Old house

830 76 10
                                    

Observé listas mis molestas arriba de mi cama, Layla estaba parada justo a un lado sin mencionar nada. 

—No sé cómo debería explicarte esto, es algo complicado y confuso de entender—Mantuve mi vista en el suelo asimilando la idea de que papá seguía con vida y no había manera de explicarlo.

—No tiene porque darme explicaciones, entiendo por lo que está pasando.

—Gracias Layla, le diré a Cameron que no estabas en casa cuando empaque, no te preocupes no perderás tu trabajo—Me acerque a ella para abrazarla.

—Debemos irnos—Aaron entra a la habitación y en seguida me separo de Layla—Ya me trajeron mis maletas. Bajaré las tuyas—Aaron toma cada una de las maletas colocándolas en el piso para así jalar de ellas y salir.

Saqué una mochila roja de mi armario y metí todo aquello que necesitaría a mano. Cepillo de dientes, pasta dental, loción, crema, etc. Al tener las cosas esenciales me dirigí a mi cajón de noche, donde abajo en el último había dentro una pequeña caja fuerte. Puse una clave de dígitos "08.08.00" mi fecha de nacimiento al igual que la de Shawn, solo que él era del año 1998 y yo del 2000. Escuché un pequeño click indicándome que ya estaba abierta, sostuve la pequeña perilla y la abrí mirando primeramente un sobre amarillento, donde adentro se colocaban mis papeles de nacimiento al igual que mi pasaporte y algunos papeles importantes. Los metí a mi mochila y seguido de eso el dinero que estaba dentro de esta, era el dinero que había obtenido gracias a la herencia del dinero que había obtenido por papá. Era bastante, ya que nunca lo necesité gracias a que mamá pagaba todo de mí. Pero pensaba que sería necesario llevarlo por sí acaso lo ocupábamos. No me preocupaba demasiado, ya que la mayoría del dinero estaba en una cuenta bancaria, aparte tenía dinero en una de mis tarjetas.

Cerré la caja y me puse de pie para quedar frente a Layla.

—Ten—Extendí mi mano entregándole dinero. Ella rápidamente negó.—Me ayudaste demasiado en esto, en verdad quiero que lo tomes. Si no los tomas no estaré en paz, por favor acéptalos y no me dejes con la mano extendida.

—____—Hizo un gesto de incomodidad.

—Tómalos, es una orden.—Ella me ve directamente a los ojos y sonríe.

—Está bien, su majestad.—Tomó el dinero.

—Nos vemos pronto.

—Sí.

Salí de la habitación, para después bajar las largas escaleras. Al tomar la perilla de la puerta y jalarla para abrirla me tope con el rostro confuso de Cameron.

¿qué diablos hace aquí tan temprano?

—¿A donde vas?—Pregunta entrando a casa quedando frente a mí.

—Lejos de ti, eres imposible Cameron. Tú estúpido plan ya no resultará como lo planeaste. Ya se que papá está vivo, no tienes que seguir ocultándomelo—Lleve mis manos bajo mis pechos y quite aquel anillo de matrimonio que me había dado hace menos de dos meses.—Quiero el divorcio. No me importa el tiempo que lleve a cabo los términos, ya no viviré más aquí.

—No te lo daré.

—¿No? Entonces te demandaré, por obligarme a casarme contigo siendo yo menor de edad. Todo tu futuro se irá a la mierda.—Coloque el anillo sobre su mano y pase por su lado para salir de aquella casa.

Sinceramente me sentí mal, sentía como si me estuviera a punto de dar un ataque de ansiedad. Todo lo que estaba pasando era absurdo y estúpido, tenía tantas cosas en mente que ni sabía cómo esto se solucionaría. Mamá me había mentido sobre papá, ahora sabía que estaban divorciados y que él estaba con vida. Cameron había intervenido para obligarme a casar con él asimilando que la empresa había quebrado. Mamá había botado a su propio hijo, y lo peor de todo era que Shawn había encontrado a alguien más quien lo hacía feliz. Mientras yo me estaba enfrentando con tantos problemas que estaban a punto de matarme.

Del odio al amor-¿Shawn o Cameron? Where stories live. Discover now