Capítulo 23

73 4 2
                                    

Esa noche la casa Thompson estaba tan callada, no se escuchaba un solo ruido, solo se escuchaba los leves pasos de unos zapatos, era Robert quien caminaba tranquilamente. El caminaba por los pasillos con algo de seguridad. Se alegraba que por fin su princesa durmiera con una sonrisa. Con una media sonrisa bajo hacia el primer piso en contraendose con una Joe dormida en el sofá, se veía lo agotada de la joven, y no era para más, la chica trabajaba hasta tarde, y si le sumamos la responsabilidad de Recher, no era un trabajo fácil, para esta. El señor Thompson camino hacia el sofá, para ponerse en cuclillas delante del sofá. El mostro una sonrisa de orgullo viendo todo lo que su joven hija a logrado hacer, con tan solo 22 años. El coloco un mechón de cabello detrás de su oreja. El veía lo que era su hija, ese bebe que el vio crecer, esa niña que le trajo alegría

El dejo salir un suspiro, él aún recordaba con tanta alegría en el momento que Josephine nació, lo recordaba como una película, lo recordaba perfectamente, ese fue unos de los momentos más importante para él, junto con el nacimiento de Recher

Flashback 

Robert daba vuelta de un lado a otro, tenía de esa manera por lo menos una hora. El joven de apenas 24 años estaba hecho un manojo de nervios, él no podía explicar con palabras lo que sentía en se momento, sus padres quienes lo acompañaban. Lo miraban con una leve sonrisa, sabiendo que todo saldría bien. Pero él tenía miedo, miedo a que su a esposa muriera en el parto. El hombre se pasaba la mano por su cabellera negra, dejando ver sus nervios, sus ojos no encontraban un sitio fijo, solo viajaban, con miedo

-hijo relájate- la voz de su madre se escuchaba tranquila, y tratando de calmarlo

-pero mamá, y si le pasa algo- la señora negó con su mirada, mostrando una pequeña sonrisa

-no le pasara nada- ella sonrió, mientras su esposo, asentía a su lado- ellas estarán bien

-lo sé- él se sentó al lado de su madre, quien puso su mano en el hombro del joven- ella es fuerte

Él lo sabía su esposa era fuerte, era una guerrera en esta vida. Pero aun asi tenia miedo, miedo a que le pasara algo, algo que le hiciera daño. Él tenía miedo de perder todo. Todo lo que ama. Sus padres estaban a su lado, dándole apoyo. Ellos estaban realmente orgullosos del hombre en quien él se había convertido, se convirtió en hombre, honrado, amable, buen esposo, y será un gran padre. Él apretó la mano de su madre, con algo de nervios

-mamá

-dime

-gracias

-por qué

-por ser la mejor madre del mundo, por darme la vida. Por nunca rendirte conmigo, por aceptarme como soy- a su madre le salieron algunas lágrimas, al escuchar esas palabras- por ser una mujer que admiro, por siempre ponerme delante de ti, que cuando no había alimento, tu siempre me diste el pan, antes de alimentar te. Gracias, por darme la vida. Espero ser un gran padre como tú lo fuiste conmigo

Su madre se sorprendió de escuchar esas palabras, ella acarició el rostro de su hijo. Ella ama a su hijo como a nadie, ese jovencito imperativo, se volvió en este gran hombre, que hoy está en la sala de un hospital esperando conocer a su más grande orgullo. El beso la mano de su madre, agradeciéndole por todo

-sé que te convertirás, en un gran padre, hijo- esta vez fue su padre quien hablo

El señor de unos 47 años, se paró de la silla igual que su hijo, en se momento los dos compartieron un abrazo. Era de esos pocos abrazos que un padre y su hijo comparten. Su padre se aferró al con felicidad, sabiendo que ya su hijo creció, que era momento de dejarlo libre, de que haga su propia vida. Ellos se separaron, para verse a los ojos, su padre mostraba el orgullo que le tenía

Te BuscoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora