AMOR A LA MEXICANA

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Una semana.

Una semana había pasado de aquella mala experiencia que tuvo. Una semana sin poder verlo, claro cada vez que trataba de hablar con él. Simplemente la ignoraba. Cada vez que quería arreglar las cosas y explicarle, se iba de su lado para no verla.

No solo eso, sino que cada vez ella estaba más triste. Cuando Merle se enteró fue directamente con su cuñada, ya que sabía que Daryl le contaría solo lo que vio o quiso ver. Conocía perfectamente a su hermano para saber que no le diría toda la verdad. Así que tenía que asegurarse de lo que realmente había pasado.

Aun así la tristeza de Victoriano por no verlo, ni acariciar su cabello o cuerpo, en no escucharlo, no paraba. Estaba más deprimida que una madre después de su parto sin anestesia.

Acostada en su gran sillón blanco con los brazos estirados. Junto a su celular y teléfono descolgado esperando de que alguna forma la llamara, además de que sostenía el control de la tele, apretando el botón, pasando canal por canal hasta encontrar algo que la entretuviera.

Escuchó el timbre sonar, ni siquiera tenía ganas de levantarse. Escuchó el abrir de la puerta y solo eso pudo hacer que levantara su nuca para ver quién era. Cuando miró, se acomodó nuevamente, sin moverse.

-...Hey-

Escuchó la voz de Merle. Ella no lo miró, ignoró su presencia manteniendo su vista fija en la pantalla.

El mayor se puso de cuclillas frente a ella. Vic quedaba en la misma posición sin mostrar alguna expresión.

-Enana-

-Vic-

Le llamaba, pasaba su mano frente a su cara y seguía igual.

-Oye, deja de estar como una maldita momia y hazme caso joder!-

Fijó sus ojos en él y volvió a la tela. Merle se desesperó hasta patear la mesa, haciéndola volar. Ella ni se inquietó.

-Escucha, no eres la única que lo está pasando mal sabes?-Él esta de insoportable-

-Y?-

-Cómo que y?-Es enserio? Cómo pueden ignorar ese tipo de cosas. Me están volviendo loco!-Y son los dos. Los dos tienen la culpa. Deberían de arreglar sus putos asuntos como las personas normales. No andar mendigando como putos niños berrinchudos!-

Le replicó fuertemente, ella puso atención a sus palabras. Al instante llevó las manos a sus ojos comenzando a sollozar.

Dixon se espantó al principio, era la primera vez que la escuchaba llorar de verdad. No eran unos simples chillidos de niña. En verdad que era de sentimiento.

-Él... Él no quiere verme-

Dijo entre hipidos, él se acercó quitando sus manos y observó sus lágrimas derramadas por sus mejillas. Sus ojos cafés estaban enrojecidos. Sintió un pequeño dolor en su duro corazón al verla así, por su culpa había reaccionado mal.

-Ya, deja de llorar!-

-No, no puedo. Aunque quiera hablar con él, no escucha!-

-Tendrá que escucharte. Ese idiota está como tú. No puede hacer nada sin enojarse como una puta. Está mas insoportable que otros días-Y apenas ha pasado una maldita semana-

-Pero ya le expliqué. Le di pruebas para que viera que no mentía. Y aun así, esta de payaso. No quiere creerme, a pesar de que comprobó todo-

-Pero..-

-Vio con sus propios ojos las cámaras, hasta Negan se lo dijo también. Ese día me mandó a la chingada y también dijo que no quería verme nunca-

MEXICAN TASTE ® (D.D.) COMPLETAWhere stories live. Discover now