final

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Los besos eran desesperados, no iva a permitir que otro la poseyera más que él, que sólo soñara con él, nadie más que el, parecía que por primera vez sentía aquel sentimiento, después de verla abrazada a Kanon su furia había crecido, tanto que quizo golpear al gemelo menor por tocar un centímetro de la blanca piel de aquella joven, tomo sus labios entre los suyos, besandolos con furia, se separó de ella y miró los labios ahora rojos e inchados de la joven.

—Milo...—susurro su nombre mirandolo a los ojos—yo......quiero que me hagas tuya—miró un poco sonrojada al joven de pelo azul, el que abrió los ojos al oír sus palabras

—Minako ¿Sabes lo que me pides?—la miró profundamente, sus esmeraldas chocaron con los safiros de ella.

—Nunca lo estuve tanto como ahora, eres el hombre con el que deseó estar, estoy segura—sus mejillas se tiñeron de un carmesí intenso—nun....—una mano la tomó de la cintura bruscamente haciendo que ella quedará pegada al pecho del joven.

La besó, con mucha más pasión, poniendo su mano en la nuca de la  muchacha intensificando el beso, sus manos subieron y bajaron por la espalda de Minako, mientras besaba sus labios, había pasado tanto tiempo...que había extrañado tanto el aroma de una doncella en sus fosas nasales, había olvidado el sabroso sabor de los labios de una mujer, había extrañado tener un cuerpo caliente estar cerca al suyo.... no había tocado a una Solá mujer desde la última batalla santa.

Minako cayó sobre las blancas sábanas de la cama del templo de Escorpio, a continuación él la siguió cayendo enzima de ella, él había bajado a su cuello besandolo con desesperación, ella subió sus manos hasta la cabeza del chico enredando sus dedos con largos cabellos azules, soltó un suspiro cuando el joven mordió el lóbulo de su oreja, eso había hecho que la pasión dentro de el joven se hiciera más fuerte

***

Usagi estaba parada junto a la langosta según ella, ella una vez había querido ir a buscar a Minako pero DeahtMask se lo prohibido diciendo.

—No querrás interrumpir lo que hace esa mocosa—se sirvió una taza de vino sentándose en la mesa de la cosina del templo de cáncer

—¿Por que lo dices?—pregunto Usagi sin saber a que se refería el joven de cabellera azul

—hace unos minutos, fui a visitar a Dite pasando por el templo del inservible del bicho ése y a que no adivinas que me encontré—se río entre dientes el caballero de Cáncer

—A Milo comiendo manzanas—fue la respuesta de Usagi muy entusiasmada

—si estaba comiendose algo pero no eran manzanas—hablo el Death con una sonrisa juguetona

—según lo que sé de Milo por Minako es que sólo tiene manzanas en su hielera—puso uno de sus dedos sobre sus labios de forma pensativa

— No, no estaba Camus ahí—negó con la cabeza el cuarto guardián

—no habló de Camus, me refiero a un refrigerador—Usagi miro a Death como diciendo deja de interrumpirme

—la refrigeradora sería la casa de Acuario pero bueno sigue—

—si le gustan las manzanas quizá sea un pay de manzanas—Death sólo negó—entonces quizá jugo de manzana?

—No! Usagi razonar contigo es más difícil que hacerlo con Aioria—se alteró Death—cuando entre escuché muchos gemidos, así que me entra la idea de que era Minako, al parecer lo estaba disfrutando mucho—se relamio los labios

Amantes De La LunaWhere stories live. Discover now