Everglow ✔️

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Hago nuevamente aparición para traerles un shot de Paul, ya que fue el ganador de la votación anterior. Tengo que confesar que durante la semana me estaba comenzando a preocupar porque no se me ocurría ninguna idea, menos después de haber visto el capitulo y lo qué pasó 😭. La verdad que me siento bastante decepcionada, están matando personajes que aportaban mucho al programa y que tenían todavía mucho que contar, me encantaría saber si soy la única que se siente así o cualquier cosa que quieran comentar. Quiero saber que opinan.
Sin más vueltas, acá está el shot y espero que les guste, personalmente adoro cómo quedó pero los que tienen la última palabra son ustedes. Dejen un voto y un lindo comentario si les gusto y como siempre mil gracias por el apoyo.
                                                                Saludos, Athena.
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Estaba revisando unos papeles de Hilltop, desde que Maggie se había ido y había dejado a Jesús al mando, yo tomaba el lugar de su mano derecha...aunque a veces parecía que me ocupaba más yo del liderazgo que Paul. No lo podía culpar, a él le gustaba salir a explorar, sentir la adrenalina de estar fuera de los muros, así lo había conocido y así se mantendría hasta el último momento.
En este momento Paul se había marchado junto a Daryl y Aarón en busca de Eugene. No veía la hora de que volvieran.
-(tn)_________- escuché como Tara me llamaba a medida que subía por las escaleras. Sabía que si me estaba buscando era porque ellos ya habían regresado. Junto a una enorme sonrisa y acomodando los papeles con los que me encontraba, esperé a que Tara se acercara a mi. -(tn)_________- volvió a repetir cuando ya se encontraba en mi campo de visión. Me encontraba tan emocionada, ansiosa, nerviosa. Mierda ya no sabía que estaba sintiendo, que no noté lo apagada que sonaba la voz de mi amiga.
-ay, gracias que volvieron- comenté mirando a Tara con una sonrisa gigante -no sabía cuánto más iba a aguantar esto. Hay tanto que tengo que contarte, pero lo voy a hacer después de que hable con Paul- todo esto salía de un tirón, no sabía si ella estaba logrando comprender todo lo que decía debido a la velocidad con la que me estaba expresando, pero que importaba, estaba demasiado feliz y nada podía quitarme esta sensación.
-(tn)________- volvió a decir con tono lúgubre -hay algo q-
-después me decís Tara. Vamos- la interrumpí tomando su mano y casi arrastrándola escaleras abajo.
Al llegar al salón principal de la casa, me encontré con Daryl y Aarón, ambos sentados en en el sillón en silencio.
-chicos, ¿lograron encontrar a Eugene? ¿Está bien? ¿Está en la enfermería?, ¿Dónde esta Paul?- no podía frenar, estaba tan acelerada que apenas se entendía algo de lo que decía.
-(tn)________, cariño- comenzó Aarón levantándose de su asiento y llegando a mí para colocar sus manos sobre mis hombros y mirarme fijamente -necesito que te sientes- ahí lo pude notar. Sus ojos apagados y rojizos, su voz levemente ronca.
Me separé de su agarre y miré a mi alrededor. Daryl no había abandonado su postura desde que había entrado, aún con su pelo sobre su cara pude notar su gesto afligido. Mi respiración se aceleraba a medida que mi cerebro comenzaba a unir los puntos y entendía que esta historia se comenzaba a transformar en un drama.
-(tn)__________- intentó pronunciar Tara pero un sollozo se le escapó.
-no- susurré examinando toda la habitación, esperando que se una estupida broma y él sólo estuviera escondido en algún lado -¡no!- grité para salir desesperadamente. Tenía que buscarlo, él tenía que estar aquí.
Aún cuando me encontré con los terrenos de Hilltop y el viento azoto en mi cara, seguí buscando frenéticamente. Cada habitante me miraba preocupado y con temor, no sabía si era porque estaba actuando como una demente...o era por lastima. Sentía como la garganta se me cerraba y me faltaba el aire. Comencé a correr y me adentré en el bosque, no me importaba por donde estaba yendo, solo quería escapar, alejarme de todos los recuerdos que comenzaban a agolparse en mi mente.

