Niña hojalata

10 1 1
                                    

Era una  mirada de cristal acompañada con besos de carmín. Era una niña de corazón de hojalata acunada bajo el mes de abril. Era una maldición para el deseo, una brisa para el calor, era una flor en el desierto y una sonrisa entre el dolor.
Era aire, era hielo, era tormenta y chispas. Era el cielo azul en Diciembre y cigarro en la cornisa.

Con esos ojos fijos te juzgaba, con esa risa te mentía, con esas manos te bailaba y desaparecía con el día. Esos dientes blancos se asoman, amenazantes con una gran sonrisa, te mira bajo sus pestañas y se pregunta:

¿Me quieres?- dice clavándo  su mirada- ¿Cómo para soportar que mis lágrimas sean negras como el Leteo? ¿Cómo para descubrir  que nunca fui un ángel? - y vuelve a sonreír - ¿Y que en el infierno me acurruco cada viernes?

JilguerosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora