Deliciously Bad(One-Shot)

Deliciosamente Malo

Harry se subió al metro rápidamente, no era la línea usualmente tomaba para ir a su "hogar" cuando salía de la escuela, pero en verdad se hubiese arrojado bajo las ruedas de un taxi de haber sido necesario para escapar de la siempre insistente y pegajosa Ginevra Weasley, la hermana menor su mejor amigo, la chica era fastidiosamente insistente en coquetearle al pobre ojiverde y el no sentía ni la mas mínima atracción hacia ella, consideraba que lo único rescatable en ella era su cabello rojo, del mismo color que su difunta madre Lily Potter, y no era que Harry Potter fuera un chico superficial, no señores no se confundan... Es que Ginevra Weasley lo trató con desprecio desde que lo vio llegar de visita a su casa con una camiseta extremadamente grande y unos pantalones raidos claramente heredados, pero una vez se enteró que Harry seria asquerosamente rico al cumplir diecisiete sus ojos brillaron con avaricia y decidió conquistarlo, pero el ojiverde no caería en eso, no señor, asi que lo mejor era evitar a la pequeña cazafortunas de la que se decía que estaba mas recorrida que el camino al infierno a pesar de su corta edad.

Harry camino hacia la parte trasera del atestado tren...

La verdad no tenia ni idea de que ruta seguía o en que estaciones paraba, pero lo único que tenia que hacer era bajarse en la siguiente estación, mirar el mapa y tomar la linea que lo dejara mas cerca de Privet Drive para poder llegar a hacer la cena de su "familia", el tren frenó en seco al llegar a la siguiente estación, pero una oleada de gente subiendose a este impidió que Harry logrará llegar a la salida, es mas la oleada de gente lo empujo contra el fondo del tren, asi que se  encontró atrapado entre la pared del tren y un sujeto mas alto que se frotaba contra su espalda cada vez que el tren aceleraba.

- Dis-disculpe pue-puede darme un po-poco de espacio - Dijo Harry en voz baja intentando girarse para mirar al tipo, pero viéndose irrefutablemente aprisionado por el cuerpo obviamente mas grande - Voy a ba-bajarme ya.

Una mano de largos dedos, que Harry comparó con los de un pianista, cubrió la boca del ojiverde, mientras que la otra con maestría sacaba la camisa de entre sus pantalones y se metía bajo ella hasta encontrar uno de sus pezones y empezar a masajearlo.

Harry se sacudió tratando de zafarse del agarre, pero solo consiguió que lo presionaran con mas fuerza contra la pared, logrando sentir un sospechoso bulto que se refregaba contra la parte baja de su espalda, el ojiverde tembló de miedo y su corazón se aceleró por el pánico por que... Eso no le podía estar pasando verdad? El era un chico y los chicos no eran manoseados por tipos en los trenes, eso solamente le pasaba a esas chicas de los vídeos "hentai" que a Dudley tanto le gustaba ver a alto volumen cuando Tía Petunia y Tío Vernon no se encontraban en casa.

Harry no sabia que hacer, se sentía tan indefenso, miró a los lados tanto como se lo permitía su atacante y se dió cuenta de que nadie se estaba fijando en lo que le estaba pasando, todos estaban inmersos en su propio pequeño mundo, abrió la boca para gritar, pero la mano que la cubría se lo impidió y dos dedos ingresaron a ella para jugar con su lengua, en ese momento la mano que jugaba con sus pesonez se detuvo y el ojiverde pensó con alivio que todo habia terminado, pero la mano simplemente bajó hasta desabrochar su pantalón y introducirse en sus boxer para acariciar su erección, lo cual al ojiverde le pareció extraño, por que el no estaba disfrutando eso.. Verdad? El en realidad no podía estar exitado por que un tipo lo estaba prácticamente violando en el tren, frente a todos y sin que nadie se diera cuenta.