"Paul estaba detrás mío, sus brazos rodeaban mi cintura y su rostro aparecía por sobre mi hombro debido a la diferencia de estatura. Él solo se encontraba molestándome, haciéndome cosquillas, soplando en mi cuello, con tal de distraerme del trabajo que estaba haciendo.
-Paul te adoro- dije con fingido cansancio volteando mi cara para poder quedar frente a la suya y tener así un vista espectacular de sus impactantes ojos -pero si yo no hago esto ambos sabemos que nadie mas lo hará- Paul sólo sonrió y deposito un casto beso para dejarme seguir trabajando...aunque no deshaciendo la posición en la que se encontraba.
-por eso te amo, haces que este lugar siga en pie, que nos mantengamos unidos. Eres el pilar de esta comunidad. Eres mi cable a tierra- una risa se escapó de mis labios -no te rías, estoy abriéndote mi corazón- acotó dramatizando completamente este último comentario.
-eres un idiota cuando te lo propones-
-ey puedo ser muchas cosas, apuesto, divertido, loco...- dejó la frase inconclusa a causa de mi risa. Esto era lo que amaba de estar con él, aún con sus chiste malos lograba hacerme reír. Era en momentos como estos en los que simplemente éramos nosotros y no existía nada más.-hablando de locuras, si hiciera una cómo esta- sus manos rozaron las mías y depósito un objeto en ellas. El suave material rozaba mis dedos y no pude identificar qué era hasta que Paul quitó su mano de la mía y la volvió a colocar en mi cintura. Sólo cuando el objeto estuvo a plena vista identifique inmediatamente qué era. No fue ni necesario que abriera la caja. Mis ojos se ensancharon y llevé un mano a mi boca para evitar que un grito de sorpresa asustara a toda la comunidad -¿Qué contestarías?- susurró a mi oído para por fin finalizar la pregunta que le había quedado inconclusa.
Giré, aún entre sus brazos y con el objeto casi estrujándolo a mi pecho, ahí estaban otra vez esos ojos azules que hacían que me hundiera. En muchos momentos llegaba a temer que me pudiera ahogar en ellos.
Las palabras no salían de mi boca y sólo cuando estaba por contestar, una Tara apresurada hizo aparición requiriendo nuestra presencia"

Ese recuerdo había ocurrido minutos antes de que Paul se marchara. Mis piernas seguían moviéndose, solo que ahora ya no corrían, casi se arrastraban cual caminante. No sabía a donde iba, pero mis piernas seguían un camino como si una fuerza las estuviera guiando. El bosque me engullía por completo, cada centímetro que hacía era como si me adentrara en una oscuridad absoluta. A cada paso, los árboles se hacían cada vez más frondosos y altos, ya no distinguía si era de noche solo aquí o en todos lados.
Al cabo de unos minutos, me encontré con que, a unos metros, se divisaba algo caído en el suelo. Mis piernas seguían avanzando y yo solo quería regresar, sabía lo que me esperaba pero no quería afrontarlo.
Con lágrimas cayendo una tras otra incesantemente, caí de rodillas ante el cuerpo inerte. Pase mis manos por su pecho, como tantas veces lo había hecho, pero esta vez no había un palpitar cálido que se fundiera con el mío. Acaricié su rostro, pero sus ojos azul celeste ya no transmitían paz, sólo devolvían una mirada fría como la nieve. Enredé mis dedos en su pelo, pero no recibí una sonrisa a cambio.
Me lo habían quitado y habían dejado la prueba del crimen atroz para que yo entendiera que esto no era una broma. Para que entendiera que me lo habían arrancado como cuando pasa un tornado, ya que se sentía realmente así. El tornado pasa y destruye todo, pero lo que verdaderamente duele, es cuando la fiereza ya pasó y sólo queda la tranquilidad. Queda el vacío, el silencio, que hace que puedas comprender de apoco  lo que realmente ocurrió. Que te percates de lo que te fue expropiado en un momento, en un simple segundo.
Mirando su rostro, sentía como un agujero se hacía en mi, me sentía ultrajada.
En el bolsillo de mi pantalón, sentía como si algo comenzara a quemarme, el objeto del recuerdo se encontraba allí, haciendo presencia como queriendo marcar mi error. Lo tomé con dedos temblorosos, con el temor irreal de que enserio empezara a quemarme.

"-¿no vas a contestarme antes de que me vaya?- cuestionó Jesús frente a mi, segundos antes de marchar en busca de Eugene.
-no- decrete pasando mis dedos por su suave cabello, haciendo que él cerrara los ojos y sonriera placenteramente -así tienes un motivo por el cuál volver-
-nada, absolutamente nada- dijo abriendo sus ojos, el azul del mar se encontraba con la tierra. Ambos estaban listos para comenzar a dar vida -me impedirá volver a ti- y me besó..."

Si simplemente hubiera sabido que podía ser el último, te hubiera detenido, te abría encadenado a una Columna con tal de evitar de que salieras...te hubiera abrasado un poco más fuerte y besado más tiempo.
-si hubiera sabido que esa sería la última vez que te vería, te hubiera dicho que si- dije al aire y coloqué el anillo en mi dedo.
Lloré sobre ese pecho rígido y frío como un viuda desconsolada...porque después de todo, eso era lo que era.

porque después de todo, eso era lo que era

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