Capítulo 36

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Javi

Me despierto con una resaca impresionante.

Tras remolonear un poco en la cama decido que es momento de bajar a prepararme algo para comer. Miro el móvil mientras espero que se caliente la comida en el microondas y descubro que los chicos ya están comentando la noche por el grupo de los cuatro.

¿Es que esta gente no duerme?

Miro el reloj y veo que son las tres de la tarde. En realidad sé que David y Adri son de los que no pueden dormir si la noche anterior bebieron muchísimo así que es normal que lleven unas horas despiertos. Pablo, por su parte, sigue en el quinto sueño.

Lo de este tío es otro rollo

Pongo la tele y me siento en el sofá. Estoy tan cansado que parece que me dieron una paliza la noche anterior. De verdad, como si me hubiesen molido a palos.

Eso es señal de que fue una buena noche

¿O será que estoy mayor ya?

El móvil se ilumina varias veces, lo miro de reojo y estoy a punto de ignorar los mensajes entrantes cuando veo por el rabillo del ojo que me escribe mi primo Lucas, desbloqueo el móvil y me quedo estático al leer el contenido del mensaje.

Lucas: ¿qué cojones significa esto, tío?

Mi hermana ha llegado llorando a casa, ¿el chico de la foto es Pablo?

Estoy confundido, no entiendo de qué me habla. ¿Qué foto? Pero no me da tiempo a preguntar porque rápidamente me llega otro mensaje.

Lucas: foto

Abro la boca de par en par al ver la imagen.

¿En qué momento de la noche pasó esto? Y, lo peor, ¿por qué cojones ha llegado a Andrea y Lucas antes que a cualquiera de nosotros? Tampoco es que fuésemos a ocultarlo, pero al menos no me habría pillado por sorpresa y sabría qué decir.

Yo: joder tío, no sé que decir...

Lucas: ¿es Pablo o no? 

Yo: parece que sí, joder no lo sé. Ni siquiera sé como tenéis esa foto, dame tiempo para averiguarlo.

Lucas: Tengo a mi hermana llorando en el piso de arriba tío, así que no me jodas. ¿Tú lo sabías?

Yo: ¿qué? si ni siquiera sé en qué momento se supone que pasó eso. Joder tío voy a averiguar lo que pueda.

Lucas: de acuerdo, avísame.

Menudo marrón nos acaba de caer ahora.

Aún sin entender qué ha pasado, envío un mensaje de emergencia por el grupo para que nos reunamos los cuatro y reconstruyamos la noche. Es imposible que ese momento se nos escapase a todos. Por muchas lagunas que tengamos de la fiesta es algo que no nos pasaría desapercibido, y menos a mí.

Y dudo mucho que mi amigo le haya puesto los cuernos a propósito a mi prima, es inviable. Así que tiene que haber algo más. No digo que bajo el efecto del alcohol sí hubiese sido capaz de hacerlo porque sé que no. Pero entonces, ¿qué otra explicación hay?

Menuda movida

Muevo la pierna impacientemente mientras espero a que los chicos vayan contestando, incluso llamo a Pablo para ver si por un casual tiene el móvil en vibración y se despierta con el zumbido. Por suerte, parece que surte efecto porque mi amigo da señales de vida.

Atrévete ConmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora