Parte 13.

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"Capítulo 13: La peor sorpresa"

Minho suspiró profundo eh ingresó en el avión, tomó sus maletas y las acomodó en la encimera de este ya que como sólo viajaba por ocho días no era necesario llevar maletas tan grades que tuviera que llevarlas en el servicio del avión. Se aseguró de que estén bien situadas en su ligar y tomó asiento tratando de por un momento olvidar con quien sería acompañado toda esa tormentosa semana en Daegu pero su semblante cambió cuando vio ingresar a aquella pelirroja que lograba sacarlo de sus casillas cada vez que se encontraba cerca. Maldecía en sus adentros tener que estar relacionado con ella aún después de lo sucedido.

No porque le doliera o porque aún sintiera algo por esta, más bien porque su cercanía a él le molestaba y más cuando lo hacía con otras intenciones aun sabiendo que tenía una relación con el azabache y todos en el lugar donde ambos trabajaban lo sabían, entre todos su familia. Bufó molesto desviando su mirada a la ventana pensando cómo era posible que aún en el avión no lo dejará en paz ya que justamente le tocó dos asientos más adelante de él. ¿Irónico no?
Hasta donde él se encontraba podía percibir el aroma a loción barata que alguna vez logró engatusarlo. Cerró los ojos tratando de conciliar un poco de sueño sin lograr conseguir ninguna ayuda por parte de sus ojos, se limitó a sacar su celular y sus audífonos para oír un poco de música y matar el tiempo. En eso desbloqueó su celular para mandarle un mensaje al castaño.

*Cielo*
Ya se lo que estás pensando, no siquiera ha pasado más de 30 minutos desde que nos despedimos, pero siento que el corazón se me va a salir porque no estás aquí, ya te estoy extrañando más que nunca bonito, quisiera que en este momento estuvieras conmigo y poder besarte. Cuidado con todos esos inútiles que trabajan en la empresa, tú eres mío. Necesito verte ahora. Es tonto pero tierno que necesite de ti aún que te vi hace unos minutos, pero en fin no dudes en llamarme si sucede algo. Te amo

Eso bastó para que minutos después su celular sonara mostrando en la pantalla un mensaje en el cual como pensó, era del castaño.

*Bonito*
No tienes ni la más mínima idea de cómo también te estoy extrañando, reprimiendo mis ganas de regresar y tomar el vuelo siguiente eh ir por ti. No te preocupes nadie ha logrado encantarme sólo con una mirada como la que me diste hace tres años cariño. Te llamaré si sucede algo si, también Te amo mi amor.

Una sonrisa se adueñó de su rostro cuando leyó el mensaje del menor, sin duda cualquier palabra que saliera de él podría hacerlo olvidarse de todo lo malo, porque todo lo bueno pasaba a su lado. Con una sonrisa amplia, guardó su celular en el bolsillo para proceder a intentar nuevamente cerrar los ojos y dormir. Hasta que al fin lo hizo sin saber lo que aquel mensaje pudo lograr en el azabache.

Cerró sus ojos con el celular entre sus manos apretado en su pecho, sonreía como colegiala enamorada con la cabeza y su espalda recargada en la puerta que estaba detrás del después de acabar de enviarle el mensaje a Minho. Él también lo estaba extrañando, no se separaban más que sólo la distancia que tenían entre sus oficinas. Dio un suspiro suave y guardo su celular en el bolsillo para volver al trabajo.
Camino hasta la oficina de su suegro para ver si necesitaba algo. Entro sin hacer mucho ruido en caso de que pudiera molestar al mayor que yacía sentado en su escritorio acomodando unos papeles.

─── Hola Minkyung. ─sonrió acercándose al mayor.

No le hablaba formal ya el mayor le había suplicado que dejara las formalidades con él porque eran familia. Taemin no pudo negarse, aunque le había costado mucho acostumbrarse aunque la confianza entre ellos sobrara.

─── Que hay Taemin. ─este le devolvió la sonrisa y se retiró los lentes que tenía pasando una mano por su rostro.

─── ¿Cómo te sientes? ─preguntó Taemin.

Kiss me again ─ 2min[COMPLETA]Where stories live. Discover now