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Emma y yo estábamos subiéndonos al avión que nos llevaría directo a Atlanta, Georgia para ver el Súper Bowl. Era un viaje express ya que llegaríamos el domingo a las 2am al aeropuerto de Atlanta y regresaríamos ese mismo día a las 11:30 de la noche.

-Ouch -se quejó ella al sentarse en el asiento. Había comprado boletos de primera clase así que no entendía su incomodidad.
-¿Pasa algo, nena? -pregunté.
-Es solo que estoy con la regla -respondió. -tengo muchos cólicos.
-Uff... si me hubieras dicho antes de abordar podría haber comprado pastillas, -acaricié su mejilla. -iré a ver si las sobrecargo tienen.
-Te amo, Jack -

Me incline para darle un último beso antes de levantarme. Caminé hacia la cabina para buscar a alguien y ahí estaba una chica que, honestamente, parecía que era su primer vuelo.

-Hola, ¿tendrás pastillas para cólicos? -pregunté. Ella elevó una ceja. -es para mi novia.
-Claro, buscaré en mi bolso ya que en el avión no tenemos -dijo ella.

Se agachó un pude ver un tatuaje en su espalda, desvíe la mirada y suspiré. Ella volvió a ponerse de pie y me dio una pastilla, volteé a ver la parte de atrás y decía butilhiosina respiré más tranquilo, no le daría a Emma algo dudoso.

-No drogare a tu novia -rodó los ojos.
-Si, lo sé -

Volví a mi lugar y Emma había puesto una película en su iPad, La nueva cenicienta era una de sus películas favoritas de la vida y la habíamos visto juntos tantas veces que ya hasta me sabía algunos diálogos.

-Ten -le tendí la pastilla y una botella de agua.
-Gracias, te amo -
-Yo también te amo -

Conecte mis audífonos a la computadora ya que ella estaba usando los inalámbricos y me recosté en mi asiento para ver la película. Mientras más avanzaba Emma se ponía más emocional e incluso llegaba a llorar en algunas escenas.

-Chad Michael Murray es el más guapo -suspiró.
-Si, es muy guapo -
-Aunque no podría decidirme entre él, Jensen Ackles y Ryan Phillippe -volteó a verme seria. -¿a quien elegirías tú?
-A mi -respondí con seguridad.
-No, no... si te dieran la oportunidad de salir con alguno de ellos -
-¿Tú? -
-Me encantan los ojos de Ryan, los labios de Jensen y bueno, de Jensen me gusta todo -se encogió de hombros.
-Pues ya sabemos cual es la decisión más difícil -
-Tal vez me case con alguno de ellos -se encogió de hombros.
-Si bueno, no lo creo -negué.
-¿Por qué? -
-Te casarás conmigo -me encogí de hombros ahora yo.
-Pero también con ellos -se acomodó sobre mi pecho para poder ver la película y yo me quedé dormido.

Me desperté cuando estábamos por aterrizar, Emma estaba echa bolita en su asiento cobijada por la manta que nos daban aquí. Suspiré mientras observaba su cara, nunca había visto algo más hermoso que ella.

-Deja de verme -renegó sin abrir los ojos.
-Eres hermosa -respondí.
-Claro, con ojeras de mapache y cabello como nido de pájaros -dijo ella volteándose para quedar frente a mi.
-Eres la persona más hermosa que he visto en mi vida -
-Jaaaaack -alargó la única vocal en mi nombre. -te amo.
-Yo te amo más -

Las ventajas de ir por tan poco tiempo era que solo llevábamos una maleta cada quien, a mi ya se me había hecho costumbre usar la que me regaló George y Emma llevaba una igual a excepción que la de ella era una edición limitada de colores, al parecer era la más nueva.
En el camino al hotel se puso una mascarilla y se la lavó en el lobby cuando llegamos. Subimos a la habitación y nos tiramos a dormir un rato en lo que amanecía.

Nos despertamos muy tarde, para cuando Emma estuvo lista era la hora de la comida, Emma quiso ir a IHOP y pues era obvio que yo no iba a desaprovechar la oportunidad de que ella comiera lo que quisiera.

Boys like me. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora