Capítulo 30

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Casi inmediatamente, una vez que los cinco entraron en la sala de llegadas, fueron atrapados en un torbellino y fueron arrastrados a una camioneta por el personal. Sin demora, condujeron hasta Odaiba.

"¿Esto es un secuestro?" Preguntó Xu Zheyi, estupefacto, mientras un miembro del personal le entregaba un almuerzo en bento.

"Preferiría que esto fuera un secuestro", se lamentó Ah Li. La idea de volver a filmar era deprimente, y él ya se veía muy abatido. Xu Zheyi le dio una palmada en el hombro en un intento de consolarlo.

Hasta ahora, Xu Zheyi no podía determinar si las pastillas que le dieron eran placebos (1) o no. Lo más seguro es que probablemente había determinado en el fondo que la droga no era realmente efectiva, pero preferiría morir antes que reconocer ese hecho.

Los genitales de los hombres siempre parecían ser más honestos que sus cerebros.

No pudo evitar mirar a Ruka, pero luego se volteó rápidamente. Después de unos segundos, una vez más fue incapaz de resistir el impulso, y se volteó a mirarlo.

Xu Zheyi no sabía lo que estaba haciendo, de repente solo quería verlo.

Xu Zheyi tuvo que admitir que después de darse cuenta de que le gustaba Ruka, las hormonas dentro de su cuerpo se multiplicaron de manera loca y aumentaron exponencialmente. Se sentía algo afeminado, pero erótico. Ni siquiera se reconoció a sí mismo.

Como era invierno, la noche cayó temprano. Aunque solo eran las siete cuando llegaron a su destino, el cielo ya estaba teñido de negro. Xu Zheyi miró la escena nocturna frente a él. En la oscuridad, la Bahía de Tokio parecía un espejo negro, que reflejaba perfectamente el Puente Arcoíris, coronado por joyas.

A pesar del viento frío que soplaba contra su frente, esta escena nocturna merecía una mirada.

Siguiendo las instrucciones del guión, él y Ruka saludaron primero a la audiencia en un simple japonés ante la cámara, luego expresaron sus sentimientos de emoción y felicidad en chino. Simplemente estaban documentando el curso de los acontecimientos en la película. Caminaron lentamente hacia la plataforma que albergaba la famosa Campana de la Felicidad en Odaiba. Los dos hombres tocaron la campana al mismo tiempo, y luego dejaron de filmar allí. La siguiente escena que tuvieron que filmar fue cuando subieron a la rueda de la fortuna.

Xu Zheyi no estaba seguro de si era porque era un día laborable, pero no había mucha gente en la carretera.

Xu Zheyi y Ruka caminaron hombro con hombro; No había otro punto de contacto. Aun así, la sensación que vino a través de las capas de Xu Zheyi, que incluía un grueso abrigo, le hizo sentir picazón una vez más. En este ambiguo y delicado ambiente, escuchó a Ruka preguntarle: "¿Por qué me miraste hace un momento?"

Aunque claramente estaba haciendo una pregunta, el tono de voz seguro de Ruka lo hacía parecer levemente satisfecho de sí mismo. Xu Zheyi era una persona bastante falsa. Estaba irritado y quería replicar, pero en el siguiente segundo escuchó a Ruka preguntar: "¿Sabes en qué me hace pensar cada vez que me miras de esa manera?"

Xu Zheyi estaba absolutamente seguro de que no escucharía nada bueno después de esa pregunta, pero no pudo evitar preguntar: "¿Qué?"

Ruka reveló una sonrisa satisfecha y habló con indiferencia: "Creo que si me miras así de nuevo, te agarraré y te empujaré en una silla, meteré mi mano dentro de tu ropa interior y te agarraré firmemente..."

"¡Cállate!" Xu Zheyi fue completamente humillado por la desvergüenza de Ruka.

Por un lado, los miembros del personal estaban contentos de que se llevaran bien, mientras que por otro lado estaban sorprendidos por la fuerte reacción.

Screen Partner (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora