You and Me (It's Destiny, Darling) ➳ MarkHyuck

Uno

Cuando Mark conoce a Donghyuck cree que el muchacho es un beta. Donghyuck es ruidoso, mandón, confianzudo y grosero, nada parecido a los omegas que él conoce. Así que da por hecho que el muchacho es un beta, y lo trata justo como eso.

Es el primer amigo que hace en su llegada a Corea y aunque la mayoría del tiempo le causa fastidio lo encimoso, latoso, creído, petulante y grosero que puede llegar a ser, no se aparta de su lado. Es fácil estar junto a él y eso es suficiente para Mark que había estado estresado con todo eso de la mudanza y las dudas sobre si lograría encajar en Corea.

Porque sus padres están bien, ellos habían estado en Seúl antes y tienen conocidos y viejos amigos. Su hermano mayor es simpático y Mark apuesta que puede hacerse amigo hasta de las paredes si se lo propone. El problema es él, con sus inseguridades, su timidez y su
cabezota que piensa demasiado. De ser por él, seguiría solo, triste y abandonado luego de un mes de su llegada, pero por suerte Donghyuck toma cartas en el asunto y hace de su vida en el nuevo país menos solitaria.

(Y no es que Mark piense eso -en realidad sí-, es que Donghyuck se lo dice cada que tiene oportunidad.

-De no ser por mí, estarías en tu habitación jugando con tus muñequitos -recalca el
moreno con diversión, esa vez que pelean sobre quien puede ser el capitán del equipo de fútbol y Mark dice que no necesita de Donghyuck.

La verdad es que sí lo hace y la pelea es inutil, porque Jaemin es elegido líder).

(O8)
🐯☀

Es mitad de la primavera cuando su familia decide mudarse a Corea, aunque técnicamente no es una decisión familiar; Mark no recuerda que le hayan preguntado si quería mudarse al otro lado del planeta, lo único fresco en su memoria son sus berrinches sobre no querer irse, los regaños de su padre y el consuelo de su hermano mayor. No tenía otra opción, debía irse con su padre a otro continente, sin importar lo mucho que llorara, gritara o pataleara.

Estaba hecho.

A Mark no le gusta Corea, empezando por el hecho de que ahora debe presentarse como Minhyung en todos lados. No le gusta el idioma que es tan difícil y que tan poco domina; odia cuando sus compañeros de clase se ríen cada que él se enreda con las palabras y pronuncia oraciones mal formadas con varias frases en inglés que se escapan cuando intenta traducir las cosas en su cabeza. No le gusta lo rígidas que parecen ser las personas y las cosas, porque ahora sus acciones se limitan a si es o no de buena educación, o peor, si eso es o no es digno de un alfa como él. (Mark apenas y comprende lo que es ser un alfa, y no desea que lo enreden más con las normas a seguir).

Todos los cambios son demasiado frustrantes para un niño como él, y todo lo que quiere hacer es volver a Vancouver y hacer todo más simple.

Para Johnny todo parece ir bien, admite con algo de envidia mientras mira a su hermano salir del garaje montado en su bicicleta para reunirse con otro grupo de muchachos de su
edad. Mark lo mira desde la ventana de la sala y suspira melancólicamente cuando su hermano se ríe de quien sabe qué con los otros muchachos. Está aburrido, y aunque suene egoísta, desea que Johnny no tenga amigos y se quede a ver la televisión con él y le traduzca las cosas que no entiende (porque Johnny es definitivamente mejor con el coreano que él).

-¿Por qué no vas con tu hermano? -le dice su madre con una sonrisa tranquila. Mark no tiene el corazón para decirle que no quiere intentarlo otra vez.

Otra vez porque el día anterior intentó ir con ellos y fue brutalmente rechazado.

Pero no dice nada, porque se supone que está intentando hacer su vida en Corea, por su mamá y su papá, por el nuevo trabajo, y por Johnny también. No quiere meter a su hermano en problemas, no quiere ser una carga y más allá de todo no quiere admitir lo terrible que son sus habilidades sociales. (En Canadá tenía amigos, que no recuerda exactamente cómo los consiguió. Pero ahora en Corea es realmente difícil encontrar uno -al menos uno que no sea su extraño vecino).