Capítulo 14: Alegre despertar

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     Abro los ojos sin estar muy consciente de donde me encuentro, aún está algo oscuro, apenas y empiezan a salir los rayos del sol. A lo mejor sea un día nublado.   

     Intento moverme sin lograrlo por la cárcel humana en la que me encuentro. Sonrío, tenía demasiado tiempo sin dormir con alguien. Él está a mi espalda, uno de sus brazos rodea mi cadera y el otro mi pecho en un abrazo apretado. Necesito mear, pero ¿Cómo me levanto sin despertarlo?

     Vuelvo a removerme buscando que me suelte, pero nada, es imposible. Es un jodido toro, que está bien bueno y no quiero que me suelte nunca, pero tengo muchas ganas de mear, caramba. Estoy en una encrucijada.

—Mean. – Susurro acariciando su brazo. –

Escucho un gruñido de su parte. ¿Así gruñirá en el acto? Plan, a lo importante amigo.

—Mean, déjeme ir al baño. – Murmuro nuevamente. –

—Vuelva rápido. – Responde en voz muy baja y ronca. –

      Afloja un poco el agarre y salgo casi corriendo al baño. Libero mi vejiga dificultosamente, orinar con una erección es horrible. Las mujeres tienen suerte en ese sentido. Una vez controlado mi problemita, voy al lavamanos.

      Me miro al espejo, cabello desordenado, ojeras de infarto, descuidado, llevo una mano a mi boca, aliento horrible, podría matar a cualquiera que me oliera. Lo último es solucionable. Tomo la crema de dientes, vierto un poco en mi dedo y simulo que es un cepillo.

     La puerta se abre cuando estoy en eso, con un dedo en la boca, inclinado hacia adelante, todo desechable en la vida y el hombre que había dejado dormido minutos antes, se recuesta en el marco de la puerta, aún sin camisa, cruzado de brazos, mirándome a través del espejo, el muy maldito se ve perfecto, parece recién salido de esas revistas familiares ¿Cómo carajo se ve tan bien recién levantado? ¿Qué clase de pacto con el diablo tiene?

—A usted le encanta provocarme, ¿verdad? – Echa a andar hacia mí, posándose detrás de mí. —Usted debería ser ilegal para mi cordura.

     Se inclina pegando su pecho a mi espalda y estira su brazo tomando su cepillo de dientes. Con el otro brazo toma la pasta de dientes y rodeándome, la vierte en su cepillo.

     Cabe destacar que quedé petrificado. ¿Y cómo no? Tengo a un dios griego, sin camisa, totalmente pegado a mi espalda, tanto que puedo sentir... ¿Su teléfono? Debe ser su teléfono.

     Coloca su cara al lado de la mía y empieza a cepillarse. Cada vez quedo más loco con este hombre. Despierto de mi ensoñación y termino de limpiar mis dientes con el dedo, abro el grifo y cojo agua con la otra mano para llevarla a mi boca. Él copia mis movimientos y terminamos escupiendo el agua al mismo tiempo. Nunca pensé que algo así de asqueroso como escupir, se viera tan tierno.

—¿Podría mover su celular de mi trasero? – Pido mirándolo por el espejo. –

     El muy maldito solo sonríe y posa su mentón en mi hombro.

—Ese no es mi teléfono. – Susurra. –

     LLAMEN A LA FUCKING AMBULANCIA AHORA SÍ. ME DA EL HEARTATTACK, ¿Cómo es posible que eso sea su... amigo? Es decir, yo sabía que estaba bien dotado, pero no a ese extremo, la verdad...

—¿Qu-qué? – Naturalmente el sonrojo se hace presente en mis pómulos. –

     Mueve su cadera contra mi trasero y ahí lo siento totalmente. Está tan duro. Plan quiere. Se me hace agua la saliva.

—Espéreme afuera, hagamos el desayuno juntos. Así me enseña a cocinar. – Vuelve a murmurar. –

     Asiento con la cabeza, me escapo de entre sus brazos, y voy directo a la pequeña cocina de la suit. Llevo una mano a mi pecho, mi pobre corazón va a mil por hora. Me mojo la cara y reviso que tiene para hacer... Mmm, ¿Cómo le pueden dejar tantos ingredientes acá cuando se queda por tan poco tiempo? Ahh en fin, malditos ricos; unos panqueques pueden estar bien. Y aún le quedan fresas de las que comimos ayer. Dejo los ingredientes afuera a la espera del dios sexual que tengo a escasos metros de mí. Mientras, pongo a derretir la mantequilla. Podría derretirla entre sus abdominales y sería mejor.

     Cuando sale, sigue sin camisa y puedo analizarlo mejor, pectorales marcados, unos abdominales bastantes decentes, a comparación conmigo, que solo soy delgado. Y brazos bastante trabajados. Este hombre es realmente porno. No puedo dejar de decirlo.

—¿Listo para enseñarle al hombre más torpe del mundo? – Pregunta posicionándose a mi lado. –

—Eso solo se lo cree usted. – Ruedo los ojos. Si fuera tan torpe, no me hubiera hecho excitar con solo un toque íntimo en mis nalgas. —En fin. Empecemos. Haremos pancakes.

     Vierto la harina, sal, azúcar y polvo de hornear en un cuenco. ¿Por qué demonios le equipan la suit con polvo de hornear? En fin. Busco la mantequilla que ya está lista y la echo con cuidado.

—A mezclar. – Tomo un cucharón de madera. –

     ¿POR QUÉ DEMONIOS ESTE SITIO ESTÁ TAN BIEN EQUIPADO? AH.

     Se vuelve a posar a mi espalda, y coloca su gigante mano sobre la mía y mezclamos juntos. Esto es tan película romántica de Hollywood.

     Al terminar, quedó un plato bastante decente con las fresas picadas en rodajitas, cortesía de Mean Phiravich, que por cierto se cortó un poco el dedo. Y como la sangre es tan escandalosa, busqué rápido una servilleta y la mantuve ahí hasta que dejó de salir el espeso líquido rojo.

—Vaya a sentarse mejor. – Lo corrí en ese momento de la cocina. –

      Plan chef se había hecho presente en ese instante. Pero ahora, estamos sentados juntos, tranquilamente, apunto de comer.

     Realmente, podría acostumbrarme a esto.

—Está muy bueno. – Comenta antes de probar bocado. –

—Pero si no ha ni comido. – Respondo sin pensar mucho. –

     Veo su sonrisa pervertida. Ahí caigo en cuenta. No se refiere a la comida, si no a mí. MALDITA SEA.

—Creo que se dio cuenta solo. – Ríe y come un trozo del pancake. –

     Lo detesto por ser tan encantador. Y por dejarme estúpido.  

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      Lo intenté hacer lo más fluff posible, pero con las personalidades de estos men no pude hacer mucho xdxd. ¿Qué tal la linda mañana de estos "socios"? 

      Vale, pronto empezarán más viajes y más aventuras juas. <3 

      Como cena de hoy, daré, mmm, ¿cornflakes con leche? Seh, algo suave :v. 

-N'Anyi:)

Amor de Aeropuerto - MeanPlan/2wishWhere stories live. Discover now