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El encargado de la estación de trenes amablemente los llevo a su casa cuando la lluvia aun caía.

- Pero mira que trajo la lluvia – exclamo la esposa del señor Park, así se llamaba, al ver que Taemin entraban a la casa –

- A los pobres los dejo el tren y les dije que tendrían una habitación aquí –

- Justo a tiempo, acabo de correr a una pareja – dijo la señora Park poniéndose de pronto seria – digo, no importan las preferencias personales, el matrimonio es importante, ¿Podrías creer que sin más me dijeron que no estaban casados? –

- Increíble – dijo el señor igual de serio –

- ¿Y con el matrimonio...? -

- Choi – respondió Minho rápidamente – recién casados - agrego viendo a Taemin burlonamente, era obvio que disfrutaba eso –

- ¡Felicidades! – dijo la señora con una gran sonrisa – se ven muy felices –

- No tiene idea – respondió Taemin, después de la amigable presentación los condujo a su habitación, donde apenas entrando Minho se arrojó a la cama – no dormiré ahí contigo – le dijo e rubio al ver como el alto ocupaba toda la cama –

- Bien, tu puedes dormir en el baño – le dijo rodando en la cama –

- No, lancemos una moneda – dijo Taemin sacando una de su bolsillo –

- Bien – Minho se levantó y se puso frente al otro – cara, yo gano, cruz tu pierdes – el rubio arrojo la moneda –

- Cara – dijo Taemin frunciendo el ceño –

- Disfruta la bañera – le dijo Minho arrojándose en la cama de nuevo y Taemin lo ignoro metiéndose a la ducha a quitarse el lodo de encima. Minho ya estaba dormido cuando sintió unos golpes –

- ¡Levántate! ¡Levántate! – dijo golpeándole las piernas, Minho se despertó – Cara yo gano, cruz tu pierdes – dijo remedando al otro -

- Al fin te diste cuenta – sonrió el alto –

- Por eso dormirás en la bañera – dijo Taemin acomodando sus cosas en la cama – y vete a bañar apestas – Minho solo rio y corrió al baño –

Taemin ya estaba cambiado cuando escucho que tocaban la puerta así que fue a abrirla.

- Disculpa, la cena estará lista en una hora – era la esposa del señor Park – cenaremos anguila –

- ¿Anguila? – pregunto Taemin al que eso en particular no le provocaba –

- Si –

- Cariño, escuchaste, hay anguila para la cena – dijo llamando a Minho –

- Ah, ya se – se asomó del baño el castaño – ya que nos dejó quedarnos aquí, permítame cocinar –

- No, como crees que te molestaría... -

- En serio, debería dejarlo cocinar, es un gran chef – dijo el rubio que no quería comer anguila –

- Bueno, en ese caso... - dijo la señora con una sonrisa – tenemos a otra pareja hospedada, ¿no les molesta? –

- En lo absoluto – dijo Taemin –

- Bien, iré a avisarles – se retiró la señora –

Taemin pudo ver a través de la puerta entreabierta del baño a Minho recargado con una mano en el lavabo mientras cepillaba sus dientes, su cabello castaño aun húmedo se le pegaba en el rostro. Su mirada bajo del rostro y se dio cuenta que solo llevaba una toalla amarada a la cadera, su torso desnudo era bronceado y sus abdominales marcados, era muy apuesto y... ¡no debería pensar eso, tenía novio!

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