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   — Tienes suerte que me diste la noticia por escrito, porque si hubiera sido en persona...
   — Bueno, tardaste más de un mes en gira, así que ya no te tocará estar en la etapa de mis vómitos y máreos.
   — ¡Con que naturalidad lo dices! ¿Te estás oyendo hablar? Apenas podré dormir en estos meses. ¿Es que acaso no te cuidaste?
   — Chris, mi sexto sentido me dice que no tengo por qué preocuparme, con Colin fue distinto, ahora siento que por fin nos irá bien.
   — ¡Y tienes razón! Lo estuve pensando, ¿no te parece que necesitamos cambiar de aires? Carrie siempre está en Europa, Amelie por el mundo y sus hijas intentando buscarnos. Este país tiene recuerdos dolorosos para nosotros, ¿acaso no nos sentimos mejor cuando subimos a un avión con rumbo a otra parte? Deberías considerarlo.
   — Ya me has infundado miedo, si este embarazo... ya sabes... no podría superarlo y supongo... supongo que seguir en esta casa lo empeoraría. Pero, si todo sale bien y el bebé nace, lo mejor sería empezar de cero en un lugar en donde no tengamos miedo de encontrarnos con las personas equivocadas.
   — Pero, ¿a dónde nos iríamos?
   — Estás hablando con la prima ballerina y actriz Catherine Bellmer, si le mando un escrito a Lady Abbot, ella me colocaría en cualquier lugar para dedicarme a la enseñanza.
   Chris se sintió aliviado, tras lo cual, fui a buscar una hoja de papel y una pluma para decirle nuestro plan a Lady Abbot. Chris leyó el resultado, me abrazó y fuimos juntos a ponerlo en el buzón mientras me dice:
   — No sabría qué hacer si te dan empleo en Rusia, tú podrías hacerlo pero yo no podría antender a un paciente ruso.
   — Aprenderás rápido, eres el inteligente.

   — ¡Respuesta! — exclamé cuando leí el sobre con la delicada caligrafía de Lady Abbot, que decía lo siguiente:

Para: Catherine Bellmer.
Querida Catherine:
Disculpa la brevedad de mi respuesta, pues hemos estado exhaustos con la función de la beyadere porque la prima ballerina tuvo un ataque de pánico escénico. En fin, no sabes cuanto tiempo esperé para ver que has descubierto que mereces una vida más acorde a tu nivel de bailarina. Lo discutimos Lord Abbot y yo, y como subdirectores de La Academia Real de Ballet en Londres, nos dimos cuenta que el grupo de niños de cuatro a seis años necesita de otra profesora, pues es normal que al ser de nuevo ingreso haya más alumnos. Y, si aceptas, tendrías que vivir en Warner Street pues allí se encuentra una de nuestras mansiones que podemos venderles pues nunca estamos allí. Tu esposo, no estará muy lejano a una clínica pues Warner Street es exclusivo y tiene sus propios servicios.
Si aceptas, hazlo saber lo más pronto posible pues estoy más que emocionada que una amiga tan querida como tú, pueda vivir más cerca de mí.
Atentamente:
Lady Lorianne Abbot de Kaystone.

   Terminando de leerlo, redacté una respuesta con agradecimiento y diciéndoles que estaremos listos en quince días.
   Carrie se encontraba en Escocia y Amelie en Japón, las tuvimos que poner al tanto y Chris y yo comenzamos a organizar todo, lo que dejaríamos y lo que llevaríamos.
   — Esto es tan apurado. Me siento igual a cuando abandonamos Gladstone.
   — Pero aquello nos condujo a la desgracia y tristeza, ¡Ahora nos conducirá a la alegría y los triunfos eternos!

Las Muñecas De DresdenWhere stories live. Discover now