• Unfortunate • [Style]

Capítulo 21: Notas Tristes Parte 1

El miedo es la principal razón de la toma de decisiones estúpidas y ahora, el joven Leopold Stotch lo sabía.

La noche de la eliminatoria terminó mal. Todo lo mal que puede terminar con dos chicos borrachos que se aman y rara vez pueden demostrárselo y aunque aquella no fue la primera vez que se acostó con Kenny, si fue la más peligrosa para su vida familiar.

No era un secreto para nadie de la banda que mantenían algo más que simples besos, pero sus padres no estaban enterados ni siquiera de que las chicas no le atraían.

No, ellos no podían ni debían saberlo. Era consciente de que a su estricto padre no le haría gracia y que probablemente intentara corregir aquello y solo pensar en lo que podía hacerle a él o a Kenny lo hacía temblar.

Fue aquel miedo quien lo condujo a cortar contacto con su amigo de toda la vida, creyendo que si sus padres no veían interacción alguna entre ellos, no levantaría sospechas.

Como pasaba con muchos chicos con secretos, el joven Stotch estaba experimentando cierta paranoia y no se daba cuenta de que todos sus esfuerzos por ocultar “la evidencia” de sus padres, solo lo hacían más obvio para aquellos que se detuvieran a verlo por dos minutos.

No volvió a contestar los textos y llamadas de Kenny y evitaba en su mayoría a sus otros amigos con la excusa de que tenía muchos proyectos atrasados, dejó de verlos también e incluso, no volvió a recoger a la pequeña Karen de la escuela.

Luego de eso las llamadas de todos pararon y su bandeja de mensajes estaba vacía.

Nunca, por más problemático que fuera el asunto había aceptado abandonar a la niña de esa manera, se había mantenido firme en muchas ocasiones gracias a ella.

Sin embargo, cuando sus padres vieron aquellas marcas violáceas en su cuello, el miedo detonó un estado de pánico.

Butters se negó a dejar que alguien le arrebatara su feliz vida de ensueño y sin preocupaciones al lado de Kenny, donde podía fingir que eran una familia feliz gracias a Karen, pero en su esfuerzo por proteger esta, terminó perdiéndola.

Sábado 8:30 p.m. Notas Tristes.

Cada segundo sábado del mes, sus amigos y él se reunían en aquel bar-karaoke para pasarla bien un rato y olvidarse del constante estrés que suponía tratar de convertirse en estrellas. Era una costumbre suya y ninguno faltaba nunca, Stan incluso había llegado a decir que eso fortalecería sus lazos y los haría crecer como grupo, claro que Stan decía muchas cosas estando ebrio, pese a todo, cuando se acercó a la mesa donde Wendy y Clyde sonreían como idiotas al ver cada uno sus respectivos móviles, ambos se asombraron de verlo.

—Butters…—

La chica desvió la mirada rápidamente, haciendo evidente su incomodidad.

—Creímos que no vendrías—

Clyde no se molestó en disimular su enfado y su fría mirada solo hacía que el pequeño rubio lamentara su decisión de encontrarse con ellos.

—N-no sea tontos…—

Los miró con tristeza.

—No me perdería esta noche… Es nuestra—

Wendy pareció relajarse ante aquello. Era verdad, aquella noche era solo para amigos y que Stotch estuviera ahí demostraba que a pesar de todo, no los había abandonado.

—Entonces siéntate caramelo—

Con una sonrisa de alivio ocupó su usual lugar al lado de la chica y como si nada hubiera pasado comenzaron a hablar mientras esperaban la llegada de los demás.