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Era el día de la salida y el pelinegro por su parte no podía estar más tranquilo,de hecho por su mente no pasaba ni el más mínimo pensamiento de que podría llegar a vivir una situación incomoda con Seungmin,el estaba cómodo a su lado,¿Porque la situación se pondría incomoda cuando se llevaban más que bien?

Acordaron por mensaje que a las dos de la tarde se encontrarían en la primera parada de la estación del centro,esa estación donde hyunjin recibió la peor noticia que le podían haber dado,como también recibió la dichosa companía de una persona que estaba seguro ahora le gustaba.

A veces regañaba a su corazón al éste no dejar de latir al recibir un mensaje de aquella persona.

Y era cierto,de hecho estaban nerviosos también,pero nada de otro mundo;no es como si fuera alguna de esas novelas románticas donde los personajes principales se desesperaban en buscar el look o maquillaje perfecto,ese no era el caso.

HyunJin estaba orgulloso de si mismo,es decir,¡Ya había dado el primer paso!,bueno no en general ya que no específico que era una cita,pero salida es salida.

Eran las nueve de la mañana.

Hyunjin se encontraba en un pequeño espacio en su cuarto donde usualmente ponía en práctica algunos pasos de baile para no atrasarse cuando faltaba a alguna clase,y si tenía inspiración creaba algunos,aunque la mayoría no le convencía.

Realizo algunos movimientos  que raramente utilizaban en clases y se dejó caer en el piso,hoy no tenía inspiración,su cabeza estaba dando vueltas y vueltas sobre la imagen de un sonriente pelirrojo que últimamente se dedicaba a sobornar a su mente para mezclarse en medio de sus pensamientos más diarios.

Unos suaves golpes en la puerta resonaron abruptamente logrando sacarlo de sus profundos pensamientos y entonces al dejar escapar un suspiro junto a un -pasa- logró escuchar el sonido de la puerta ser abierta tranquilamente y entonces levantó la mirada para encontrarse con la de su madre quien sostenida sobre el marco de la puerta solo articula que el desayuno esta listo para luego desaparecer dejando la puerta sutilmente abierta dando a entender al pelinegro que no se tardara demasiado en bajar.

Haciendo caso al pedido silencioso de su madre,se levanta ignorando el hecho de que se encuentra algo sudado por su anterior pequeña practica de baile y se dirige a la cocina donde su madre se halla sentada comiendo una simple manzana,mientras que en su lado habitual de la mesa hay un plato con wafles junto a un vaso lleno de jugo de mandarina,en ese momento no puede evitar pensar en el sufrimiento de su madre quién tiene que soportar todo el peso que quedo luego de su padre,es decir,a pasado apenas un corto lapso de tiempo desde lo sucedido pero su madre lleva más consigo misma de lo que alguien podría llegar a pensar,pero lo calla y en lugar de hacer alguna pregunta a su progenitora sobre lo poco que estaba comiendo la cual sabia que sería respondida con un -todo está bien,no te preocupes- de su parte,se sienta frente a su plato de comida para rápidamente devorar su desayuno el cual sabe que con mucho cariño su madre preparó y tomó algo de bebida para luego agradecer a la mujer que le dió la vida,lavar su plato y dirigirse a su habitación nuevamente para poder tomar un baño y luego colocarse con parsimonia las ropas que ya había elegido el día anterior para no andar retrasado y todo aturdido.

Sabía que aún era temprano y que cualquier persona que lo viera en ese momento lo trataría de adolescente hormonal desesperado por tener una "cita" y no por lo que realmente era : un adolescente dolido.

No con las personas de su entorno sino que con la vida misma que se encargo de enrrollar una gran lista de dificultades para que estas fueran a parar bajo los pies de Hyunjin.

Termino de arreglarse cuando el reloj marcaba las diez con media hora y entonces tomó su teléfono junto con sus audífonos,su tarjeta de autobús y algo de dinero.

•That Day•  »|[HyunMin]|«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora