Capítulo 3:

261 44 8
                                    

[Talks & Coffee]

Yoo Kihyun solía despertarse temprano solo para tener unos minutos de paz, apreciando aquella vista impresionante que se instalaba en su cocina.

Una tenue luz entraría por la ventana principal, la cual tendría gotas de lluvia fina deslizándose por el frío cristal empañado... Un par de arboles de fondo con una fresca brisa empujando las hojas fuera de sus ramas. Si. Kihyun solía pasar al menos cinco minutos de su mañana en silencio contemplando la imagen que tenia frente a sus ojos antes de comenzar con su jornada.

Amaba días como este.

Mañanas tranquilas, un poco de lluvia rompiendo el silencio de un cuarto vacío y la sutil luz natural que lo rodeaba en aquella habitación.... Disfrutaba de ese sentimiento de paz que lo embargaba.

Sin embargo eso es el pasado y los tiempos han cambiado.

Resultando irónico o extremista a simple vista pero ahora tanto silencio lo perturbaba. Los nervios se crispaban y sus manos sudaban...

Tanta paz era escalofriante.

Mañanas como las de hoy era un falso alivio. Donde Yoo solía despertar pensado que todo fue un mal sueño...

— Desearía fuera así — se consoló a si mismo mientras se aferraba a un frasco de café.

Su cuerpo recordaba la vieja rutina. Una donde se pondría en puntas de pie para alcanzar la taza favorita de su pareja —con franjas verticales verdes y blancas— hasta dejarla resaltar al lado de la infantil tacita que le pertenecía. Un par de cucharas, algo de la escaza azúcar y el agua hervida estaban listas.

Mordió su labio antes de abrir y tomar un par de cucharas del polvo instantáneo. Con sutiles temblores y sus oídos agudizados repartió cuidadosamente el café en las dos tazas, golpeando el utensilio de plata tres veces en el borde escuchando su característico—

— En verdad no estás marcado — jadeó al notar una respiración en su cuello.

Un escalofrió recorrió instantáneamente su cuerpo alterando sus sentidos. Su corazón despegó de su pecho cuando oyó ese grave murmullo colarse por sus oídos y sus músculos se tensaron al sentir un intenso calor corporal.

Estaba alterado por su presencia.

— ¿Café? — preguntaron por encima de su cabeza haciéndolo sentir pequeño.

Solo pudo asentir y clavar sus ojos en esos brazos que lo enjaulaban contra la mesada.

— Gracias — comentó con sinceridad Shownu antes de tomar la taza con un adorable oso enfrente.

Kihyun soltó un tímido "Ah..." pero no se atrevió a decir nada más.

Esa era su taza.

— No es la gran cosa — las palabras salieron naturalmente.

Su mirada se encontraban clavada en su invitado, más específicamente en los labios que chocaban contra la preciosa cerámica de la cual solía beber cada mañana desde el nacimiento de su hijo. Tragó su saliva, un tanto agitado por el temblor de su corazón...

Esto estaba mal.

<< Muy mal, Kihyun. >>

The Long Way Till Home.-Where stories live. Discover now