• 𝚂𝚎𝚎𝚜𝚊𝚠 • (𝚈𝚘𝚘𝚗𝚖𝚒𝚗 +18)

15

-Esta es la ultima caja.-me dijo sonriendo y dejando aquel objeto sobre la mesa.

Algunas gotas de sudor se asomaban por su frente, el cual limpiaba con su pulgar, que al igual que el resto de sus dedos era largo, de sus manos un sin fin de venas resaltaban; demasiado varonil.

Sus ojos mantenian un brillo puro y eso hacia que resaltará el marrón de sus ojos; sus orejas eran grandes pero no se veían nada mal, la proporción de su cuerpo las hacian perfectas en el, su piel totalmente diferente a la de YoonGi era canela y un tanto bronceada. Era demasiado simpático y guapo.

-En verdad muchas gracias, creo que ya abuse mucho de tu amabilidad.

-Claro que no, hace meses atras yo tuve que pasar por lo mismo, mudarse es algo cansado y más cuando él trabajo es para ti solo.- caminó hasta quedar frente a mi, sonriendo y colocando sus manos sobre cada lado de su cintura.

-Bueno, tienes razón, pero aun así muchas gracias.

-No tienes que.-hizo un ademán con su mano, fingiendo una mueca de desagrado.-¿quieres que te ayude con eso?- el hecho de no poder romper la cinta con la tijera fue tan obvio que se ofreció a ayudarme.

-Por favor.-susurre entregando aquel objeto punzante en sus manos, el deslizo la caja frente a el y algún movimiento en falso provoco que las tijeras resbalaran de sus manos y cortaran su dedo meñique.-oh, demonios, ¿estas bien?.

Tae junto un poco sus cejas y rápidamente llevo él liquido rojo que se asomaba de su dedo a su boca, dejando caer las tijeras al suelo.-¡auch!.-se quejo despues de retirar su dedo, aquel liquido no cedía.

-Ven sientate aqui, voy por algo para curar tu dedo.

Unos cuantos minutos pasaron, desinfecte su herida que no era tan grande pero si un poco profunda; me encontraba colocándole una pequeña bendita, su piel era suave y el tenerlo asi de cerca me hizo degustar de su loción, era fresca, un poco dulce y un poco fuerte.
Pero perfecta para él.

-Listo.-susurre cuando termine de colocar la bendita y lo mire con una sonrisa, la cual no paso mucho para que fuera correspondida.

-Tus ojos... Son muy hermosos.

Rápidamente mis ojos conectaron con los suyos, su rostro era serio y mordía un poco su labio inferior, mi cuerpo comenzó a sentir escalofríos y mis mejillas comenzaron a tornarse un poco rojizas.

-G-gracias.-balbucie un poco bajando mi mirada a mis pulgares los cuales jugaban entre ellos.

-Es la primera vez que veo unos ojos tan grises y expresivos, son muy lindos.

-Los heredó de su padre.

Y derrepente todo sonrojo y escalofríos se fue al infierno cuando mi cuerpo se tensó al escuchar la fria voz de YoonGi, levante mi mirada y lo vi recargado en la puerta la cual Taehyung no había cerrado; estaba cruzado de brazos contemplando la escena, su rostro lo decia todo él no estaba nada feliz.

Tae se puso de pie casi al mismo tiempo que yo, ambos lo miramos mientras él caminaba hacia nosotros, mientras metía sus manos en los bolsillos de su pantalón.

-¿Tu eres?

-Ohh, hola soy Taehyung, vivo justo enfrete de este departamento.

-El me ayudo a subir algunas cosas YoonGi y corto su dedo por accidente asi que lo cure y-

-No me interesa.

Frunci mi ceño era la típica arrogancia de siempre, Taehyung me miro aun tanto confundido y lo entendía muy bien YoonGi estaba siendo tan mal educado.