Capitulo 2: "Te confieso"

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Al llegar a la escuela, Jazmín parecía muy deprimida, Alice bien sabia que su relación con la madre no era nada buena. 

-Que rayos te pasa?-  Dijo seriamente Alice.

-Es mi madre, se que trata de educarme, pero, pero, no se, ayer me dijo que debía decirle por que había llegado tarde a casa, y yo le dije que perdí la noción de el tiempo en tu casa, lo cual era cierto- de los ojos de Jazmín se podían ver claramente caer unas gruesas gotas de agua.

-¿Y eso que tiene de malo?- pregunto suavemente Alice, ya que Jazmín se había puesto a sollozar.

-Me pidió el cinturón... -contesto entre lágrimas Jazmín.

 -Eso es... IMPOSIBLE!-casi gritó Alice.

-Al parecer no lo es. Francamente, te confieso que odio mi vida Alice.

-Yo también Jaz, me enloquece que pueda tener y hacer todo lo que yo quiera, no puedo tener el deseo de tener algo, porque lo podría tener. Si pudiera hacer algo...

-Pero no puedes, a menos que tengas una clase de pariente científico medio loco que halla creado un aparato para cambiar de cuerpos- dijo combinando sus risas con sus lágrimas.

 -De hecho...-Respondió pensativa su amiga

-Ahre- volvió a reír.

-Tengo un tío loco que me dijo que si usaba esto- le mostró una especie de bincha-pañuelo - "podría intercambiar de cuerpos solo por 36 horas con quien más lo necesite.

Una sinrisa se dibujo en el pálido rostro de Jazmín.

 -Probar no le hace mal a nadie- respondió ella con el enrojecido rostro de tanto sollozar.

Ambas tomaron el aparato y todo empezó a girar, había destellos rojos, verdes, violetas, azules y rosas alrededor de ellas, pero nadie parecía darse cuenta.

(Ahora y en otras ocaciones, la historia se va a narrar en primera persona, y arriba dirá quien es quien narra ;) )

*Jazmín* 

Era muy extraño eso del intercambio de cuerpos, pero al menos no sentía ese dolor que me había causado el cinturón de mi estricta madre. Según ella era "ignorante y egoista"

-Eso fue extraño-dije sin darme cuenta de que Alice, en mi cuerpo original, estaba retorciéndose en el piso. Francamente, parecía que la habían Cruciado (Si no leíste/miraste Harry Potter de seguro no entenderás).

 -Esto es lo que sufres Jazm... Alice- me dijo ella y aclaró, casi susurrando, que debíamos, a partir de ese momento, llamarnos por el nombre de nuestros cuerpos para no levantar sospechas.

-Tienes razón, pero ¿estás bien?- pregunté, porque no recordaba yo haber sufrido tanto con los "azotes" por llamarlos asi. De seguro estaba acostumbrada.

 La clase siguió bien. Pero Alice seguía dolorida, o al menos eso parecía por la mueca que hacía, prácticamente, todo el tiempo.

*Alice* 

¡NO PUEDO CREER EL DOLR QUE SE SIENTE! Encima y para colmo, mi madre "me" los había hecho en la mano con la que escribía siempre.

En la clase me dolía la mano al escribir y claramente hacia muecas.

Tengo que ir a la casa de Jazmín y, fingir que es la mía.

 -¡Mamá!¡Llegué! -Grite

-Y a mi que?-respondió groseramente mi madre.

-Uff-fue lo único que respondí. Mujer miserable.

-Como te fue en la escuela?- preguntó una fría voz conocida. Era Lucas, el chico que le gustaba a Jazmín.

 -Hola-le respondí con una indiferencia mal fingida, tratando de ocultar el asco que le tenía-no lo sé, ¿tu no estabas allí? Hablemos arriba.

Subimos, era una pobre sala que tenia una cama mal acomodada. Como me arrepiento de estar aquí. Peor ubiese sido escaparme, no me anda gustando eso de el cinto. ¡Eureca! Tengo un deseo al fin. Volver a mi cuerpo.

-Estaba preocupado por tí- dijo y se sentó en mi cama. Sin MI PERMISO. O claro, soy Jazmín.

 - Y tu crees que yo no?- mentí.

 -Tu nunca te preocupas por tí- trate de no reír pero, bueno no lo logré.

-Estaba preocupada por TÍ- resalté esto último y me senté junto a el.

-Bb, siempre tan humilde- dijo y me beso, ME BESO. Sus labios se habían pegado a los mios, y no hice esfuerzo alguno para salir de ese beso, era verdaderamente precioso sentirlo allí.

 -¿Te pasa algo?- preguntó al ver que me había ruborizado.

-No n-nada, solo que no me esperaba esto- tartamudie.

-¿Es en serio? Entonces tampoco esto- dijo y volvió a besarme, pero aún con mas "pasion". Esta vez lo frene.

-Es que, no lo sé, es ayyy por dios no se que me pasa-dije y me puse a llorar.

-Mor, estas bien?-pregunto este preocupado y me levanto de la barbilla.

*Jazmín*

 Estoy llendo a casa. Oh no, estaba en el cuerpo de Alice. Cambié el rumbo, toqué timbre y me acordé ¡EL CELULAR! 

Detrás mio un chico con una rubia y corta melena se acercaba a mi con mi celular en sus brazos.

-Aquí tienes-Dijo sin aliento el chico.

-Gracias- contesté -pasa- dije y extendí mis brazos hacia la enorme casa que tenia en frente.

Best Friends ¿Forever?Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz