Capítulo tres: confesión

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Se sentirá en deuda después de como lo trató? Y por eso ahora estaban juntos sentados uno al lado del otro en la habitación de Kirishima leyendo comics?
Ya había pasado un par de semanas y esto de juntarse cada noche a leer comics era una especie de riguroso ritual,  alguna que otras veces se les unían Sero y Kaminari haciendo a Bakugou más cercano a los amigos de Kirishima. Con el tiempo volviéndose todos amigos.
Pero algo ya no andaba bien, en especial para el rubio que algunas veces sentado al lado de Kirishima, rozando sus piernas y hombros sentía su corazón saltar o cada vez que el pelirrojo descubría algo nuevo o veía algo genial iba directo a Bakugou a mostrarle el cómic. No sabe lo que es este sentimiento que le da choques eléctricos cada vez que por accidente chocan o se tocan pero no puede ni quiere alejarse.
-Hombre este es jodidamente bueno, en especial el protagonista, es tan masculino y genial, me hace acordar a ti bakugou- una de las tantas veces que Kirishima lo interrumpía en la lectura y le mostraba algo nuevo.
-Que dices kirishima, dame eso- efectivamente había ciertas partes en las que Bakugou se parecía a ese protagonista, Kirishima rompió el silencio.
-Te gusta? No lo has dejado de leer ni un segundo, este es mi favorito así que no puedes llevártelo pero si puedes venir a leerlo cuando gustes- regalándole una radiante sonrisa.
Al otro lado de bakugou había una pila de comics que Kirishima ya había leído pero no le importaba leerlo de vuelva mientras estuviera con bakugou a solas, agradecía que en este día Sero y Kaminari habían decidido irse de compras. Lo vió tan concentrado leyendo que no le quiso ni pedir permiso y se abalanzó un poco sobre el para tomar el primer cómic de la pila que tenía Bakugou a su costado, ya con este en la mano se percató de unos ojos rojos bien abiertos que lo miraban atentamente lo que causó un sonrrojo enorme en el que ni se diferenciaba su pelo de su cara
-Ba.. Bakugou, lo siento yo... No quería molestarte y me abalance a tomar el cómic y... Y....-
Bakugou bajo sus manos junto al cómic que leía y sostenía quedando boca abierta al observar tan de cerca a Kirishima quien llevaba el pelo húmedo y para abajo, lo observó demasiado para notar su enorme sonrojo lo que le pareció lindo y adorable. "LINDO Y ADORABLE???"  sus pensamientos se amontonaban en su cabeza queriendo escapar pero ninguno se movía, o eso pensó.
Kirishima solto el cómic y se apoyó sobre este para tomar un poco de impulso y suavemente, despacio acercarse a la cara de Bakugou.

Sus respiraciones ya se entrelazaban y los ojos del Rubio y del pelirrojo estaban atentos a los labios entreabiertos del contrario. Iba a suceder Kirishima lo iba a besar Bakugou levemente comenzó a cerrar sus ojos rojos expectantes por solo querer sentir lo que venía, como queriendo el beso, a lo que el pelirrojo le pareció sumamente adorable.

Alguien tocó la puerta y arruinó por completo el ambiente, bakugou abrió los ojos muy molesto viendo hacía la puerta sumamente enojado y se levantó rápidamente, Kirishima lo siguió quedando estático en su lugar mirando fijamente la puerta.
Kamirani y sero se encontraban del otro lado hablando animadamente
-Que pasa con Kirishima que no abre?, HEY HOMBRE TRAJIMOS NUEVOS COMICS DE LA TIENDA - de todos los días Kirishima maldecia en su cabeza que hayan vuelto tan temprano.

Rápidamente se abrió la puerta a lo que ambos chicos observaron a Bakugou salir sumamente rojo del cuarto de Kirishima y dar un portazo una vez dentro de su propia habitacion.
-Kirishima? - sero lo llamó, estaba ahí parado ya sosteniendo el pomo de la puerta
-KIRISHIMA- Volvió a llamar con más fuerza.

Rápidamente tomó los comics que traían sus amigos y los arrojó sobre la cama y arrastró sus dos amigos a la sala común donde les explicó lo sucedido.

-Sus ojos... Sus ojos estaban a punto de cerrarse el realmente me iba a dejar besarlo- Kirishima se tapaba la cara y no podía evitar una enorme sonrisa
-Hombre nosotros solo queríamos estar un rato con ustedes ya que mañana nos iremos a nuestras casas.
Era viernes así que los estudiantes comenzaban a salir con bolsos y hasta maletas. Era evidente todos iban a visitar a sus familias. Menos curiosamente Kirishima que no le había dicho nada a sus padres sobre ir este fin de semana y bakugou que realmente no quería ver a su molesta madre.
somos unos idiotas- dijo culpandose Kaminari.
-Estúpido que esperas confiesale tus sentimientos es obvio que siente lo mismo si no, no hubiera querido cerrar sus ojos, no te hubiera esperado, no estarían tan juntos como lo han Estado estos últimos dias- decía animadamente Sero,  Bakugou se había ganado de en cierta medida su bendición para estar con su amigo.
-S... Si, que mierda hago hablando con ustedes, nos vemos el lunes, si pasa algo les mensajere chicos - Kirishima sentía su corazón explotar y subió rápidamente por las escaleras. Esperar el ascensor era sumamente frustrante, iba a declararse y nada más le importaba.
Llegó al piso donde estaba su habitación junto a la de Bakugou y dió vueltas muy nervioso antes de decidirse si tocar la puerta

