T/n estaba en el estudio de Yoongi como solían estar. El chico miraba por la pantalla de su escritorio y ella estaba acostada en un sillón de ahí, ensayando una canción que ambos preparaban.
—Escucha —Le habló el chico con unos audífonos en las manos, ella se acercó para colocarlos y tomó asiento en sus piernas. El chico se recargó en la silla con nervios. —Si escuchas, ésta parte quedaría bien con piano y un poco de arpa.
—¿Quieres que lo haga? —Ella se removió para poder editar también. —Creo que sonaría bien. Mira, la partitura, aquí deberíamos de hacer algo más lento.
Yoongi la tomó de la cadera y se apegó más.
—Oh si, ya veo.—Genial —Ella se paró y fue de nuevo al sillón.
Yoongi asintió y siguió haciendo algunas otras cosas, mientras escuchaba la voz suave de la chica. Tapó su rostro avergonzado, ella lo miró y creyó que algo andaba mal.
—¿Tienes sueño? ¿Porqué no paramos por hoy? —Él asintió y quitó sus audífonos.
—Ahora te alcanzo.
T/n comprendió y salió de ahí.
Una vez más, Min había deseado tanto decirle lo que siente, pero era un cobarde.