EL EGOISMO

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Muchas veces me he puesto a pensar que el modo de actuar de cada uno de nosotros es en base a lo que pensamos. El dar una opinión cuando se está controlado por la ira puede resultar un arma de doble filo pero contiene una gran parte de sinceridad, después de eso aunque en tu estado de equilibrio digas lo contrario o niegues lo dicho se cree mas las premisas de tu estado alterado. No puedes prometer algo en tu estado de melancolía, a veces soltamos juramentos para sentirnos protegidos. Decir halagos en tu estado de armonía, elevar egos como si fuera la única medicina.

¿En qué momento pensaste en la otra persona ?

Por conseguir algo eres capaz de soltar bellas palabras, cual sirena hermosa en pantano tenebroso; eres capaz de ser un fiera en el sexo para detenerme después de tirarme como escoria; eres capaz de prometer el cielo y la tierra así como los pactos sagrados de una vida eterna bajo los ojos divinos;  eres capaz de tratarme de una manera maravillosa cada vez que quieres recuperarme del charco de tus impulsos; eres capaz de victimizarte haciéndome ver que el único culpable soy yo; eres capaz de manipularme con los recuerdos bellos que pasamos, si quisieras ese futuro digno que tanto reclamas lo valorarías.

No soy tu maldito juguete que cuando se te pega la gana me tratas bien; no soy tu objeto sexual cuando se te llena la cabeza de hormonas que de seguro tu mente llenó de lujuria cuando viste algo en la calle o en Internet.

Ya basta de dar besos solo por corresponder, ya basta de follar solo para quitarse las ganas de semanas, ya basta de decir palabras poderosas como si fueran palabras sencillas de pronunciar y sentir.
Besos, abrazos, sexo y los mil te quieros  se pueden conseguir en cualquier parte.

Quiero sentir las vellosidades erisarse mientras damos ese ósculo apasionado con los brazos dibujando la silueta de nuestros cuerpos, besando cada imperfección de nuestra geografía imperfecta, sentirme dentro tuyo en la cama y en lugar de venirme eyacularte amor.

Todo es esta vida es momentáneo. Quisiera meterme en nuestras fotografías. Se suicidó una lagrima.

Me dormí queriéndote.

Diario De Un SolitarioWhere stories live. Discover now