Capítulo 15

86 15 3
                                    

Raúl empieza a contarme sobre Carol, como, después de insistir en salir de nuevo, él aceptó. Volviendo a salir otra vez con todo su antiguo grupo de amigos y tomando los hábitos que actualmente tiene. Me cuenta la reacción que tuvo Paula cuando se enteró que Carol y él habían vuelto.

−Y... −pienso si soltarlo, al fin me decido− ¿Tu hermana?

Raúl me mira detalladamente con la boca entre abierta.

−Mi hermana... −sonríe levemente mientras corta nuestro contacto visual− Mi hermana está muy bien.

Me está mintiendo pero por una parte le entiendo, quiero entenderle. Le veo destrozado por dentro tanto, que está dejado traspasar a su exterior.

−Bueno... −me levanto y me dispongo a dejarle a solas en la habitación.

−Lara, hay una cosa que se me olvidó decirte cuando te fuiste −se levanta de la cama de un salto y se pone frente a mí, cortando mi paso. Sorprendida, asiento con la cabeza dejándole hablar− Me alegré mucho cuando te dieron la beca, de verdad.

−M-muchas gracias, Raúl −le digo intentando ocultar mi asombro con una sonrisa− Gracias...

Ojalá no me hubiese ido. No me hubiese ido para que esto no pasara y seguir bien contigo. No me hubiese alejado de ti, ni aunque lo nuestro no hubiese funcionado.

−Me alegré pero por otra part... −no termina esa frase pero continúa− Nunca pensé que en la felicidad hubiera tanta tris...

−Tristeza −asiento apretando los labios sonriendo− ¿Mario Benedetti?

−Es lo que tiene trabajar en una biblioteca −dice encogiéndose de hombros mientras sonríe pícaramente− Algo se me queda mientras hojeo páginas.

Me hace reír sonoramente, me pongo las manos en la boca cuando me doy cuenta de lo sonoro que ha sido y miro a Raúl que sonríe poniéndose el dedo índice sobre sus labios.

Me sorprende, no lo voy a negar, que aunque esté tan cambiado siga trabajando en la biblioteca.

−Me voy, no destroces esto Raúl −le digo más bajo de lo normal mirando a nuestro alrededor.

Él mira la cama en un gesto rápido, después me mira a mí.

−¿No te quedas conmigo? −pregunta serio.

−¿Qué?

−Sí, pensé que dormirías conmigo.

−Y-yo voy a dormir con... −señalo la puerta mientras le miro.

−Tu novio −asiente con la cabeza.

−No es mi novio −aclaro de nuevo.

−Lara, quédate conmigo −susurra mirando al suelo− He visto como os peleabais en el coche. Cuando te he visto intentar pegarle me han faltado cojones para arrancar la puerta trasera y hacerlo yo.

Le miro fijamente y su última frase hace que mis labios formen una especie de sonrisa. Me decido a darle la espalda pero coge mi mano por la muñeca.

−Te prometo estar alejado de ti todo lo posible −añade− No, nada de promesas, lo verás. Solo sí te quedas a dormir... Podemos hablar, si quieres... Te cuento cosas. Todo lo que me preguntes...

Sigo su mano hasta sus ojos achinados. Asiento y me dejo llevar. Es mi oportunidad de hablar con él sobre su hermana.

Destapo la cama y me siento de nuevo en el borde de la cama para quitar mis zapatos y los desabrocho.

−¿Cómo os lo habéis pasado? −pregunta.

−Sí hubieses venido, lo sabrías −digo irónicamente y me levanto para verle. Está quitándose el jersey que llevaba y mis ojos se fijan en el tatuaje el cual echaba de menos, aprieto mis labios cuando termina de quitarse la camiseta y me meto la cama rápidamente− Muy bien, nos lo hemos pasado genial.

2. // No preguntes por qué  {COMPLETA}Where stories live. Discover now