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Alguna vez se han preguntado, ¿Cómo sería la vida de un príncipe? La respuesta es simple, un príncipe se encarga de las conquistas, entretanto el rey la administra. Ser príncipe se basa en ir robando territorios mientras mi fama crece. ¿Eso está mal? ¿Está mal amar tu propia fama? ¿No es lo que todos desean? ¿Qué obtengo con tener fama? ¡Lo obtengo todo! En mi humilde opinión, cuando se tiene todo es ser afortunado. Así imaginen cuál es mi reacción cuando se decide tomar un territorio. Tan solo imaginen el regocijo que se siente. Más aún cuando es un territorio codiciado. Es como un juego. Un juego donde yo soy el ganador.
Un territorio es conocido por sus riquezas. San Valentino es ahora mismo uno de los lugares más codiciados. Un pueblo ubicado en la región de España, lamentablemente en estos momentos es perteneciente a Portugal. Una baja económica de España hace algunos años hizo que Portugal aprovechará esa oportunidad. Tomando una gran cantidad de territorios de esa región. Algunos años pasaron hasta que la economía subió, pero no atacaron, ya que esa región fue totalmente olvidada. Hace 10 años que el rey Iván Bruel tomó las riendas del reino, tomando su territorio perdido. Aunque la lucha por ese territorio aún no culmina. Unos meses atrás, el rey Iván comenzó a enfermar e hizo llamar a algunos reinos. Algunos, mostraron desacuerdo, otros no les importó y el restante aceptó, siendo Francia uno que los había aceptado. Unos días atrás recibimos una carta pidiendo unos favores, entre ellos estaba recuperar San Valentino. España debe recuperar lo perdido y así quizás Francia también gane algo.
Un detalle muy importante es que toda conquista se escribe en los libros bajo mi nombre. ¿Qué hace eso? Fácil, en un futuro lejano seguirán hablando de mí. Aunque uno luego de muerto únicamente gana méritos y agradecimiento. A pesar de las dificultades, de las brujas, rebeldes, y las magias perdidas, sigo en la lucha de tomar y proteger nuestros territorios. Haciendo que mi país se sienta orgulloso mientras represento mi título de Príncipe. ¿Cómo me agradece mi país? Fácil, un gran baile de gala donde el pueblo viene a agradecer y traer regalos.
Una fiesta como la que me encuentro en estos momentos. Caminó escuchando diferentes conversaciones que se mezclaban con el sonido musical que creaban un pequeño grupo de personas. En una esquina de la fiesta había un grupo de personas que me llamaban
la atención. Me acerqué para ver qué era lo que estaba ocurriendo, pero me encontré con una situación algo curiosa. Un anciano estaba en medio de esta pequeña multitud. Contaba animadamente de aquellos viajes que realizó en su juventud. Hablaba de muchos lugares e incluso de su hogar, Asia. Aunque lo que más me llenó de orgullo fue uno de sus comentarios
- Sé que he nacido en Asia, pero saber que crecí y tuve la oportunidad de servir a Francia me llena más de orgullo. -
Siendo príncipe del país y haberlo escuchado inflo mi pecho sabiendo que pronto sería yo el que llevaría la corona de ese país. ¿Quién no lo estaría? Allí me quedé escuchándolo. Escuchaba su juventud a través de sus palabras y emociones haciendo que me pregunte. ¿Él conoce a San Valentino?
- Yo he viajado el mundo entero y estoy orgulloso de que mi país lo vaya conquistando- inflaba su pecho liberando sus palabras con orgullo mientras algunos invitados le escuchan.
Cabe resaltar que muchos de lo que se encontraban escuchando al anciano estuvieron en una reciente batalla llamada, "La batalla del aburrimiento". La curiosidad mató al gato y no dude en preguntarle, acerca mi siguiente atraco. Recibimiento su respuesta.
- Por supuesto que lo conozco. La primera vez que escuche de él fue hace mucho tiempo atrás, cuando aún era de España. Ese lugar era otro más en esos parajes.- contaba- Hasta unos años atrás, volví a ese lugar cuando escuche del escape de la princesa. Jamás imaginé la belleza de esta, pero lo que más sorprendió era el gran bulto en su estómago. Estaba en estado y aun así ella lucia hermosa. Luego de eso no volví.-
Una historia de niñez que es real. Recuerdo un poco esa historia, aunque me intriga más el final que tenía esa historia.
- Entonces es cierto lo de la chica. -
- ¿Su hija? Si es cierto, dicen que es lo más hermoso que sé allá visto. Más hermosa que su propia madre, aunque con las mismas faciones que ella.- menciono el anciano.
- ¿Podría describir como era aquella mujer?-
- Ella era como un ángel. Sus cabellos eran como la noche, su piel como la nieve recién caída y sus ojos era como el color del mar. -
Siento que al el describirla de esa manera, está describiendo una muñeca de porcelana. Un hermoso ángel como había dicho él, aunque la realidad es que se escucha hasta irreal.
- Sé que hoy en día trabaja junto al plebeyo en aquella reconocida panadería.- agrego el anciano.
Francia conoce de aquella panadería. Aquel sitio donde el pan parece irreal, con aquel increíble e indescriptible sabor, especialmente es servido en la mesa donde mi padre y yo nos sentamos actualmente.
- Príncipe, creo que esto le gustara saber. Se dice que al príncipe de Portugal un día la vio quedando completamente flechado, comenzó a visitarla la gran mayoría del tiempo desde que su país tiene su control hace algunos meses. Siempre le deja saber su gran amor que le tiene a esta y ella astutamente lo rechaza. - seguía contando el anciano.
Le debo agradecer al anciano, me acaba de dar una pista para hacer caer a Natanael. ¿Lo podría destruir? Se dice que el amor hace locuras, veamos si es real.
- ¡Este viejo está loco, esa chica tiene que ser un sueño!- comentó riendo un desconocido de la multitud.
- Sí, como sus historias- comento otra persona haciendo que varios comenzarán a reír descontroladamente.
Entre las burlas y carcajadas veo cómo se acercó a mí y me tomó del brazo para acercarme a él.
- No permitas que el Príncipe de Portugal la tenga a y una advertencia cuidado con su belleza. - menciona antes de verlo desaparecer entre los invitados.
Esa noche mis pensamientos solo imaginaban aquella hermosa muñeca de porcelana.
Continuará...
(Si notan algún error ortográfico, no duden en escribirlo en los comentarios.)
