramos camino a la reunión que agendamos con la planificadora, Andrew se encuentra manejando, y aunque esté concentrado en el tránsito una sonrisa permanece en su rostro, lo mismo ocurre con Derek quien se encuentra en el asiento del acompañante, la única diferencia es que él sonríe cada vez que me mira, es algo muy tierno a decir verdad, y es algo que también me ocurre, eso simple hecho de mirarlos y de imaginarme una vida con ellos hace que una sonrisa se instale en mi rostro.

-Mami.- escucho como me llaman  mis hijos.

-¿que ocurre mi amor?.- le pregunto con una sonrisa al percatarme que es Zachary quien me llamó.

-¿Cuánto falta para llegar?.- pregunta de forma tímida, haciéndolo parecer aún más lindo de lo que es.

-Hum pues... no lo sé.- me rio al darme cuenta de que todo el tiempo que estuvimos en el auto estuve en las nubes, después de todo el dicho es cierto, quien está enamorado tiene la cabeza en las nubes.

-Ya falta poco Zach, solo unos cinco minutos más y podrás bajar del auto.- salta en mi ayuda Max.

Y como somos Max cinco minutos después nos estábamos deteniendo en la puerta de uno de los posibles lugares para realizar la boda, en donde a su vez quedamos en encontrarnos con la planificadora.

Por fuera el lugar es hermoso, no es nada muy extravagante, simplemente lo justo y necesario para realizar el tipo de vida que queremos.

Queremos que sea algo íntimo, con pocos invitados, tan solo aquellos que son importantes para nosotros u por supuesto aquellos que comprenden nuestro estilo de vida. Tengo que admitir que no todos han estado de acuerdo con nuestra relación, pero como dijo Max lo mejor es ignorarlos, ya que ellos hablan y opinan sobre la vida de otros por que no tienen una propia.

Tomo a Mackenzie en brazos y bajamos para entrar al salón, mientras tanto Max toma a Zachary y Derek toma a Noah, se ven tan tiernos cargando a nuestros bebés, son hombres muy sexys, pero el hecho de estar con unos hermosos bebés los hace aún más atractivos.

Finalmente entramos y no encontramos con la planificadora.

-Un gusto conocerlos, mi nombre es Tessa Stevens.- se presenta formalmente, y sin dar más de una mirada a los chicos, cosa que me agrada, desde que di a luz a mis bebés la mujeres se han estado quedando viendo más de lo debido a mis hombres y eso  de cierta forma me pone furiosa.

-¿Con qué prefieren empezar?.- pregunta cordialmente.

-No lo sé, ¿chicos ustedes que prefieren?- les pregunto, la verdad es que estoy tan emocionada que no sé ni por donde comenzar a planear todo.

-Podríamos empezar por la decoración y en base a eso pensar en la comida.- Dice Andrew finalmente.

-Perfecto, entonces pasemos al salón principal que es el que más decorado estará.- Tessa nos indica por donde ir. Una vez llegamos al salón quedo impresionada al igual que los chicos, en este espacio se encuentra el altar y a los costados las sillas para sentarse, pero por dentaras del altar hay un gran ventanal que da a un patio precioso.

-Esta es la parte donde ocurrirá toda la ceremonia, el único detalle es que la decoración debe ir acorde al tipo de vestido que uses, es algo extraño pero créeme, al momento de caminar hacia el altar se notará la diferencia.- argumenta Tessa mirándome.

-Esta bien si tú lo dices.-confío en ella, aunque parece ser muy joven, ella ha organizado muchas bodas, por lo que no hay duda que sabe de lo que habla.

Luego de aproximadamente dos horas definimos entre todos que los colores que serán usados para la decoración.

Todos acordamos en que la fiesta luego de la ceremonia sería realizada afuera al aire libre, por lo que contamos con que será un día perfecto.

Los colores que predominarán serán el blanco y el dorado suave.

Con respecto a la comida hemos decidido que habrán dos menús disponibles y que cada uno de los invitados podrá decidir cuál querrá al momento de confirmar su asistencia a la boda.

A la hora en la que terminamos de definir todo lo necesario para que la organizadora pueda comenzar a decorar el lugar Mackenzie, Zachary y Noah se encuentran profundamente dormidos en uno de los sillones, y no los culpo, ha sido un día extremadamente agotador y si pudiera también me iría a dormir.

Nos despedimos de Tessa y tomamos a nuestros pequeños, quienes solo se acurrucan más entre nuestros brazos, los colocamos en sus sillitas para el auto y nos ponemos en marcha para volver a la mansión.

Algo de lo que los chicos no han querido hablar conmigo es de la luna de miel, es una cosa que me tiene totalmente intrigada, el solo pensar que podré tener todo el tiempo para disfrutar con ellos hace que mi cuerpo se encienda.

No es que no ame a mis hijos, por supuesto que los amo, igual a como amo a los chicos, tal vez un poco más pero bueno son mis hijos y daría mi vida por ellos.

Estoy deseando que llegue el momento para casarnos, la fecha que hemos escogido era la primera fecha que el local tenía disponible para una celebración de este tipo, tanto yo como los chicos nos encontramos ansiosos por casarnos, sobre todo por la parte de consumar el matrimonio.

Observo cómo Max conduce, como Derek se encuentra con los ojos cerrando recostado en el asiento del acompañante, y como Andrew me abraza de forma protectora, apoyando su cabeza entre mi cuello y mi hombro, descansando un poco del largo día que hemos tenido, y no puedo sentirme mas feliz por lo que he logrado, jamás pensé que tendría una familia tan grande como la tengo ahora, tengo todo lo que podría haber pedido, no necesito nada más ... aunque tal vez si necesite algunas sesiones más en el cuarto de juegos, y con esos pensamientos me duermo dejando caer mi cabeza sobre la cabeza de Andrew.