Capítulo 1

12 3 0
                                    

Estaba en clase, el profesor estaba dando los dibujos y diciéndonos las notas sacadas.

- ¿Hablaste con Xavier?

- No, ahora lo hago cuando tengamos el descanso.

- Señorita Dafne, tienes un nueve y medio.

Me levanté y fui a por mi dibujo.

Me levanté y fui a por mi dibujo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- ¿Que hice mal?

- El borrón que tienes en la esquina.

- Lo siento, es que lo había acabado y usted dijo lo de poner el nombre y lo de la clase en la parte de delante así que tuve que tapar parte de mi dibujo.

- Esta bastante bien, vuelva a su asiento, mañana os daré el otro que mande.

Terminando la clase fui en busca de Xavier, el cual estaba en un banco de una pequeña plaza.

- Xavier, hola.

- ¿Que os traé por aquí?

- Necesito tu ayuda.

- Cuéntame.

- ¿Puedes acerté pasar por mi novio?

- Sabes que soy Homosexual ¿Verdad?

- Sí, pero no pareces que lo seas, eres muy masculino.

- Soy hombre y me gusta serlo.

- ¿Entonces?

- Vale, pero solo una semana.

- ¿No vas a preguntarle por que?

- Jack, no soy tonto, le gusta el frutero y es lo típico que hacen las adolescentes, aun que pensaba que ya teníamos una edad y dejamos de serlo.

- Es idea de ella.

- Lo supuse.

Se echó a reír y Jack lo acompañó en su risa.

- Bueno yo tengo que irme ya. -Dijo Jack.

- Que te vaya bien el dentista.

- Gracias loca.

- Bueno tú te viene conmigo a la frutería a comprar una manzana. -Dijo Xavier.

Entramos en la frutería y Xavier cogió un guante transparente y agarro una manzana, se acercó al mostrador y la puso encima.

- ¿Cuanto es?

- 25 céntimos. -Respondió el chico por el que suspiraba.

- Amor¿Que quieres?

A él.

- Nada Xa-Me pare y rectifique, nada de Xavier- Amor, gracias.

- No hay de que muñeca.

Era increíble pero no vi ningún signo de atención hacia a mí, por inercia uno escucha hablar y gira la cabeza. Me agarro Xavier de la cintura y salimos.

- Creó que lo tienes muy complicado.

- No me desanimes anda.

- Bueno quizás si hablamos sobre algo y nos va oyendo, pero ya te digo que tu plan para mí perspectiva hace agua por todos lados.

- Es que no eres creíble.

- ¿No serás tú la poco creíble?

- Yo no, eres tú qué no te metes en el papel.

- Tú eres la que te ha costado milésimas de segundos el saber que me tenias que decir amor y no Xavier, sin olvidar que estabas casi babeando.

Estaba reclamando cuando era yo la que quería conseguir algo de todo esto.

¿Que ganaba él?

- ¿Por que tanto interés de que sea creíble?

- Primero para que tu consiguas a ese y segundo para que un chico de la facultad me deje en paz.

- ¿No eres gay?

- Sí pero no me gusta cualquier tío.

- ¿Y no es malo que crean que te gustan las chicas? -Alce mis cejas.

- Nada que ver, como no hay bisexuales, creo que más que homosexual o incluso heterosexuales.

- Exagerado.

- Un poco, pero no me incómoda, no es la primera vez que estaría con una mujer.

- ¿Cómo?

- Pues hace unos años aun no tenía claro que me gustaba, quizás por que me negaba a ser lo que soy, pero realmente nunca me habéis atraído las mujeres sexualmente.

- ¿Vamos a tomar un café?

- Claro, pero a donde para el acosador.

- Perfecto Xavier.

- Amor, dime amor.

- Vale. -Me eche a reír.

Enamorada De Quien No DeboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora