El castigo de un dios

Castigo

Estaba en su celda con un libro en las manos, esperando el siguiente castigo, se había enterado que el padre de todo había estado planeando un nuevo castigo para él. Lo habían encerrando después de lo que hizo en Nueva York para que "recapacitara lo que había hecho" pero al parecer eso no era suficiente para Odín.
Escuchó como se abría la puerta principal. Sintió un pequeño miedo que lo invadía pero hizo lo posible para no mostrarlo. Un guardia se posicionó enfrente de su celda
- El padre de todo quiere hablar contigo
- Yo no quiero hablar con él- dijo levantando la vista de su libro
El guardia entró a la celda y le colocó unas esposas atadas a una cadena de la cual el guardia tiró e hizo que Loki se levantara.
Caminaron por los largos pasillos y llegaron a una sala en la cual se encontraba Frigga, Thor y Odín. El guardia se retiró dejándolos solos
- ¿A caso me vas a liberar?- dijo en un tono sarcástico
- No, no es eso
- ¿Entonces? No creo que me hayas sacado de ahí sin alguna razón- él sabía perfectamente el por qué estaba ahí pero se divertía con el espectáculo que seguramente se armaría en aquella sala
- Voy a liberarte de tu celda, Loki- el aludido mostró por unos breves segundos confusión, hace unos momentos le había dicho que no lo liberaría y ahora se estaba contradiciendo- pero te impondré otro castigo. Te quitaré tu magia y te enviaré a Midgard
- ¡No puedes hacer eso!- gritó enfurecido.
- ¡Yo hago lo que me plazca!- le devolvió el grito
- ¡Prefiero que me tripliques la sentencia a que me destierres a Midgard!
- ¡He tomado una decisión y todo se hará como yo ordene! Tendrás que aprender a ser uno de ellos para poder volver- levantó su teidente y lo impactó contra el piso, otro guardia apareció, tomó las cadenas y se dirigieron al Bifröst
- ¡No me puedes hacer esto!- gritaba mientras forcejeaba
- Lo siento Loki- susurraron Thor y Frigga, sabían que era lo mejor para él pero les dolía verlo así.
Llegaron con Heimdall, el cual ya tenía el portal listo
- No me hagan esto- dijo con voz seria
El guardia lo tomó de las cadenas y sin previo aviso lo empujo hacia el portal.