One Shots: Corazon de melon En La Universidad Y En El Amor

Relación De Confianza - Nathaniel x Sucrette

Hola Chic@s! Espero que hayan comenzado muy bien este nuevo año y de antemano lamento el retraso pero es han pasado muchas cosas, me mude de la casa de mis padres para comenzar la universidad (en este momento estoy como Sucrette xD)  y también estoy ocupada repasando materias.  Voy avisando que por ahora NO tengo pensado dejar de escribir pero tardare más tiempo en actualizar, ya que se de sobra que la carrera de doctor en medicina es muy pesada y la idea es aprobar el semestre!

En fin, espero que les guste este nuevo one-short!!!

Atención! /!\ SPOILERS DEL EPISODIO 10 DE CDMU

chaoo  

KUMI
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La sensación de sus labios aún permanecía latente en los suyos, el como la alzó en brazos, tomándola por la cintura como si pesara unos pocos gramos. El sonido de sus respiraciones era una melodía pegadiza en esos momentos y todo aquello hacia que se le erizara la piel.
Kumi no paraba de dar vueltas en la cama, decir que estaba inquieta era decir demasiado poco. ¿Que pasará ahora? ¿Habían vuelto a estar juntos? El ya no era el mismo chico del instituto ¿como se lo había tomado? ¿Que significaba ese beso para el?
Habían pasado por todas las actitudes posibles durante estos pocos meses: llevarse bien un día y enfadarse al otro, luego estar de amigos para el día siguiente evitarse y ahora ella no podía dormir esperando un mensaje suyo explicando porque se había ido con tanta prisa o para acallar alguna de las tantas interrogantes que tenia en este momento y hacían su cabeza un desastre... o simplemente para que le avisara que había llegado a su casa sano y salvo, como en los viejos tiempos.
Esa noche soñó con él y en como hubieran sido las cosas si en lugar de haberse quedado callados, se hubieran dicho todo lo que les pasaba por la cabeza en ese momento.

El día próximo, no fue el mejor y no sólo por el gran dolor que se apoderó de sus cienes en sus primeros minutos de despierta sino que también, debido a un mensaje de Alexy, tuvo que correr rumbo al hospital para ver a Rosa donde se entero que por crueles azares del destino, había perdido su bebé. Al enterarse de la noticia, a Kumi se le calló el alma a los pies, Rosalya era como su hermana y por ende, ese pequeño brote de vida en su vientre era como un sobrino para ella y el hecho de enterarse que de un momento a otro  había dejado de existir, la devastó y no lo demostró del todo, sino hasta cuando llegó a la residencia del campus, que junto al enfrentamiento de Rosa y Alexy, terminaron con su día, logrando así que rompiera en llantos en la habitación de Chani.
La joven lloro a lágrima viva, por unos largos minutos en presencia de su amiga la cual no dijo una sola palabra y eso era de gran ayuda, ya que hay momentos en los que solo basta con estar presente como apoyo emocional. 
El día siguiente, ya no era el mismo. Todo parecía acoplarse a su humor, el cielo estaba gris y el aire se sentía pesado, pronto comenzaría a llover.
Eran muchas cosas las que ocupaban su cabeza mientras daba una vuelta por el parque, ¿como seria la actitud de Rosa a partir de ahora? ¿Como superará dicha pérdida? Su primer embarazo y la gran ilusión de ser madre, se habían extinguido en menos de veinticuatro horas. ¿Que pasará ahora entre ella y Alexy? ¿Logran perdonarse el haberse dicho cosas tan hirientes? Kumi entendía la buena intención en las palabras de Alexy pero a lo mejor no era un buen momento para discutir las distintas opciones, considerando que las noticias aun eran frescas y Rosa, herida y devastada con estas, no pudo evitar reaccionar a la defensiva y, sin querer, hirió a Alexy. 
Luego de todo esto, estaban las malas pasadas que le hacía su corazón, el recuerdo de lo sucedido con Nath aun seguía rondando por su mente, el beso y sus secretos la mortificaban, su mente se llenaba de preguntas y su entorno no emitía casi ninguna respuesta... 
De un momento a otro, la joven paro de caminar en seco, la angustia se apoderó una vez más de ella y tuvo que sentarse en el banco más cercano para no desplomarse en el suelo. Su pecho no podía dejar de subir y bajar a ritmos acelerados a la par que las lágrimas se precipitaban por sus mejillas y ahogo un sollozo mientras se cubría la cara con las palmas de las manos.
_¿Kumi? ¿Estas bien? - Una voz que conocía a la perfección sono a unos metros de ella y por instinto alzó la vista. Era Nathaniel, ¿y porque justo aparecía en el peor momento?
_Na.. Th... Me tengo que...  - Se apresuró a levantarse pero sus piernas le fallaron y casi tropieza de no ser por Nath, quien la abrazo por la cintura y la apego a él para evitar el impacto.
_¿Que pasó?...  - De un momento a otro la mirada de preocupación de Nath se convirtió en una de horror. - ¿Kumi? ¿Que te hicieron? ¿Esos tipos se acercaron a ti? - Sus ojos le suplicaban respuestas.
_¿T-ipos?  - Atinó a decir la joven débilmente. - Oh... No, no m-me los he cruzado.... - Respondio al final y él soltó un fuerte suspiro de alivio, mientras la tomaba en brazos al estilo nupcial. - ¿Que haces? - La joven abrió los ojos de par en par.
_Te llevo a mi casa, no te voy a dejar así acá. - Respondio mientras caminaba.
Kumi no recordaba bien, cuanto tardaron en llegar o en que momento se durmió en su cama pero cuando se despertó ya era de noche.
A la joven le dolía la cabeza y sentía sus ojos hinchados. Se levantó y fue directamente al baño, era la casa de su ex novio después de todo, se sabía el lugar de memoria, y ¿como no? Jamás olvidaría un solo detalle sobre él.
Dejo la puerta del baño mientras se enjuagaba la cara y sintió los pasos de Nath acercarse a ella.
_Ten...  - Nath le extendió una toalla y ella la acepto dubitativa. - Es más suave que las que tengo aquí, no te irritará más la piel. - Explicó el y ella solo se limitó a asentir a modo de agradecimiento.
Luego de terminar de asearse, Nath la tomó de la mono con una suavidad infinita para guiarla hacia el sofá y le tendió un vaso con agua helada.
El se mantuvo en silencio mientas ella poco a poco a apoco calmaba su pesadez física, secuela de su estado emocional.
De un momento a otro, Kumi apoyo su cabeza contra el pecho Nath y este le rodeo sus hombros con el brazo para estrecharla más a él y le dio un beso sobre el cabello. En respuesta, la joven rodeo con un brazo su torso. 
_¿Que fue lo que paso? Estas segura que nadie te toco ¿cierto? - Le habló el suavemente.
_Si, Nath todo esta bien... Solo es que... Rosa... - Kumi se cortó en secó y se apartó un poco.
_¿Que pasa con ella? ¿Esta bien? - Nath la miró interrogante.
_Nada... Yo... Esta bien, es todo lo que tienes que saber.... - Respondió ella desviando la mirada.
_Pero, Kumi... Mira como estas! - Dijo Nath mientras se incorporaba.
_Por favor Nath... No me preguntes más, no es sólo Rosa, tampoco están las cosas bien con Alex... - Dijo intentando cambiar de tema. - No te preocupes...
_Pero....  ¿Como no quieres que.... - Ella lo interrumpió.
_ No es lindo ¿verdad? - Kumi sonrió melancólica y el la miró interrogante. - Es desesperante, morirte por saber que atormenta a esa persona que te importa y que no te lo pueda contar...
_Yo... - El joven no entraban las palabras. - Si, esta vez me has dejado sin argumentos... 
_Mira el lado positivo, te comienzo a entender aunque sea un poco... - Ella le sonrió levemente con los ojos perdidos. 
_¿Que necesitas? ¿Que te reconfortaria ahora? Dime y te juro que te lo concedere. - Nath le acarició las mejillas.
_Esto... Que te quedes conmigo y que hagas justo esto que haces ahora...
_¿Acariciarte? - Preguntó esbozando una sonrisa y ella se la devolvió mientras negaba con la cabeza.
_Hacerme sentir completa... Unir poco a poco los añicos de mi corazón. - La joven le corrigió.
Nathaniel no se hizo esperar y la beso suavemente, como saboreando cada roce, ella le acarició el cabello con la mano que no tenía entrelazada con la de él en su mejilla. Poco a poco, en unos segundos que parecían hora se separaron, y se miraron directamente a los ojos.
_¿Que es esto? ¿Que sientes cuando me besas? ¿Que somos ahora? - Ella no puedo evitar preguntar.
_ ¿Que siento? - Preguntó Nath incrédulo, como si fuera lo más obvio del mundo. - Siento exactamente lo mismo que todas las veces que te he besado e incluso ahora es más fuerte, porque ya no somos niños....  Y que somos....  - Nath dudo un poco antes de contestar. - Se que en este momento ambos nos estamos ocultando cosas pero, lo tuyo tiene que ver con Rosalya y Alexy, sea lo que sea que haya pasado se que lo resolverán, tal vez, ellos no tengan una buena impresión de mi ahora pero yo se que con ellos estas en buenas manos... - El comentario de Nath, pese a ser una introducción a una futura respuesta, la reconforto de sobremanera. - Pero yo... Yo, te oculto cosas que daría lo que fuera por contarte y que cuando todo terminé, te podre decir, por eso, porque te estoy ocultando cosas y porque corres peligro, es que no podemos volver a ser lo que éramos antes, no por el momento... - Kumi se dispuso a hablar pero el se le volvió a adelantar. -... Pero...  No quiero dejarte ir, no puedo, no resistiría hacerlo de nuevo... Kumi, quiero que te quedes a mi lado, te quiero y se que tu a mi también, así que por el momento ¿porque ponerle título a lo que sentimos? Juro no tocaré a ninguna otra chica que no seas tu y aunque quisiera, ya no puedo eso.... Te propongo que tengamos una relación de confianza, que no salga de estas paredes y que confiemos en que en un futuro todo esto cambiará, que te diré todo y podamos tener una vida normal... ¿Que dices? - El joven la miró suplicante.
_Confío en ti Nath y se que todo esto lo haces para no lastimarme... Yo no podría alejarme de ti, te quiero demasiado....  Así que si. - Luego de estas palabras el la abrazo con  fuerza y ella podría jurar que lo oyó sollozar.
_Me encantará tenerte aquí todos los fin de semana solo para mi. - Le susurró contá los labios.

Fin