Bakugou por su parte no sabía cómo reaccionar, era la primera vez que sentía las famosas "mariposas" en su estómago, de las que muy pocas veces escuchó hablar y recordaba a cada segundo los labios de Kirishima acercándose y él cerrando sus ojos, le causaba tal vergüenza que no quería ni ver ni hablar con nadie agradecía que era viernes y todos se iban. Hasta que escucho al pelirrojo hablarle del otro lado de la puerta.
Toco una vez tímidamente y al darse cuenta tocó dos veces más con mucha firmeza.
No hubo respuesta. Espero un largo rato y nada.
-Bakugou se que estas ahí, sal porfavor tengo algo muy importante que decirte, de... De verdad quiero verte, Blasty-.
Abrió estrondoladamente y agarró a su amigo del cuello de su camisa para hacerlo pasar cerrando la puerta detrás de el de un portazo que se escuchó hasta la sala común.
-Que es lo que quieres, idiota, que es lo que me hiciste- bakugou estaba dispuesto a reprocharle ese dolor en su pecho y esos molestos aleteos en su estomago
-Oye...  No se que te hice ni de que me hablas pero, espera un segundo... tranquilizate... y dejame hablar porfavor- estaba confundido ante la reacción del Rubio.
Que le había hecho realmente no lo sabía, solo trato de besarlo, pero en realidad nada había pasado.
-Yo... Yo realmente- comenzó dudando Kirishima
-Ni una mierda, no quiero escucharte dudar, solo dime que es este sentimiento- el rubio agarro su remera donde se situaba su corazón y estrujó fuertemente -M... Mi corazón duele y ahora late como loco y no lo entiendo, seguido de este revoltoso sentimiento en mi estómago, todo empezó después de eso... - se sonrojo al recordar el casi beso entre ellos.
-Bla... Blasty no sabía que... Que te sentías así,  yo... -
-no lo soporto, dejá de dudar, parece ser tu culpa, no quiero verte cabellos de mierda, largo!- seguido de eso corrió y se tiro a su cama boca abajo y tapó su cabeza con la almohada, no lograba calmarse y eso lo irritaba a sobremanera.
El pelirrojo se acercó miedoso viendo como Bakugou se rehusaba a escucharlo, con un terrible dolor en su pecho, suspiró hondo y se sentó a su lado en la cama, acercó su boca y dijo algo fuerte para que pudiera escucharlo
-Si no vas a escuchar te lo demostraré Bakugou - levantó rápidamente la remera del contrario y pasó una mano suavemente por la espalda del rubio, no podía creer lo que estaba haciendo, según recuerda el solo iba a declararse e irse pero ahora estaba tocandolo descaradamente. Era consiente de que no tenía alternativa y Bakugou se había tensado ante su tacto, explosiones se escuchaban provenientes de sus manos pero por alguna razón dudaban en moverse.

Kirishima tomó ventaja de la duda de su compañero y se subió sobre el tomando con una mano los brazos de su amigo y posandolos arriba de la cabeza del mismo para no morir. Se acercó a la espalda del Rubio y respiró sobre esta pesadamente, notó como el Rubio se estremeció, empezó dando un beso, sabía que si dudaba era hombre muerto, así que sin dejar a bakugou pensar dio otro seguido de otro, seguido de una leve mordida que ninguno se esperaba pero esa espalda, esa espalda volvía loco a Kirishima.

Bakugou dejó de pelear sin embargo el pelirrojo no lo soltaba, empezó a llamarlo pero Kirishima no parecía escucharlo, es más el otro sintió un gruñido luego de que lo mordiera y esto logró exitarlo desmedidamente. Bakugou no podía más y con gruñidos y jadeos ahogados por la almohada empezó a sentir una mano ajena dirigirse a su entrepierna haciéndose paso por el colchón y las sabanas, todo su cuerpo se tensó y Kirishima con sus afilados dientes quitó la almohada de la cabeza del rubio, se acercó a su oído
-blasty esto es lo que provocas en mi todas las noches, no puedo, no quiero parar, si no reaccionas y no reconoces con esto mis sentimientos te dejaré en paz- al terminar la oración el pelirrojo tomó el miembro de su amigo y se dió cuenta de lo erecto que estaba
-wohaa, Blasty - lo llamó con una voz realmente ronca que hizo que Bakugou gimiera. El pelirrojo acercó su entrepierna al trasero que quedó en medio de el y comenzo a frotarse logrando más gemidos de Bakugou
-maldita sea Eijirou más rapido-
Kirishima paró todo automáticamente luego de escuchar eso y giró rápidamente a su amigo quien se soltó de su agarré y se tapó los ojos dejando a la vista su jadeante y entreabierta boca.
-Bla... Blasty? - trago duro al verlo así, en sus incontables fantasías el pelirrojo había imaginado todo pero la realidad superaba por sobremanera a lo imaginario.
-dejame verte blasty, dejame sentirte, dejame hacerte mío, BAKUGOU-
Tomó firmemente el brazo con el que tapaba su cara y lo apartó.
Sus ojos se encontraron y Kirishima no dudó un segundo en acercarse a su boca.
-Katsuki me gustas-
-Tu también me gustas Eijirou. -
Uniéndose en un hermoso y húmedo beso.

Esto es AMOR? Esto son Celos? Kiribaku~+18Where stories live. Discover now