Capítulo 53: Cosas malas que parecen buenas.

305 36 2
                                    


3 años y medio después...

Me está volviendo loco y lo sabe, le gusta hacer eso. Ayer nos dormimos a las tres de la mañana y al despertar ella sólo estaba durmiendo como un ángel alado mío cuando en realidad no me dejó descansar en toda la noche.—dijo Stiles mientras camina con Scott a su lado, ambos podían notar cómo los pasillos apenas y tenían estudiantes en sus alrededores.

—Pero a ti te gusta, ¿O no?—dudó Scott con burla.

—¡Por supuesto que me gusta, me encanta! Ella es tan salvaje, tan apasionada pero al mismo tiempo es dulce, cariñosa... frágil. Lo hacemos 5 veces al día, gasto más dinero en preservativos al año que en cosas que necesito para la escuela.

—¿Y después qué pasa?

—Esto.—asintió levantando su camisa por la parte de atrás dejando ver su espalda completamente roja, llena de mordidas y rasguños.

—Dios. ¿Ella te hizo eso?—inquirió Scott sin poder creer que alguien del tamaño de Tate fuera capaz de dejar semejantes marcas.

—Cada vez que terminamos nos abrazamos y dormimos en cucharita.—sonrió avanzando hacia las escaleras.

—Eso es muy dulce, suena bien.

—Sí, pero siempre soy la cuchara pequeña. Siempre.—jugueteó con sus dedos para mostrar cómo era que dormían.

***

En el último mes de clases ni siquiera la mitad de los alumnos asistían a clase y los que sí se la pasaban haciendo bromas, guerras de comida y eso incluía sexo en el salón de historia, raro, pero eso hacían. Sin embargo los profesores aprovechaban estas últimas tres semanas para dar pláticas y pláticas educativas principalmente la profesora Woods.

—Los embarazos no deseados se pueden...

—¿Es enserio? ¿Hablarnos de embarazo no deseados nuevamente?—interrumpió Thomas con fastidio la tan interesante platica de "cómo no quedar embarazada por un inútil".

—¡Tú cállate Thomas, que en 4 años que llevas en esta universidad te han acusado de ser padre alrededor de 18 veces!—habló burlesco Kenny un chico rubio y regordete que se encontraba a dos lugares detrás de Thomas, provocando fuertes risas de parte de todos.

—¡Y ninguna se pudo comprobar! Yo no tengo hijos gracias a Dios.—presumió con orgullo y le guiñó un ojo a la chica que se encontraba a su lado, provocando más risas.

—¡Silencio!—pidió la profesora intentando retomar la clase.

Tate estaba sentada con Stiles a su lado mientras el mantenía sus manos entrelazadas y ella apoyaba su cabeza sobre su cuello. La clase era demasiado aburrida, sofocante y vergonzosa porque ellos vieron todos los anticonceptivos que habían traído para enseñárselos. Sólo esperan que por amor de Dios no fueran a proyectarles un parto natural.

—¿Cansada?—susurró Stiles en el oído de Tate mientras depositó un tierno beso ahí mismo.

—Tengo un poco de sueño esto es aburrido, además tengo mucha hambre.—contestó de inmediato rozando su pequeña nariz en el cuello de Stiles.

¿Cuatrillizos?®  [Dylan O'Brien] [Reeditando]Where stories live. Discover now