Diario de Pacifica 9

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12 de agosto
    Querido diario:
    Este fue el día más raro que tuve, todo iba bien, Dipper y Mabel iban a tocar mi puerta, les abrí sin que llegasen a tocar el timbre, trajeron a Pato, el cerdo mascota de Mabel,  nos pusimos manos a la obra, entramos a cuartos que ni siquiera conocía,  era porque no tenía tiempo, entramos a un cuarto que ni conocía,  cuando entramos, solo sentí mareos, de pronto sólo había oscuridad, no sabia que estaba pasando, cuando cobre la consciencia, solo estaba oscuro, hasta que una luz apareció,  me dirigí hacia allí,  la luz cada vez se hacía más blanca y luminosa, cuando llegue al final del camino, todo iba bien, llegue a la mansión,  entre, las puertas se abrieron, era la fiesta, todavía me acordaba de ello, todo iba bien, hasta que apareció el fantasma y convírtio a todos en madera, hasta Dipper, por suerte ya sabia el final de esta historia, salvo a todos, mi padre me castiga, me encierro en mi cuarto después de unas golpes que me dio mi padre por manchar el nombre de mi familia, pero eso no era el resultado.
    Ahí estaba yo, a punto de jalar la palanca, pero no se porque, no lo jalo mi otro yo, me estaba viendo a mi misma, vi que  me entraba al refugio de mis padres,  el leñador, en voz alta, no se lo que dijo, empezó a quemar la mansión,  fui a bajar la palanca, pero no podía,  estaba atascada, seguí intentado, pero nada, la mansión empezó a arder, intente con mucho esfuerzo pero no lo logre,  al final el quemo la mansión y, solamente vi que todos los que estuvieron en la fiesta fueron hechos cenizas, los gritos de ellos parecía ser que arduo podían ver y sentir, quise ayudarlas, pero todo murieron quemado; incluso Dipper, que fue agarrado por el fuego, aun oia los gritos de el pidiéndome ayuda, no se porque, pero todo se puso oscuro, las memorias pasaron sobre mi cabeza, memorias antiguas, de mi niñez, solo recordaba la triste historia, la única vez que pensé buscar a mis verdaderos padres, solo lo pienso, era niña, mi padre tenía el cabello negro y mi ladre el cabello casi castaño, no supe si era o no la verdadera hija de los Northwest, solo espero que así no sea, el grave daño de mi familia hacia la sociedad, ganando dinero de estafas, engaños.
    Los recuerdos pasaban sobre mi cabeza, la vez en que gane primer lugar en el minigolf, los únicos que me recibieron con felicitaciones fueron los sirvientes, recordaba que mi padre me pegaba cada vez que lo desobedecia, olvide porque siempre trataba mal a las personas del pueblo, era culpa de mis padres, el odio lleno mi corazón, mis padres fueron los únicos responsables de que la gente no me miraba por amistad, solo por mi dinero o porque no me querían de su vista, odio a mis padres, el único chico que me ayudó a enfrentarlos fue, Dipper Pines, el era mi primer amigo de verdad que no me buscaba por dinero o estatus social, sino porque tenia que hacer lo correcto y no seguir los pasos de mis antepasados,la maldad que hicieron.
    Al final vi la escena que jamás quisiera, estaba caminando, en escombros, el fuego salía de donde sea, solo vi a Dipper y Mabel tiradas en el suelo, estaban sangrando, solo me puse a llorar y al gritar sus nombres.
    Fue solamente un sueño, no se lo que paso, pero cuando vi a mis dos mejores amigos, Dipper y Mabel, les di un fuerte abrazo  a ambos, no quería perderlos,  jamás.
    Nos despedimos con un fuerte  abrazo, solo Mabel parecía estar triste, por suerte todo acabo bien, creo.
    Encerré el cuarto para no volverlo a ver, creo que Dipper sigue usando esa gorra de la leñadora, creo que lo cambiare. Me gustaba más su gorra de pino, buscar uno, mientras tanto iré a dormir.
    Adiós querido diario.
    

El diario de Dipper y Pacifica [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora