Un Enredado Amor (Josh Hutcherson) Editando

CAPÍTULO 84

-  Creo que te estás pasando de la raya. – murmuró Avan.

- ¿Qué se supone que haga, entonces?

- No sé pero en lugar de enamorarla debe estar cabreada.

Sonreí. Sin duda estaba cabreada, pero sabía que era una manera para llegar a ella. Sabía que mientras más frustrada se siente, más se cuestionaría sobre lo que pasa entre nosotros.

- Te aseguro que lo está.

- ¿Por qué mejor no la dejas en paz y buscas una chica que te corresponda? Claudia estaría más que dispuesta.

Esos comentarios solo me hacían sentir sombrío. – Sabes que no puedo. Lo intenté.

- Puedes intentarlo de nuevo. – sugirió esperanzado. Simplemente él no entendía que mi corazón siempre le pertenecería a ella. Si Alex no volvía a mí tendría que buscar la manera de permanecer en su vida aunque me mate verla con otro.

Pero hay algo. Una pequeña esperanza. Algo que me dice que no me dé por vencido.

Quise verla en su cumpleaños, pero trabajó todo su día. No contesta mis mensajes. Está desesperada porque la deje en paz. No quiere enfrentarme.

Es por ello que no la dejo en paz. Ella tiene miedo. Tiene miedo de que todo lo que digo es verdad. No quiere aceptar lo que siente, prefiere estar en negación y no enfrentarse a la realidad. No son solo mis ilusiones. Lo sentí. Sentí su entrega aquella noche. Sentí como su corazón latía bajo mi tacto y como su alma abrazaba la mía con anhelo. Simplemente no se puede entregar a una persona de esa manera si no la más.

Luego de que Avan se vaya me vestí y preparé para los eventos de hoy. Esta noche la veré… a ella y a su novio. Estaba prácticamente iniciando la primera batalla.

Cuando llegué al hotel donde se llevaría a cabo el evento de presentación del proyecto, estaba casi lleno. Había mucha gente influyente y famosa conocida del medio en que me desenvuelvo.

- Sr. Collins – busqué a mi nuevo mejor amigo.

- Josh. Es un gusto verte por aquí. – me ofreció su mano.

- No podía faltar. Estoy muy interesado en ser parte de todo esto – no sabe cuánto.

- Esa era la idea de hacer esta pequeña reunión. Mientras más donativos y personas quieran colaborar sacaremos adelante cada una de las propuestas. Yo me enamoré del proyecto en cuanto lo leí. Es una forma de ayudar a la comunidad de una manera útil. Créeme que ya he hecho todo lo de los donativos y caridad y no he sentido que ha servido de algo, no he mejorado la vida de esas personas. Garantizar en lo posible la salud de todos esos niños me hace sentir satisfecho.

- Creo que tu entusiasmo bastaría para convencer a todos.

- La verdad es que estoy muy entusiasmado. Ayer mi socia, Alexandra, me llevo a visitar el área de oncología del hospital donde trabaja y poder hacer algo por todos esos niños, esas familias me ha entusiasmado.

- Definitivamente quiero estar adentro. – y aunque mi motivación era egoísta también quería ayudar.

- Solo tienes que llamar a mi asistente y ella te dirá que tipo de donaciones puedes hacer.

- Buenoooo… estaba pensando en otra forma de colaborar. Quiero estar de lleno en el proyecto. Dedicarle mi tiempo a que todo se lleve a cabo. – no solo dedicaría mi vida al proyecto, estaba dedicando mi vida a Alex.

- Eso es fantástico, Josh. Tengo que presentarte a mi socia. Es una chica encantadora, muy inteligente. Es la visionaria de todo esto. La amarás.